La crisis entre Washingon y Ankara, en torno al genocidio turco de un millón de armenios, en 1917, es un problema de inmenso calado para todos los pueblos europeos y mediterráneos, comenzando por España, ya que afecta al puesto de un gran país de 72 millones de habitantes, muy mayoritariamente musulmanes, dentro o fuera de Europa, miembro de un pilar sensible de la seguridad continental, la Alianza Atlántica.
Insensible a los problemas armenio y kurdo, con matices, durante medio siglo largo, Washington descubre tardíamente el atormentado debate del genocidio del pueblo armenio, que continúa siendo un problema capital en Ankara, donde se contempla con inquietud creciente la imprevisible evolución de la guerra de Irak, amenazando sus fronteras estatales: beneficiándose del caos social, cultural, político y militar iraquí, el PKK está lanzando operaciones militares o para militares en territorio turco.
Ankara, gran potencia musulmana, se encuentra en una amarga encrucijada. Crece en la opinión pública turca la hostilidad contra una UE que no parece desear el ingreso turco y contra la presencia militar norteamericana en dos países musulmanes, Irak y Afganistán. Y el gobierno turco evalúa la posible “necesidad” de una operación de castigo militar contra los kurdos del PKK instalados en Irak. Operación “quirúrgica” que no dejaría de añadir un nuevo frente de crisis al incendio carnívoro iraquí.
Ese arco iris de problemas encadenados afecta directa y particularmente a la Europa mediterránea. Una Turquía musulmana estable y aliada a la OTAN y la UE funciona como “cortafuegos” estratégico. Una Turquía alejada de la UE, con problemas militares en su frontera iraquí y problemas culturales con la OTAN y Washington, puede convertirse en tierra de nadie propicia a la inestabilidad y el “orgullo musulmán”, indisociable de la inseguridad en el Mediterráneo occidental.
Lo que es increible es que un «lobby» armenio en los USA trate de emular al «lobby» judio en el mismo pais y crea que le va a sacar a Turquia lo que Israel le ha sacado a Alemania (eso y no otra cosa es todo lo que hay tras la reivindicacion armenia). Aun es mas increible que bastantes politicos americanos apoyen esta actitud en su busqueda de votos vengan de donde vengan y a cualquier precio mientras lo pague otro. Lo que no parecen querer ver estos politicos es que el precio lo pueden acabar pagando ellos, o mas bien su pais, que no es exactamente lo mismo. Si Turquia se cabrea, la posicion de los USA en Iraq y en toda la zona petrolera puede llegar a ser desesperada en cosa de meses.
Ya dijo alguien que los dioses ciegan a quienes quieren perder, o algo asi. A los USA ya les han cegado, y a fondo.
Ah, una aclaracion: en Turquia no hay ningun clamor por la entrada en la UE. Solo estan interesados los grandes capitalistas (Koç, pronunciese koch, y otros) que quieren fronteras sin aduanas para sus negocios y deshacerse de tantos turcos como puedan para colocarselos a los paises europeos. La gran masa de la poblacion no lo ve nada claro, en las universidades hay manifestaciones anti EU con cierta frecuencia, y el mismo ejercito (que pasa por laico y, por tanto, por partidario de la UE, segun la extraña logica imperante en Occidente) tampoco esta muy entusiasmado con la UE, pues sus privilegios, realmente monstruosos, no serian de recibo en un pais miembro de la UE.
A Washington hay activístas políticos desde cada país problemático del planeta. Estan conspirando a legislaciónes provocadoras ( armenios ), intervenciónes militares ( iraquis anti-sadam, por ejemplo ), campañas mediacas ( quieren hacer intervenciónes en el lugar Darfur en el país de Sudán en Africa y en el país de Myanmar en Asia ) . A USA los adversarios designados siempre se estan cambiando. Ante del once septiembre 2001, a Cheney no le gustaba la China. A mi, quiero matar a Ben Laden y está escondido en el Pakistan… Todo el mundo quiere dinero. Tambien hay activistas políticos de cada enfermedad conocida del hombre.