Robert Frank se hizo célebre tras la publicación de un libro legendario, The Americans (1958). Él mismo ha contado como esa obra culminó un trabajo iniciado en España, aunque España no lo supiese ni se haya interesado jamás por esa página por escribir de la historia de la fotografía: “En los años cincuenta estuve en Valencia y viajé de Barcelona a Sevilla. Aquellas fotos nunca han visto la luz. La gente en aquella época no tenía mucho interés en verlas”.

En Madrid, medio siglo más tarde, para recoger el premio PhotoEspaña, Laura Revuelta le pregunta: “¿Y nunca enseñará aquellas fotos españolas?”. Y Frank responde: “Quizá, pero no sé. Alguien podría publicar un libro el año que viene”.

La España negra que visitaba Robert Frank tenía algunos puntos en común con la España de Christer Srömholm, Guardia civiles, marines, putas. España, circa… The Americans habían estado precedidos por una cigarrera de Barcelona, un Ford peruano, Robert Klein Gallery. Apenas han tenido que pasar cuarenta y nueve años para que los españoles comencemos a descubrir tales sombras y correspondencias de nosotros mismos. ¡Qué moderna y definitiva continúa siendo Bienvenido Mr. Marshall…!

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