David Strathairn / Edward R. Murrow, en Good Night, And Good Luck.
Diferencias entre los mercados de la verdad, la información, la basura, la mentira y el odio.
Veo con mucho retraso Buenas noches, y buena suerte, cuando M* me invita a escribir de los viejos colegas que pasaron por París como corresponsales de prensa y respondo a una entrevista sobre nuevos periodismos y cultura.
En la película de George Clooney, Edgard R. Murrow / David Strathairn razona ante el gran patrón de la CBS con el argumento esencial donde se funda el mejor periodismo anglosajón: la verdad y la mejor información pueden ser un gran negocio; de ahí el interés de dejar en libertad a los mejores periodistas. Su trabajo es, al mismo tiempo, una tarea ciudadana y una saneada fuente de ingresos.
Caína y otros mercados europeos de la información son la ilustración casi perfecta de otro modelo: puesto que la basura, la mentira y el odio se venden bien y mejor, el periodismo se transforma en una pantanosa charca donde medran reptiles carnívoros, con unas consecuencias pavorosas para la vida cívica: una sociedad desvertebrada a través de los medios de incomunicación de masas.
Jordi says
Bueno, no es oro todo lo que reluce en la prensa de EE.UU. El sectarismo tambien hace acto de presencia, y es que cuando las corporaciones de medios estan tan vinculadas a partidos politicos, nada bueno se puede esperar. Vease el caso de Fox News…
Eso, por no hablar del sensacionalismo y el destacar noticias morbosas en portada, y en los avances previos. Como ejemplo, otra vez la Fox: ayer abrio su telediario de las 22 h con el caso de una mujer que se bajo del coche a pedir indicaciones de como llegar a cierto sitio, se dejo el coche sin freno y este acabo en un lago… con sus hijos dentro; despues de esto, minutos dedicados a los fuegos artificiales del 4 de julio y a proponer un debate sobre si la letra del himno de EE.UU. es adecuada (os suena el debate?). Cuando me di cuenta de que no iban a hablar de nada que me interesara, decidi cambiar de canal, 10 minutos despues de que las noticias empezaran…
Si os apetece leer mas sobre el tema, os dejo esta entrada:
Materias Grises: «Si sangra, va en portada»
JP Quiñonero says
Jordi,
En esas estamos, efectivamente…
Q.-
Luis Rivera says
Posiblemente deberíamos pensar, algunos, que no hay suficiente noticia para tanta industria en torno a ellas. ¿Porqué debemos acudir diariamente a la ceremonia del «notociario» si en realidad las noticias son del tipo ordinario y vulgar: accidentes, muertes, violencias locales, etc. La noticia real, la importante, no llega nunca. No lo escrio en broma, sino muy en serio. Todo lo que el siglo XX ha tocado, y el XXI por supuesto, ha sido objeto de industrialización. El crecimiento se basa en hacer de casi nada un sector en el que se mueven y del que viven miles o millones de personas. Pero ¿que es la noticia? ¿?Cual que realmente nos afecte? También los noticiarios acaban asemjandose a un programa del corazón. ¿Para qué ver 3 al día y leer un par de periódicos, sino más?
JP Quiñonero says
Luis,
Borges decía que “los periódicos se fundan en la ilusión de que cada día hay algo nuevo que contar”. Problema metafísico.
La conversión del negocio de la información en negocio de compra venta de basura ya es otra cosa, digo yo. Habituados a la droga dura de la basura, algunos de los más jóvenes llegan a creer que eso es periodismo.
Otro problema puramente corporativo: no imagino a los colegios de arquitectos aceptando en su seno a colegas que degradan laboralmente la profesión…
Q.-
maty says
Discrepo de la mayor
Los medios no desvertebran la sociedad española, sino que ésta ya estaba desvertebrada antes de su aparición, como bien recuerda maese Juan Pedro en su libro «De la inexistencia de España».
Los noticiarios televisivos son infumables, sobre todo los de las televisiones privadas. Simplemente se limitan a ofrecer lo que la audiencia quiere consumir, me temo. Igual que el cine comercial norteamericano (a diferencia, habitualmente, del ideologizado hispano -de ahí su progresiva decadencia, amén de su cada vez peor factura, con raras excepciones).
Otro tanto sucede con la industria editorial. Y con los mensajes publicitarios.
El problema, queridos contertulios, está en la escala de valores reinante y en el penoso sistema educativo que padecemos, el cual viene degradándose desde finales de la década de los setenta (ahora ya con velocidad de crucero).
De ahí vienen la mayoría de los males españoles, de una educación que no forma personas adultas, capaces de pensar por sí mismos y dispuestos a utilizar sus facultades mentales y habilidades adquiridas para afrontar los retos que la vida moderna plantea.
La escuela no forma, la sociedad no forma y la familia tampoco forma. Bueno sí, forman ávidos consumidores, que sólo buscan el placer inmediato; personas totalmente alineadas.
