Imprescindibles para sobrevivir
He leído muy tarde, pero con pasión, un libro sencillamente imprescindible para quienes, como yo, se interesan por las cosas de los españoles en París.

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Se trata de Cuatro años en París, de Victoria Kent (Ed. Gadir), de quién Àngel Duarte ha escrito recientemente con mucha finura, recomendando otro libro que no conozco, pero cuya referencia se me antoja igualmente indispensable, Vae Victis! Los republicanos españoles en Francia, 1939-1944, D. W. PIKE (París, Ruedo Ibérico, 1969), Historias republicanas. Recuperar el hilo liberal.

El libro de Victoria Kent es el relato intimista de su vida en la capital de Francia, ocupada por las tropas alemanas, oculta, huyendo. Curiosamente es un libro feliz. Mujer acorralada, sola, perseguida por la Gestapo, Victoria Kent ¡tiene fe…! En ella misma, en la esperanza, en la libertad, en la justicia, en el honor, en una España de la que se ha visto forzada a huir, en sus compañeros del destierro, en los aliados, en la victoria final contra el mal, contra las tiranías, contra la pobreza, contra Caín… ¡Qué mujer!

El libro acaba Muy Bien: con la entrada en París de las tropas de la 2ª división blindada del general Leclerc. Los españoles de La Nueve. La banda de desarrapados, republicanos españoles, que fueron los primeros en entrar y liberar París de las tropas del III Reich. He recordado esa historia en algunas ocasiones: Los españoles y la liberación de París.

Victoria Kent fue una testigo excepcional de aquella historia. Y estaba en los Campos Elíseos, el día que el pueblo de París rindió homenaje a aquellos españoles, tan olvidados todavía en su patria.

[ .. ] La radio continúa: “Tanques de la división Leclerc han entrado en la Place de l’Hôtel de  Ville. Estos tanques son servidos por españoles”.

Ellos, los españoles de la división Leclerc, son los primeros que entraron en el Hôtel de Ville a las nueva y quince de la noche.
¡De cuentas cosas me siento compensada..!

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Allí están, bajo el Arco. Dejan los coches oficiales y la multitud, rotos los diques, rodea a sus liberadores. Muchachos y muchachas de la Resistencia forman la guardia de honor. Liberados y liberadores descienden a pie los Campos Elíseos. La ovación es delirante y continua.
¿Y los tanques? ¿Veo claro? ¿Son ellos? Sí; son ellos. Son los españoles. Veo la bandera tricolor; son los que, atravesando el África, llegan hasta los Campos Elíseos. Los tanques llevan nombres que son una evocación: Guadalajara, Teruel, y son los primeros que desfilan por la gran avenida.
París aplaude. París aplaude a los españoles curtidos en una lucha a nueve años, que sonríen hoy al pueblo liberado.
París aplaude a la España heroica de ayer, a la España libre, democrática y fuerte de mañana.
Parece un sueño… Parece un sueño. [Victoria Kent, Cuatro años en París, 1940 – 1944].

Amen.

• París en este Infierno.