Sorprenderá al curioso lector la desaparición casi completa de buena parte de las imágenes, sin duda históricas, para Francia y España, del Palacio de Castilla / Hôtel Majestic, que bien pudieran pertenecer mañana a unos afortunados inversores chinos o árabes musulmanes.
Isabel II abdica del trono de España, a favor de su hijo, Alfonso XII, en uno de los salones del Palacio de España, futuro Hôtel Majestic.
Ese palacio perteneció durante treinta y tantos años a la Reina de España. Basta con leer a Galdós para recordar su importancia, como lugar de cita y tránsito de una parte significativa del destierro español. Uno de los encuentros más significativos fue, sin duda, la entrevista entre Isabel II y Galdós, en presencia del embajador de España, Fernando León y Castillo, de la que tenemos noticia a través de un artículo indispensable, La reina Isabel, en El Liberal (12 abril 1904), artículo recogido después en Memoranda.
En la historia literaria del Majestic son de indispensable consulta un libro de Azorín, París bajo las bombas, los Diarios de París de Ernst Jünger, una novela de Maigret (Les caves du Majestic) y buena parte de la obra de Patrick Modiano. No olvidar la consulta de una película de Jean-Pierre Melville (L’Armée des ombres).
La mera cita de tal bibliografía mínima e indispensable sugiere que, en verdad, Francia y España destruyen o entierran voluntariamente en el olvido los restos gráficos de una memoria colectiva que sería doloroso desenterrar. Una reina que recuerda con tristeza su noche de bodas: “¿Qué decir a un hombre que se acuesta con más puntillas que yo..?”. Un hotel que sirvió de cuartel general al Comandante en jefe de las tropas alemanas en París. El último de los militares que cumplió tal misión, el general Dietrich von Choltitz, se negó a cumplir la orden de Hitler, “destruir París antes que lleguen los aliados”, y fue arrestado ¿en ese hotel? por un anarquista español… Los españoles y la liberación de París. Dominique Lapierre, que me comentaba con simpatía este detalle último, tenía un apartamento frente al difunto Majestic, donde yo lo conocí.
Deja una respuesta