Caldetes, St. Vicenç de Montalt. Playa de La Caleta, 18 agosto 2007. Foto JPQ

Felices vacaciones, 43

Los partes meteorológicos anuncian mal tiempo. Me refugio en la historia de aquel suicidio y la revisión de los escritos de V.N.

Decíamos ayer…

“… Una leve brisa dispersaba el polen de los macizos de jazmines; aquí y allá, en el fondo del jardín, se escuchaban las risas ahogadas de algunos invitados poco discretos, confundiéndose con algunas caras desconocidas y fugaces, que la turbación adolescente oteaba con aturdidos ojos abiertos que nada veían, si no la oscuridad de las plantas, el rumor de los eucaliptos, el aroma familiar de los geranios, la elegancia proscrita de los ciclamen, que ahora, cuando aquel jardín ya no existe, cobran un turbio aroma que se confunde con el grito de pánico de mi hermana al contemplar, tendido en el césped, el cuerpo ensangrentado de V.N., todavía sucia su camisa con manchas de nata o pastel de cerezas, tras escuchar el tiro que se disparó en el corazón, envuelto en la penumbra de un plantío de celindas.”