Quizá sea algo peor que vergonzoso que no exista al alcance de gran público, y como texto de obligada lectura en las escuelas, una edición crítica del poema Espacio, que ocupa en la obra de Juan Ramón un lugar semejante al de The Waste Land en la obra de Eliot o Le cimetière marin en la de Valery. Una razón, entre otras de mayor calado, para mí, son unas líneas de ese poema, reproducidas en la edición de Wikipedia que se puede consultar [Juan Ramón Jiménez] cuando escribo esta anotación (26 febrero 07) y que dicen así:
Caricatura infame (“Heraldo de Madrid”) de Federico García Lorca; Pieles del Duque de T´Serclaes y Tilly (el bonachero sevillano) que León Felipe usó después en la Embajada mejicana, bien seguro; Gobierno de Negrín, que abandonara al retenido Antonio Machado enfermo ya, con su madre octojenaria y dos duros en el bolsillo, por el helor del Pirineo, mientras él con su corte huía tras el oro guardado en la Banlieu, en Rusia, en México, en la nada…
Como es bien sabido, o debiera saberse, desde la escuela primaria, Juan Ramón incluyó Espacio en su Tercera antolojía poética (1957), pero se publicó primero en 1943 y 1944 (fragmentos primero y segundo) y 1954 (edición definitiva). A lo largo de esos años, el poeta matizó su poema. Y desaparecieron las líneas arriba citadas. El apasionamiento y rectificación de JR ya justificarían por sí solos muchas matizaciones, de evidente calado. Queda lo esencial: la importancia de tales cuestiones en la historia general de la poesía y las culturas españolas. No es poco.
El primero en saludar el carácter excepcional de ese poema fue Gerardo Diego, a quien va dedicada la edición definitiva. Y Octavio Paz escribiría (El arco y la lira): “Espacio es uno de los monumentos de la conciencia poética moderna y con ese texto capital culmina y termina la interrogación que el gran cisne hizo a Darío en su juventud”. Casi todo está dicho. Salvo lo esencial, para nosotros: que estamos faltos de una edición crítica más o menos definitiva, al alcance del gran público.
No se me oculta la inmensa bibliografía que existe sobre ese poema. Solo citaré dos libros indispensables: Espacio. Autobiografía lírica de Juan Ramón Jiménez, de María Teresa Font; y Espacio. JRJ, edición de Aurora de Albornoz. Ni que decir tiene: se trata de dos libros tiempo ha descatalogados.
Tres referencias online: Bibliografía Zenobia y Juan Ramón. Diario 3. Puerto Rico (1951-1956), de Zenobia Camprubí. Consideraciones genéricas en torno a Espacio y Tiempo de JRJ, de Benigno León Felipe.
Joaquín says
Juan Pedro, sigo el mandato de todo bibliógrafo de no citar libros que no se tienen a mano. Hay edición crítica, relativamente reciente, de ‘Espacio’ (aunque no exenta):
JRJ, Lírica de una Atlántida (1936-1954), edición de Alfonso Alegre Heitzmann, Barcelona, Galaxia Gutenberg, 1999.
Quiero pensar que, a ocho años, continúa siendo una edición muy accesible (y además muy elegante).
Sobre el pasaje controvertido, dice el editor: «En las ediciones de Espacio de Aurora de Albornoz (1974 y 1982) y Antonio Sánchez Romeralo (Leyenda, 1978, y Poesías últimas escojidas, 1982), ambos estudiosos omitieron siguiendo el criterio de la ‘Tercera antolojía poética’, unas líneas del «fragmento tercero»; Arturo del Villar en su edición de Tiempo y Espacio (1986) opta por volver a editar esas líneas suprimidas. He creído mejor seguir el criterio implícito en la ‘Tercera antolojía’ y no incluirlas. Por otro lado, creo necesario revisar la idea de que Juan Ramón no participó en su elaboración, y por lo tanto en la decisión de suprimir esas líneas…» (ed. cit., p. 435).
Joaquín says
Y un artículo muy interesante:
http://cvc.cervantes.es/literatura/escritores/jrj/acerca/acercade02.htm
JP Quiñonero says
Joaquín,
Bueno… escribí mi anotación tras volver a leer las dos páginas y media que Alfonso Alegre Heitzmann consagra a Espacio en su Lírica de una Atlántida. Y mi reserva, lamentando la inexistencia de una edición crítica de ese poema, sigue siendo la misma. Alegre Heitzmann sigue un muy buen criterio editor: respetar el texto último revisado por el autor. Sin embargo, el lector que desconozca los ajetreos del texto y su historia se quedará sin saber gran cosa. Arturo del Villar editó el poema siguiendo el texto primero, con las tan ajetreadas líneas cortadas: se puede discutir su decisión desde una óptica estrictamente literaria y poética; pero conocer o no conocer esas líneas dice mucho de los ajetreos del poema, de JR y de nuestra triste historia…
De ahí mi cabreo personal. La edición de Alegre Heitzmann está muy bien como edición con prólogo y notas, dirigida al gran público. Lo que yo espero como edición crítica para ese poema (y para tantos otros) es un estudio comparado de los distintos textos, unas anotaciones a pie de página mucho más prolijas, línea a línea, y, last but not least, el estudio filológico, histórico y político, en este caso. Conocer la historia de esas frases, en que condiciones las escribe JR, y como decide suprimirlas, es algo relativamente bien repertoriado para el lector versado en la materia… pero ¡¡es algo que los especialistas llevan varias décadas “ocultando” al gran público y a los nuevos lectores…!! En ese punto, el comentario de Alegre Heitzmann es tan perfecto como elíptico. Todo lo que dice es exacto. Pero ¡falta lo esencial..! ¡Las líneas cortadas y la historia de ese corte!