Y cada vez peor, a diferencia de antaño, cuando las nuevas generaciones estaban mejor preparadas que las precedentes.
Jaime says
Llevas mucha razón Juan Pedro al comentar que algunos colegas degradan laboralmente la profesión. Cuando el periodismo era considerado un oficio, hace ya tiempo, creo que había más respeto por parte de los llamados «profesionales de la información». Por edad, aquella época no la conocí. Lo digo con amargura, puesto que también soy de este gremio. Otro factor es la masiva creación de facultades de Ciencias de la Información. Se pensó que era bueno que los periodistas tuviéramos formación universitaria y considero que era un deseo loable. Los resultados los contemplamos treinta o treinta y cinco años después. Si lo agitamos con la prensa del «corazón» y otros tipos de periodismo «se nos abren las carnes». Gracias por tus comentarios. Son muy valientes y proporcionas muchísima información.
Espero que la nueva situación relacionada con la dirección de «ABC» no te afecte.
Un abrazo.
JP Quiñonero says
Maty, Jaime,
Maty,
Bueno… hombre, la no vertebración de España es, efectivamente, una cosa de viene de lejos. Pero la basura periodística añade unos matices siniestros, porque todo lo envenena a diario, difundiendo cantidades masivas de basura, sobre todo lo divino y humano. Que la gente más joven se deje arrastrar por los predicadores y mafiosos (filantrópicos o navajeros) acelera el proceso de desertización moral.
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Jaime,
A título personal, y sin ánimo de “sentar cátedra”, yo también me inclinaría por la condición del periodista que practica un oficio, intentando ser honesto: contar cosas verificadas y verificables; acompañadas con un poco de pedagogía. Lo que en la escena carpetovetónica se entiende por “opinión” es un intoxicación permanente con torrentes de “opiniones” que no solo destruyen y ocultan la realidad: la envenenan y la pudren, convirtiendo la basura en canon y norma de comportamiento cívico,
Q.-
maty says
Sobre la degradación de la profesión periodística, y sus condicionamientos laborales, este comentario de hoy mismo.
EL CONFIDENCIAL DIGITAL Profesionales de la Cadena COPE manifiestan su preocupación ante el futuro de Federico Jiménez Losantos: “el día que se marche, a ver qué hacemos”
El comentario de anonimo anonimo:
CCNExpansión.com El Síndrome del Corte Inglés…
Lo que me recuerda el escándalo de los sellos, de Afinsa y Fórum Filatélico, que contaron con el silencio cómplice de los dedicados a la economía.
O el sectarismo empresarial referente a los libros que publican otras empresas. O la complacencia de los medios catalanes con el nacionalismo excluyente…
Suerte que ahora internet permite soslayar tales filtros. La credibilidad la va otorgando el tiempo y la trayectoria, aunque en España el proceso va muuu lento, a diferencia de lo que sucede con la blogosfera estadounidense. Ya se andará.
Jordi says
Porque somos humanos y, en el sentido biologico mas estricto, nos interesamos tanto por el entorno como por nosotros individualmente. Constantemente nos comparamos con los demas. Constantemente nos preocupamos por nuestra estabilidad. Necesitamos la seguridad de que nuestro pequenyo mundo no va a cambiar… a peor.
Realmente hay industria en torno a la noticia, o es industria alrededor de darselas de expertos sobre el tema al respecto del cual la noticia va? Hablamos mucho de que en Espanya hay millones de entrenadores de futbol expertos en 1a division… pero no hay menos expertos en como llevar un pais y en politica. Si la cosa fuera solo dar una noticia, no habria industria porque, seguramente, no habria lugar al espectaculo y al sensacionalismo y, por tanto, nos guste o no, no habria dinero asociado a sus beneficios. Una noticia de verdad no se puede vender. Se cuenta y la gente interesada acudira a escucharla. Eso si, tenemos gente interesada en escuchar noticias o en leer opiniones sobre esa noticia que nosotros mismos pensamos, como expertos en politica, sociedad, cultura… que somos?
PD: Espero, Luis, que no te importe que me tome un poco de tiempo en contestarte. Conversaciones asi hay que paladearlas y no me gustaria pecar de precipitacion y contestar con otras cosas en la cabeza. Menuda semanita!
Luis Rivera says
Querido Jordi: me gusta que me cites incluso con faltas, porque mi intención era escribir «noticiario» aunque parezca que la palabra notociario suene a intencionada. No es así. Creo que el hábito de recibir la noticia ha creado una industria de consumo, que se basa cada vez más en la globalidad universal. Hoy podemos asomarnos a una lluvia torrencial en Camboya, con su número de desgracias personales, cosa que en la realidad de cada día, no merece un tan enorme acopio de detalle, pero es menester llenar el tiempo del noticiero. La realidad es que, salvo en lo que respecta a la emisión de opiniones (ojo, que eso es diferente) son mjuy pocas las noticias que merecen tanto papel y tiempo de emisión como ocupan.