Recordando el verano del 2003, cuando 15.000 ancianos murieron víctimas del calor, siete departamentos franceses han tomado medidas de excepción.
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“Pero es muy dificil combatir la soledad”, comenta Le Monde, subrayando que aumenta el número de ancianos sin recursos. Le Monde, 19/20 agosto 2009. Six ans après les 15 000 décès de 2003, la vigilance est maximale, mais l’isolement reste difficile à combattre. Jour de canicule dans une maison de retraite du Rhône.
Muchos de los ancianos muertos el 2003, víctimas de la soledad, el abandono, la insalubridad de hospitales y residencias públicas francesas fueron enterrados en un cementerio para suicidas, donde reposan Paul Celan y Joseph Roth, sin que nadie reconociese sus cadáveres, Ancianos sin recursos y perros abandonados, qué engorro...
Vagando por Barcelona, recuerdo los ángeles de Wim Winders, Der Himmel über Berlin.
PlaçadelÀngels, 15 agosto 2009. Foto JPQ.
- Maravillosas fiestas de verano.
- Sociedad y Fotografía en este Infierno.
J. Moreno says
Estas incursiones en nuestro porvenir colectivo ¿lo haces como un aviso para navegantes solitarios?
Ya tengo ya todo preparado para el viaje a la Ciudad de los Inmortales.
Desde la ciudad ilerdense soportando calores tropicales….. buenos días.
Lo de ayer es un escarceo que te permitimos… por que te lo mereces.
JP Quiñonero says
J.Moreno,
No… mi mecánica es mucho más simple. Hago muchas fotos, sobre casi todo lo que veo. Dejo dormir esas fotos. Y voy publicando las que más me gustan. En ocasiones, esas imágenes «dialogan» con alguna actualidad del día. En otras, no.
¡Avanti…!!
Q.-
PS. Lo de ayer… fue la única manera que se me ocurrió de «mirar» la actualidad. Gratitudes.
Jordi says
Esta foto… es un fotograma que captura un gesto de un segundo en que la mujer se inclina hacia adelante para inocentemente rascarse la cabeza? O es la fiel representacion de lo que transmite: una mujer sola, abandonada, abatida por la falta de calor humano cercano del que si disfrutan las dos personas a su lado? Si me pongo las gafas que ven lo primero, me sobresalta las maravillas tecnicas que permiten capturar un instante asi dando a entender una impresion que no es. Si me pongo las que ven lo segundo, me asalta un sentimiento de angustia que me lleva alla donde mis propios familiares disfrutan de su avanzada edad en cercana companyia de los que mas quieren y me pregunto porque no todos aquellos que son ancianos de nuestra tribu no consiguen tener el trato que nuestros antepasados prehistoricos si ofrecian.
Ah! Curiosa diatriba inducida por el malicioso fotografo 😉
JP Quiñonero says
Jordi,
La verdad es que estuve un rato intentando captar el rostro de la señora mayor… pero no había forma que levantara la cabeza… llegué a dar un grito… pero solo me escuchó la señora joven… es el instante que capta esa fotografía…la señora mayor siguió en su silencioso mundo, que contemplo con respeto,
Q.-
Jordi says
Pues creeme que esta captado con fidelidad. Tu descripcion del momento confirma que tu respeto viene del mismo sitio que mi angustia… y un mucho de respeto adicional por mi parte. Ya tengo el ejemplo perfecto para si algun dia tengo que explicarle a algun paisano de estas tierras que quiere decir el dicho espanyol «una imagen vale mas que mil palabras».
Por cierto, aunque insignificante, el detalle de la botella de agua llena de calimotxo/vino/sangria me ha parecido, desde la distancia, un fotograma perfecto del ocio barcelones. Vivido, en su momento, en primera persona, claro esta.
JP Quiñonero says
Jordi,
Anda, anda.
Es que el ocio barcelonés deja inolvidables huellas, oye,
Q.-
Carmen says
No digo nada porque tendría que decir demasiado.Respeto, angustia, compasión, así que silencio.
Cementerio para suicidas y pobres en París… No sabía que existiera. Acabo de reconstruir el final de un eslabón genealógico.
Sobra decir que te felicito por esta fotografía.
Carmen
JP Quiñonero says
Carmen,
Me llega fuerte tu sensibilidad, si.
Q.-
PS. En uno de esos cementerios enterraron a Joseph Roth y Paul Celan. Allí mismo enterraron a un centenar o más de ancianos víctimas de la canícula del 2003: nadie fue a buscar sus cadáveres, no.