Najat Vallaud-Belkazem, HalleFreyssinet, 22 octubre 2011. Foto JPQ.

Se trata de una metamorfosis de inmenso calado, claro está.

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DERECHAS, MATRIMONIO HOMOSEXUAL

Nicolas Sarkozy y François Hollande han “instalado” en el corazón político de sus campañas electorales a dos hijas de inmigrantes marroquíes, convertidas en arquetipos de la inmigración y la integración “feliz”, encarnando dos modelos enfrentados de la mujer francesa, de derechas o de izquierdas.

Sarkozy ha rescatado a su ex ministra de justicia, Rachida Dati, para dar a su nueva campaña el matiz, el rostro, la imagen de la hija de un albañil marroquí, inmigrante, capaz de escalar hasta los más altos puestos del Estado gracias a su trabajo. Ultra presente en los estudios de radio y tv, de nuevo, Dati se presenta siempre de la misma manera: “Estoy orgullosa de mis valores de mujer francesa de derechas”.

François Hollande, candidato socialista a la jefatura del Estado, en las elecciones presidenciales, a dos vueltas, del 22 de abril y el 6 de mayo, ha elegido como portavoz personal a Najat Vallaud-Belkazem, que nació en Marruecos, hija de padre albañil, inmigrante, y creció en un suburbio de una ciudad francesa de provincias, Amiens. El PS la eligió hace tiempo como responsable en temas de “sociedad”: matrimonio homosexual, bioética…

CENICIENTA Y MADRE SOLTERA

La pareja Rachida Dati / Najat Vallaud-Belkazem protagoniza, a su manera, el mismo duelo que la pareja Sarkozy – Hollande, a primera sangre política. E ilustra de manera canónica las metamorfosis sociales, culturales y políticas de Francia.

Sarkozy premió a Dati con el ministerio de Justicia, el 2007, por su eficacia como mujer política todo terreno. Ella fue una de las piezas maestras del equipo Sarkozy de hace cinco años. Con el tiempo, la guerra política sin cuartel, el divorcio de Sarkozy y Cecilia Ciganer Albeniz, la erosión política de una ministra de Justicia muy reformista, culminaron con un “divorcio amistoso” entre el presidente y la pequeña “cenicienta” hija de padre marroquí y madre argelina, pobres de misericordia.

Cuando los sondeos siguen pronosticando la victoria de su rival socialista, Sarkozy ha rescatado a Dati para su nueva campaña. Madre soltera, con un hermano inculpado por tráfico de drogas, ella ha retomado el hacha de guerra electoral, vestida siempre con sus mejores trajes de mujer conservadora muy aficionada a las joyas, los trajes de grandes marcas, maquillada como una estrella de telemovie.

IZQUIERDA, DERECHA, NEGROS, MUSULMANES

Mientras Rachida Dati luce con orgullo su escarapela de mujer de derechas, Najat Vallaud-Belkazem es presentada como una “teórica eminente” de la integración de los “franceses de la diversidad”, que es una manera elíptica de nombrar a los franceses negros, musulmanes, africanos.

Licenciada en ciencias políticas, la portavoz de Hollande ya fue el 2007 la portavoz oficial de Ségolène Royal, que por aquellos años todavía vivía con François Hollande, precisamente, padre de sus cuatro hijos. Elegido candidato socialista a la presidencia de la República, Hollande no ha dudado en rescatar para el cargo de portavoz oficial a la mujer que ya ejerció ese puesto con su ex. Quizá no sea un azar que Vallaud-Belkazem sea una especialista socialista en temas de “sociedad”.

Hijas de albañiles marroquíes, ambas, crecidas en los suburbios de ciudades de provincias, Rachida Dati y Najat Vallaud-Belkazem encarnan hasta la parodia los rostros convencionales de la francesa de derechas y la francesa de izquierdas.

INTEGRADAS, PERO MENOS

Sarkozy estima que Dati puede ayudarle a reconquistar un electorado de hijos de inmigrantes pobres, que tiene mucha importancia en todos los suburbios de Francia. Ella encarna el éxito supremo de esa categoría social. Sin embargo, la ex ministra de Justicia lleva meses chocando con François Fillon, primer ministro.

Hollande estima que Vallaud-Belkacem puede hacerle ganar muchos votos entre muy diversos grupos sociales: inmigrantes pobres, homosexuales, parejas de hecho, partidarios de la adopción homosexual, etcétera. Temas que, sin embargo, dividen profundamente a la élite burocrática socialista. [ABC, 3 marzo 2012. Foto JPQ, Rachida, renace la “cenicienta”].

• Najat Vallaud-Belkacem y la “pluralidad visible”.
• Rachida Dati, dorado destierro.
• Socialistas y conservadoras, en la misma joyería.

• Francia y Personajes en este Infierno.

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