París, Mayo 68. Archivo Xavier Miserachs.
Anales de Mayo, 3
Mayo 68 suscita interés, incluso emoción y cierta pasión contenida, aquí y allá. Pero casi todo lo que leo peca de interesada ignorancia. Nadie ha tenido la idea más simple: devolver la palabra a quienes siguieron y cubrieron aquellas jornadas, en París, por ejemplo.
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Nadie se ha interesado por las crónicas y fotografías de los corresponsales españoles que cubrieron aquellas jornadas.
Recuerdo, a vuelva pluma (¡como me gustaría recordarlos y abrazarlos a todos..!), sin otro orden ni concierto que mi memoria…
Feliciano Fidalgo (Ya, SP), Juan Bellveser (Madrid, Diario de Barcelona), Jorge Collar (Nuevo Diario), Tristán La Rosa (La Vanguardia), José Julio Perlado (ABC), Ramón Chao (Triunfo, El Alcazar), Pilar Narvión (Pueblo), Juan José Luis Roldán (¿Efe?), Manuel de Agustín (¿RNE?), Carlos Castillo (¿RNE?), Xavier Miserachs (Triunfo)…
Seguro que olvido nombres que no debiera: NO es mi intención. Tampoco he deseado ni podido “estudiar” la cuestión.
Feliciano fue algo más que un amigo, entre hermano mayor y padre profesional eternamente joven. A él dediqué mi libro El misterio de Ítaca, que también es una elegía a París. Juan Bellveser pudo ser mi padre o abuelo. Cuando lo conocí, en un restaurante de los Campos Elíseos, me abrazó y sacó su cartera para enseñarme un billete de cien dólares:
-Es lo primero que debes aprender y a mí me enseñó Víctor de la Serna. Un corresponsal siempre debe estar en condiciones de tomar el primer tren o el primer avión. Y los billetes de cien dólares son muy útiles.
Jorge Collar sigue teniéndome presente en sus oraciones, cosa que me emociona. Tristán La Rosa era un Señor, autor de un libro de referencia sobre el XIX español. Ramón Chao había llegado a París de la mano de Fraga Iribarne, para estudiar música: pero todavía no podía saber que su hijo Manu sería un cantante de fama internacional. Nunca me crucé con Pilar Narvión, de la que se decía, cuando yo aparecí por Madrid, que era una mujer de mucho trapío. A Roldán y Manuel de Agustín apenas los crucé muy de lejos. Carlos Castillo fue el único colega que vino a la madrileña Biblioteca Nacional a escuchar a Cela presentar De la inexistencia de España. De Miserachs admiré su libro París se pregunta: ¿es una revolución..?
Con Jose Julio Perlado he intercambiado algunos correos, tras la lectura de su libro París, mayo 1968. Crónica de un corresponsal (Ediciones Internacionales Universitarias), que he descubierto con emoción.
Perlado y su editor han tenido la idea más simple y luminosa: compilar las crónicas de aquellas jornadas de Mayo, poniéndolas en perspectiva, intentando explicar como funciona el trabajo del corresponsal en el extranjero.
Ese trabajo no ha dejado de cambiar desde que el primer corresponsal español en París, Azorín (¿el primero..? cuando menos, primero del siglo XX), llegó a París y cubrió un legendario atentado contra Alfonso XIII, el 30 de mayo de 1905. Volvería para cubrir la Primera guerra mundial, instalado en un antiguo palacio de la reina Isabel II, más tarde convertido en Hôtel Majestic, donde terminó firmándose la paz de Vietnam y Azorín había escrito París bombardeado. El “segundo” corresponsal español en París quizá fue Agustí Calvet, Gaziel. Hubo muchos otros. Y muy grandes (Julio Camba, Josefina Carabias, Miguel Pérez Ferrero, Eduardo Haro Tecglen, Rafael Conte, Queirolo, Antonio Pelayo, Tomás Alcoverro, etc, etc). Sin olvidar a los ocasionales o irregulares, como Valle Inclán o Jorge Guillén, cronistas literarios.
Siempre en pie de guerra, Perlado escribe ahora un blog de referencia, Mi siglo, cuenta desde su óptica personal las jornadas de Mayo 68 y describe desde la óptica del profesor de periodismo una cierta evolución del oficio de corresponsal. Lo leo con emoción, en efecto, advirtiendo que yo mismo pertenezco a esa amenazada especie zoológica, no sé si en vías de desaparición. Y me honra formar parte de esa infame turba, entre la que encontré tantos maestros y algunos amigos del alma, compañeros.
● Mayo 68, Praga, París, Berkeley, México, Madrid y la Columna Durruti.
● Mayo 68, revuelta contra un Imperio y nuevos colonizados.
● Cohn-Bendit: “No queda nada de mayo 68?.
● Mayo del 68 y las adolescentes en flor.
● Mayo 68 y las presidenciales francesas.
PS. M*, colega de siempre, desde la adolescencia, conocedor emérito de este paño, me escribe:
Juan Pedro: Me he topado, al repasar tu blog, con tu evocación de mayo 68 y los corresponsales españoles. Juan Roldán estaba entonces en Washington, así que el Roldan al que te refieres debía ser (seguro), José Luis Roldan…
Queda hecha la corrección. Matiz importante e imperdonable: Juan Roldán fue, mucho más tarde, uno de mis primeros jefes radiofónicos.
Joaquín II says
Una entrada fantástica, enhorabuena.
PD: lo siento no me había fijado en la dedicatoria de El misterio de Ítaca.