Joaquín, dicho sea de la manera más amistosa y cariñosa posible: creo que nuestra cultura se merece una edición crítica de Espacio como Dios manda. Estoy seguro que me comprendes.
Q.-
PS. Que alegría poder discutir de estos negocios, si quiera en un espacio como este..
Joaquin says
Pues sí, he captado la idea, JP. No estaría mal que se dejase caer por aquí Alegre Heitzmann, si lee el Infierno…
JP Quiñonero says
Joaquín,
Te agradezco la cosa. Alegre Heitzmann siempre será bienvenido. Como cualquier lector interesado en estos negocios,
Q.-
Alfonso Alegre Heitzmann says
Creo que tenéis toda la razón al hacer hincapié en la necesidad de una edición crítica de «Espacio» de JRJ. Se trata de uno de los grandes poemas en prosa del siglo XX en cualquier lengua, y sólo ha tenido una edición exenta, hoy inencontrable: la de Aurora de Albornoz en 1982. Mi edición de Lírica de una Atlántida sólo pretendía reunir los cuatro libros de poemas que Juan Ramón escribió en América, en un proyecto que permanecía inédito desde que el poeta murió, y en un momento en que -aunque parezca imposible- ninguno de esos cuatro libros (donde se inscribe «Espacio») se podía encontrar en nuestras librerías. El trabajo que hay que hacer todavía respecto a la obra de Juan Ramón es inmenso. La Sala Zenobia y JRJ de la Universidad de Puerto Rico es un tesoro, en gran medida inexplorado, en el que he tenido la suerte de trabajar en diferentes ocasiones para preparar, con todo la seriedad que he podido, la edición de Lírica de una Atlántida, la de Una colina meridiana (2003) (inédito en edición exenta hasta entonces) y, recientemente, la del primer volumen del Epistolario de JRJ (1898-1916) dentro del proyecto Epístola de la Residencia de Estudiantes de Madrid.
Respecto a «Espacio», sólo puedo deciros que la Fundación Gerardo Diego de Santander prepara una edición facsímil del original que JRJ envió a la revista Poesía Española en 1954, donde se publicó la primera versión completa del poema. Se presentará en mayo en la Residencia de Estudiantes. La novedad es muy importante; ese original ha permanecido oculto durante años entre los papeles del archivo de Gerardo Diego. Entre los estudios de presentación de la edición hay uno mío donde intento resolver algunos (sólo algunos) de los problemas textuales pendientes a los que hacéis referencia en vuestro interesante diálogo. Por cierto, respecto a las líneas de «Espacio» suprimidas por JRJ en la edición de la Tercera Antología (1957), que Juan Pedro cita, ningún estudioso del poeta ha ocultado nada al gran público; simplemente nadie ha sabido encontrar hasta hoy una respuesta suficientemente documentada del porqué de dicha supresión. En mi edición de «Espacio» en Lírica de una Atlántida dije lo que sabía, y no incluí esas líneas porque mientras no haya una razón que fundamente lo contrario, creo que lo normal es seguir en ello la última edición publicada en vida del poeta. Os adelanto que ahora sé más que entonces sobre ese tema y que lo digo en la edición de «Espacio» que saldrá esta primavera, a la que antes me he referido).
Un saludo,
Alfonso
JP Quiñonero says
Alfonso,
Te agradezco el comentario, las precisiones y la Gran Noticia: ¡ya estoy / estamos esperando esa edición..!!!..
Creo que estamos de acuerdo en lo esencial: a pesar de las apariencias, JR sigue siendo algo así como una inmensa Atlántida parcialmente inexplorada en terrenos capitales, como el de Espacio. A mi también me parece importante el trabajo de María Teresa Font, que fue anterior al de Aurora. Tu Atlántida me acompaña desde el primer día, claro.
ES PARA MI UNA GRANDÍSIMA ALEGRÍA TRASLADAR ESTAS CUESTIONES AL ÁMBITO DE LOS NEGOCIOS BLOGOGRÁFICOS.
Gracias,
Q.-
Joaquín says
Magnífico, poder leer las últimas impresiones de un «comentador» de JRJ como Alfonso Alegre Heitzmann.
Saludos
Francisco H. says
Hay una edición de «Espacio» en la que se incluyen las líneas supuestamente censuradas (páginas 32 y 33): Mercedes Juliá, El universo de Juan Ramón Jiménez (Un estudio del poema «Espacio»), Ediciones de la Torre, Madrid, 1989.
Mercedes Juliá comenta en la página 139, refiriéndose a dichas líneas, que «Estas referencias políticas tan de actualidad desvían el poema de su orden esencial. Las dos últimas alusiones fueron eliminadas de la Tercera antolojía, quizá por ser excesivamente contemporáneas».
Un saludo
Francisco
JP Quiñonero says
Francisco,
Hola… Bueno… en verdad, esas líneas no están «supuestamente censuradas», sino bien y totalmente censuradas o mutiladas, como quieras. A mi modo de ver, esas líneas son tan esenciales para el poema como el resto de las líneas: en un poema no hay líneas esenciales y líneas menos esenciales. En este caso, todavía me parecen más esenciales que en otros. Las cosas no son «excesivamente» o menos excesivamente contemporáneas: son falsas o verdaderas; están íntegras o están mutiladas. Y NO pocos editores (as) de Espacio contribuyeron a falsificar parcialmente el texto de JRJ, silenciando el corte, dejándolo sin comentario, etc.
A esta altura de la edición de Espacio, el texto de referencia absoluta es el de Alfonso Alegre Heitzmann, que deja las cosas razonablemente claras: El escándalo Espacio / JRF, 2.
Saludos,
Q.-