Saint-Sulpice, 25 mayo 2009. Foto JPQ. París, Proust. Albertine, el amor y las aves pareadas del gran arte andaluz y mozárabe.
“Ha quedado una preciosa introducción en tres volúmenes a la novela más importante del siglo XX”, decía: Proust y el amor… Don Juan, seducido por una furcia.
[ .. ]
El tercer volumen de mi selección cuenta como el Libro se transforma en tratado de amor, semilla y redención:
Cuando su obra culmina, al fin, iluminando los más remotos senderos perdidos en la bóveda sin estrellas del tiempo pasado -al fin recuperado, a través de la palabra, iluminando la oscuridad impenetrable del ayer con las piedras luminosas que jalonan el camino recorrido, dándole un sentido-, el narrador descubre que aquella agonía infantil que lo atormentaba, esperando el beso amado de la madre, era una primera forma de morir, en vida, como una flor, una planta o un árbol que mueren sin recibir el agua que les da la vida.
A lo largo de su existencia, el narrador conoce una y otra vez esa misma sensación de vacío que anticipa la muerte en vida de los seres privados de amor, como las plantas y los seres vivos privados de agua. Hasta que, al fin, el polvo áureo de los muertos le recuerda que las cenizas del amor tienen sentido. “Serán ceniza”, dice de sus restos mortales el Quevedo de Amor constante, más allá de la muerte, “más tendrán sentido”. “Polvo serán, más polvo enamorado”.
El amor es un fuego y un manantial. Una llama que ilumina nuestras vidas. Y un venero que nos siembra con sus jugos y semillas. En la zarza ardiendo del lecho amoroso, los amantes ofician la celebración del amor. En la soledad de una noche oscura, Sherezade y el narrador de la Recherche se salvan y nos salvan contando historias, hilando un tejido inmaterial que construye la arquitectura espiritual donde moran los vivos y los muertos, dando cobijo y sentido al esprit, el espíritu, el alma de lo que fuimos, somos y seremos, polvo iluminado por la llama de un fuego que perdura después de la muerte, a través de la palabra, semilla de Eros y Logos… Aves enlazadas en la catedral del tiempo.
- Proust / Un amor de Swann… fuerza subversiva y seminal del amor.
- París, Proust. El cuello de Albertine y el misterio subversivo de la fotografía.
- París, Proust. El sexo de Albertine y el misterio de la creación.
- París, Proust. Las adolescentes en flor y la lengua del país natal
Pont St.-Michel, 12 junio 2013. Foto JPQ.
Hermosura grande.
Laura,
Encantado grandemente, claro,
Q.-