A través de los medios de incomunicación de masas, el comercio y profanación política de los muertos (guerra de las manifestaciones) y la Muerte (caso IdJ Chaos) siembran la conciencia de los más débiles con semillas endemoniadas.
Antígona fue durante siglos el símbolo más puro del combate entre la libertad del individuo y el poder desalmado del Tirano. Para Antígona, la libertad se funda en el deber de memoria y honras fúnebres para sus hermanos caídos en lucha fratricida, a las puertas de la Ciudad. En Caína, la profanación de los muertos es una manera endemoniada de destruir la libertad manchando la puerta de cada casa con la cruz del odio.
[ .. ]
PS. En el Times de ayer (5 febrero 2007), una lectora de Donosti, Ainoa, escribía: “Muchos vascos odian a España. Y viceversa. Muchos vascos odian a otros vascos. Y viceversa. Necesitamos llegar a un compromiso y dejar de usar a ETA como un juguete político”.
El juguete fascinado por el derramamiento de sangre inocente, para conseguir sus fines, es un ser endemoniado. Los demonios corriendo por el monte y las calles son profecías de Quevedo y Bécquer: De la inexistencia de España.
Robert says
Leido en “El Pais” ( España )…
“La organización terrorista ETA tiene en Francia “escondites en casa de colaboradores en los que se guardan cientos de armas y explosivos”, según ha afirmado hoy un responsable policial francés durante el juicio a siete presuntos miembros de la banda en París.”