Los lectores y consumidores de columnas de prensa y libros modernos y posmodernos han sufrido durante los últimos diez, quince o veinte años, el ataque desalmado de la polución retórica de numerosos epígonos carpetovetónicos de Jean Beaudrillard. Clément Rosset -que es uno de los raros pensadores y estilistas franceses de hoy que tiene mucho que decir, con un estilo propio- ha tenido menos suerte.
La traducción de Travesía nocturna (Elipsis), a cargo de Enrique Lynch, es un nuevo intento de introducción a una obra misteriosa, encantadora, agonal. Hay muchos otros libros atractivos, seductores e indispensables de CR. Este tiene un encanto particular: es la crónica de su entrada y salida en una crisis depresiva, que comienza con el insomnio, las pesadillas, para adentrarse por el Gran arte (Racine, Shakespeare, Mozart, Heidegger, Falla, Melvilla, Conrad), sazonado con el arco iris de pastillitas de colores con las que la quimioterapia trata con cierta ingenuidad algunas enfermedades del espíritu.
CR comienza su viaje al fin de la noche de sus angustias nocturnas recordando un pasaje célebre de Athalie (Racine):
Fue durante el horror de una noche profunda.
Mi madre Jezabel se presentó delante de mí [ .. ]
Y yo le tendía las manos para abrazarla;
Pero sólo di con una horrible mezcla
De huesos y carnes muertas arrastradas por el fango
Muñones ensangrentados y miembros horribles
Que unos perros devoradores se disputaban.
… un silencio respetuoso parece imponerse. CR cuenta la crónica de la salida de ese Infierno, que no es el mío. CR cita otros momentos esenciales de la Gran literatura de las pesadillas. Yo recuerdo el más sencillo que me viene a la memoria. El comienzo de Die Verwandlung, de Kafka: “… eines Morgens aus unruhigen Träumen…”. Tras una noche de intranquilos sueños, el joven Gregor Samsa se despertará convertido en algo parecido a una cucaracha. Nobody’s perfect.
Sani says
Con esa tarjeta.. iré a ver lo que encuentro sobre ese CR de quien ignoro todo…
Gràcias por la información, JP.
JP Quiñonero says
Sani,
¡Un prof de francés que no conoce a CRosset..! Ayayayay..
Saludos,
Q.-
Sani says
Mon dieu !
Ya sé que «un coup de Google jamais n’abolira l’ignorance» … pero por lo menos aquí : http://maliphane.free.fr/Clement_Rosset.htm
me he enterado un poco…
¿AyAyAy, dices? Pues si supieras las miles de cosas importantes que desconozco igual te venían ganas de echarme del blog 😉 ¡Y no te dejaré!
¡La lista llega la infierno! Pero, mira, cual alumno de ESO, ya no me sonrojo de nada y por nada, porque como lo que se dice interesar, me interesa casi todo, pienso que llenaré poco a poco todas las charcas que pueda, en la medida que pueda, y si es posible , … porque, en realidad, lo único prioritario y transcendental que tengo delante es ir a la piscina los lunes y los jueves, y a dar una vuelta en bici o a pie, los martes y los viernes… El resto, política, filosofía o literatura, -como el cielo- … puede esperar …
Aso sí, ahora te tocará responder a mi pegunta:
Si Clément escribe esto :
1. «Moins on se connaît , mieux on se porte»
2. «Riez !, car la vérité est trop triste»
3. «Être heureux, c’est toujours être heureux malgré tout»…
Y tú decías : «uno de los raros pensadores y estilistas franceses de hoy que tiene mucho que decir» … ¿Dónde está está el gazapo?
Bueno, me consolaré esperando que cuando te hayas leído mi Obra seas igual de hiperbólico y condescendiente conmigo que con Clément, porque te aseguro que yo también tengo unas cuantas frases buenas 😉
Un abrazo.
JP Quiñonero says
Mein lieber Sani,
Confundir Bolivia y Perú dice casi tanto como escribir Josep Plà en la Ronda litoral de Barcelona. Pasé varias veces por ese lugar, las últimas Navidades. Y el Plà permanecía intacto, desde el verano pasado, cuando tomé esta fotografía:
http://unatemporadaenelinfierno.net/2006/07/30/josep-pla-y-el-estamento-municipal-de-barcelona/
“Moins on se connaît , mieux on se porte”.. es digno de Sani, de CR y de Marco Aurelio.
Q.-
rafael says
Me parece que todos los comentarios que han hecho en torno a Rossset, son «idiotas» en el sentido que Rosset le da a esta palabra, bueno para ser sinceros, es nesesario leer al autor para decir sobre él, y no leer solo un librito, y hacer una pequeña reseña mediocre y a medias de tan solo un libro…por no decir de esta página u otras. La tarea es hacer una lectura total del autor, si sé es posible conseguir toda su obra.
Sin nada que decir…más que…¿Que es lo Real? diría Clement Rosset, es lo idiota, lo singular…
Crates says
El libro comentado aquí es el peor de Rosset. No se menciona nada de su filosofía en él y no pasa de ser una descripción clínica de un cuadro depresivo. Lo único destacable quizás sea el hecho de considerar la depresión como una enfermedad que debe tratarse con medicamentos, y no como un «estado de ánimo» que más bien tienen que ver con una melancolía romántica. Quien quiera saber del pensamiento original de Rosset (o quizás deba decirse el pensamiento con más «sentido común» que haya) DEBE leer «Lo Real. Tratado de la Idiotez» (junto con «Lo Real y su doble» y «El Objeto singular).