José María Barandiarán resume la cosa con una precisión inquietante: “Los datos son peores y escalofriantes. No tenemos, además, por qué ponerlos en duda. Habría una primera conclusión inapelable: en el período del 2000 al 2006 los compradores de libros han disminuido en un 50 por ciento…”
¿Cómo dudar que la incultura crece, a nuestros pies, como un hoyo o una tumba sin fondo? Con Valor, Hábitos de lectura y compra de libros 2006.
El que disminuya el numero de libros vendidos no indica necesariamente que la cultura de las «masas» empeore (segun que criterio?). Lo cierto es que entre los libros, igual que entre cualquier otra clase de «soporte» cultural (video, CD, etc), hay un monton de basura. Basta con leer casi cualquier «best seller» (los libros mas vendidos, como su nombre indica) para percibirlo. Si los que han dejado de comprar libros basura se han pasado al video, a los videojuegos o prefieren mirar el «Aqui hay tomate» en Tele5, pues diria que eso no indica que el pais sea menos culto, sino que todo esta mas o menos igual que siempre. Por otra parte, una preguntita: porque sera que se asocia indefectiblemente al libro con la alta cultura, mientras a todos los demas soportes se les asocia tambien indefectiblemente con la cultura de consumo? Porque no suponer que un lector de «best sellers» se ha pasado al History Channel, por poner un caso?
Ramón,
Quien tiene fe incluso ve la cultura en «Aquí hay tomate».
Un país que lee poco o todavía menos es un país inculto, zafio, ignorante, etc, víctima de la algarabía demagógica, aventada por los medios de incomunicación de masas, para mi gusto.
Yo parto de la hipótesis contraria: mucho me temo que la industria del libro cainita es un instrumento pavoroso de la difusión de la incultura, la propagación de la ignorancia de masas y la degradación de todos los cánones de lo que en otro tiempo era la literatura, la poesía, etc.
Q.-
Verdades, mentiras y estadísticas… Las cifras traídas a colación se refieren a los «compradores» de libros (no al número de libros vendidos, o el volumen de negocio de editores y libreros). También aquí puede aparecer otro «efecto estadístico»: el periodo 2000-2006 coincide también con el alza de inmigración no lectora. Lo que nos dicen esas cifras es que el porcentaje de población lectora se ha «diluído» en un magma de gente que no puede hacer otra cosa que matarse a trabajar.
Saludos a todos y Feliz Pascua.
Verdades, mentiras y estadísticas… Las cifras traídas a colación se refieren a los «compradores» de libros (no al número de libros vendidos, o el volumen de negocio de editores y libreros). También aquí puede aparecer otro «efecto estadístico»: el periodo 2000-2006 coincide también con el alza de inmigración no lectora. Lo que nos dicen esas cifras es que el porcentaje de población lectora se ha «diluído» en un magma de gente que no puede hacer otra cosa que matarse a trabajar.
Saludos a todos, Feliz Pascua, y que la Resurrección nos alcance a todos.
Joaquín,
Lo de «inmigración no lectora» suena a exacto y trágico, ¿no?
Q.-