Saludos
JP Quiñonero says
Joaquín II,
Gratitudes…
Q.-
maty says
Días del futuro pasado Mayo del 68, política y cultura. Y sexo
JP Quiñonero says
Maty,
Madre del Señor…
Q.-
Manuel Montero says
Anoche un profesor de Sciences Po, en una cena, me decía a media voz que las revueltas estudiantiles y las revueltas raciales del extraradio no debían preocupar(nos). Me soltó algo así como » el extraradio no tiene voz ni voto, y por la otra parte la universidad es donde están los blancos pobres, y nosotros, la clase dominante, estamos tranquilos porque nuestros hijos están en las grandes escuelas o en EEUU». De la derecha tuya, Quiñonero, que nace de la repugnancia frente a la demagogia, se puede esperar siempre un diálogo fructífero, pero de la derecha (a no ser que encima fuese de izquierdas, hablando tan clarito) cínica que se queda indiferente frente a la desintegración de una cultura y más de un país, escucha, no me lo puedo tragar. O a lo mejor era un maestro zen y me estaba jugando a dejar perplejo…
Tú me dirás… Un maestro zen, seguro.
Ahí se queda Mayo del 68, frente a esta época espesa y tupida sin salida.
Si el comentario te parece inoportuno y lo suprimes respóndeme por mail.
Luis Rivera says
Pienso que hubieron dos «Mayos del 68». El que sucedió en sus hechos, anécdotas y objetivos (de todo hubo en un enorme totum revolutum) y el que impactó en las mentes de los que lo vivimos como espectadores lejanos.
Este último es el que no se puede despreciar como elemento constructor en la vida de los que como yo teníamos 24 años y vivíamos la dictadura del Franco. Los hechos pertenecen a su tiempo y en él se instalan y proyectan imágenes que pueden, no siendo verdaderas, convertirse en certidumbres.
Quien piense que Mayo del 68 no fué nada más que una algarada, es que tal vez no sepa asomarse a las mentes de los que creyeron que tuvo su importancia en el desarrollo personal de una sociedad que venía cambiando de manera drástica por motivos tanto o más nimios todavía: la revoilución del pop, la figura de los Beatles, la aparición de los hiipies y ¿como no? la influencia de Marcuse, no solamente entre los que le leyeron.
Escribo esto al hilo de ese tremendo desmitificar lo sucedido, como si los sucesos históricos no fueran sino películas bajadas de Internet y vistas en el salón de casa cenando una pizza.
JP Quiñonero says
Manuel, Sani, Luis,
… Manuel,
En la plaza de la Sorbonne hay unas fotos (Marc Riboud) que ilustran el espectáculo que tú cuentas… si se contemplan a la luz del espectáculo que las rodea…
… Sani,
Hombre… Bernard Franck, Un Respeto… creo que ya somos dos a sentir algo parecido a la devoción por el personaje: hay que ser fino como Sani para seguir esas pistas… que nos reúnen en algún lugar.
… Luis,
Bueno… quizá hubo muuchos mayos, que NO tuvieron NI tienen Nada que ver con la mala literatura que está saliendo en los papeles de papel y en los papeles virtuales: refritos de refritos de enésima mano… tras esa hojarasca de naderías, la playa de muchas cosasssss por contar,
Q.-
maty says
Aprovecho este hilo para advertiros de que tengáis muchísimo cuidado estos días al navegar por ahí:
F-Secure Mass SQL injection
Hay más de 500.000 servidores web que utilizan tecnología Microsoft (vade retro satanás -en servidores web: Linux y BSD es lo aconsejable) que han sido afectados, y han sido manipulados para que inyecten un troyano al navegar. Así que tenéis dos opciones plausibles:
1º Si utilizáis esa cosa llamada Internet Explorer, Opera… deshabilitad el JavaScript.
2º Los que utilizan Firefox, que no olviden tener instalada la extensión NoScript (plugin imprescindible). De paso, instalad AdBlock e importáis los filtros nauscópicos antipublicidad.
JP Quiñonero says
Maty,
Me pones los pelos de punta…
Q.-
Sebastián Muñoz says
Hola, estoy haciendo un trabajo sobre mayo del 68 y necesito urgentemente fotografías en alta resolución como apoyo para ilustrarlo. Agradecería enormemente a quién me colabore con este asunto. Mi correo electrónico es: chopexonline@gmail.com
gracias
Patricia Badenes Salazar says
Estimado Juan Pedro:
Me llamo Patricia Badenes y estoy haciendo una tesis doctoral sobre la prensa española y el Mayo francés del 68. Me gustaría preguntarle si usted conoce la fecha de defunción del corresponsal en París de «Arriba», Manuel de Agustín. No soy capaz de dar con ella. Muchas gracias de antemano.
P. D.: A lo mejor conoce a alguien que me puede informar.
Miguel Teigell de Agustín says
Estimada Patricia:
Por azar he acabado viendo su pregunta de hace 5 meses. Manuel de Agustín era mi abuelo y falleció el 4 de febrero del 2001.
No sé si esta información llega demasiado tarde, pero si aun le sirve, ahí la tiene 🙂
JP Quiñonero says
Patricia,
La verdad, no tengo ni idea. La persona que más sabe de todo eso es José Julio Perlado, autor de un blog de referencia: Mi siglo.
Q.-
Patricia Badenes Salazar says
Juan Pedro, muchas gracias por tu respuesta. Ahora mismo me pongo en contacto con él, lo conozco, le hice una entrevista hace años. Un cordial saludo, Patricia.