Grave carencia filológica para combatir la podredumbre que a diario envenena la vida pública en Caína.
Los diccionarios con los que trabajo y tengo más a la mano (RAE, María Moliner, Manuel Seco) solo dan definiciones positivas y asépticas de la palabra ideología. Basta con recurrir al Dictionnaire historique de la langue française, dirigido por Alain Rey, para descubrir el origen estrictamente filológico de uno de nuestros más funestos descarríos cívicos y morales.
DHLF subraya que, desde 1800, idéologie también tuvo un uso crítico y peyorativo: “Discusiones, análisis sobre abstracciones sin relación con los hechos y la realidad positiva”. [ .. ] “El derivado ideólogo designa, con valor peyorativo, a una persona que se deja llevar por las teorías más que por los hechos”.
No sigo. A mi modo de ver, ideología e ideólogos, en ese doble sentido profundamente peyorativo, dominan de manera abismal la realidad cainita. Y su comercio industrial quizá sea la principal fuente de podredumbre endemoniada con la que a diario se envenena y pudre la conciencia cívica.
¿Debo recordar que ideólogos los hay en todos los bandos, sectas, familias y mafias, políticas, editoriales, culturales, etc.?: Una cultura confiscada por las mafias.
maty says
Más que ideológica, moral/ética.
@N@ Nauscopio ZAPATERO: UNA PERSONA INDIGNA, UN PRESIDENTE «ACCIDENTAL»
Desde el 26.03.2006, son ya tres veces que utiliza la terminología de accidente para referirse a los atentados etarras. De esas tres, dos eran leyendo un discurso.
Ya no hay vuelta atrás, hay que echar a Zapatero. Vía moción de censura o su propio partido, tras un severísimo varapalo electoral en las elecciones municipales y autonómicas próximas, no hay otra.
Joaquín says
Una palabra que me gusta: logomaquia.
http://www.rae2.es/logomaquia
JP Quiñonero says
Creo que la logomaquia describe con precisión el problema de fondo, para mi sensibilidad, rozando caminos endemoniados,
Q.-
PS. Que alegría, leer esa palabra… recuerdo con precisión cuando la leí por vez primera, hace siglos, en un texto de Gustavo Fabra Barreiro, en la redacción de un periódico difunto, en la madrileña calle de San Roque, número 7.
maty says
filosofia i pensament Hannah Arendt: una filosofía moral política, por Salvador Giner
maty says
Diario filosófico: Verdad y política, de Hannah Arendt
«La fuerza de la verdad está siempre temporalmente sometida al poder de la mentira organizada [maty: léase medios de (in)comunicación]. Pero el poder mismo, en cuanto es solamente un potencial, es mucho más cadudo que lo verdadero, cuya fuerza procede del poder de lo fáctico y de la permanencia. Cuando se ha desmoronado el cúmulo de las mentiras acumuladas [«proceso de paz»], el poder se viene abajo. Pues el poder desaparece cuando languidece la organización y se dispersan los hombres unidos en ella. Ese es precisamente el momento en el que lo dicho por los individuos, en su independencia e inmunidad de partidismo [o sectarismo], se hace valer de nuevo, es decir, logra el espacio que le corresponde».
JP Quiñonero says
Al día de hoy, el Laberinto cainita me parece caído en algo que no es exactamente la Torre de Babel, si no una variante endemoniada: hablando la misma lengua y utilizando las mismas palabras se dicen cosas distintas, con fin de manchar, amedrentar y pudrir la vida del vecino,
Q.-