La implosión del equipo nacional de fútbol, en África del Sur, quizá sea una ilustración perfecta de las crisis e incertidumbres de fondo de la sociedad francesa.
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LeMonde,21/22junio2010. Descomposición del equipo nacional…
Cuando la selección francesa ganaba, se interpretaron aquellos triunfos (Mundial 1998 y Eurocopa 2000) como una ilustración ideal del modelo futbolístico de integración y cohesión social: un equipo francés integrado masivamente por franceses de raza negra y muy diversa confesión religiosa ganaba partidos y gloria para una Francia “multi cultural”.
Poco más tarde, invierno del 2005, la crisis nacional de los suburbios dejó al descubierto una Francia cuarteada y víctima del nihilismo social agudo. Las más célebres de las pintadas de aquel invierno decían: “… ni escuelas, ni mezquitas, ni sinagogas: prostíbulos” “… pasta, sexo y rap…”.
En esas estamos. Hace semanas se descubrió que, en verdad, muchos jugadores de la selección francesa de fútbol se pagan la presencia de prostitutas en sus hoteles, al final de no pocos partidos.
El resto de la moral cívica, deportiva e individual del equipo de Francia, en África del Sur queda ahora al descubierto, con patética brutalidad.
Moral cívica… constituidos en banda “autogestionaria” (¡¡!!), los jugadores consideran más importantes “sus derechos” corporativos (sueldos, contratos, etc.) que el respeto de los valores colectivos. En verdad, los jugadores de fútbol “copian” el comportamiento de las burocracias sindicales.
Moral deportiva… todo se compra, todo se vende. El entrenador, Raymond Domenech (hijo de emigrantes españoles), quería imponer una táctica de juego. Pero, desde el exterior, un ex jugador (Zinédine Zidane), reconvertido en agente comercial, atizó la revuelta, consiguiendo que los jugadores siguieran sus consejos, opuestos a los consejos del entrenador. La pasta es la pasta: y se cuenta en millones. Y se defiende a dentelladas de banda de lobos solitarios.
Moral individual… el uso y abuso de la obscenidad y el peor lenguaje hampesco es la norma, aceptada como buena, con risas y complicidad, a todos los niveles del escalafón y la “escalera” social. Así las cosas, ¿qué comportamiento más “natural” que convertir a las madres del vecino en prostitutas a quienes se escupe a la cara…? Cualquiera que visite los suburbios de la periferia parisina descubrirá incontables pintadas mucho más brutales, con llamamientos al asesinato y la violación de los enemigos de barrio “político”.
La opinión pública está anestesiada por la “belleza” (cosmética) de la fotografía deportiva, glosando la épica del asunto. El fotógrafo callejero de los suburbios ya sabía cual era el estado moral del equipo de Francia, ilustración perfecta del estado de una cierta Francia.
En Tarragona, mientras tanto…
DIARI de TARRAGONA Un grupo de estudiantes vascos destroza un bloque de apartamentos de Salou Carlos Izquierdo
Tal es gran parte de la juventud española «logsera», carente de principios y valores.
Y mientras un grupo de jóvenes millonarios se niegan a dar patadas a un balón, curioso oficio pero es el suyo, Miguel Boyer no sabe que los analfabetos ya son ministros y que sí hace falta bajarles el sueldo. Así son los economistas,curioso oficio también.
Maty, la cosa no tiene remedio, en efecto. Pero ya viene antes de la Logse.
Carmen
Cuando la orgía moral invade los salones de Palacio, en las chozas se siguen rituales de canabalismo…
Quise escribir canibalismo
Maty, Carmen, J.Moreno…
Maty,
“Menos iglesias, menos escuelas y más prostíbulos”… decía una pintada francesa durante la crisis de los suburbios.
Carmen,
Mira que no fiarte de Boyer… ¡hasta donde vamos a llegar…!!!
J.Moreno,
Hombre… creo que el personal del ramo prefiere las hamburguesas con carne traficada, o así,
Q.-
En cambio, España toda con la Roja. Hasta que quede eliminada. Entonces vendrá lo anunciado:
(Mateo 8:12)
Puestos a ser bíblicos, seámoslo
«Hace semanas se descubrió que, en verdad, muchos jugadores de la selección francesa de fútbol se pagan la presencia de prostitutas en sus hoteles»
No veo el problema en eso. También lo hacen empresarios, abogados o periodistas. Lo malo del caso es que las prostitutas era menores, no?
Àngel, Bruno…
Àngel,
Palabras muy mayores, claro.
Bruno,
Hombre… en los suburbios franceses había pintadas como esta… «menos iglesas, menos escuelas, más prostíbulos…»
Pues eso. Todo, tan normal, efectivamente.
Q.-
Si la anarquía bajo Domenech, que ya ante el partido había perdido su trabajo quisiera decir algo del estado moral de una cierta Francia, la fenomenal victoria de Portugal 7 – 0 contra la Corea del norte quisiera decir tambien algo que me encanta de la alma portuguesa.
Mmm. Hacer del deporte símbolo no carece de efectos secundarios y una ecuación inversa a la que hoy se hace, sí que da, dio y dará resultados pavorosos. Por eso, mezclar el estado moral de una país con sus éxitos o fracasos sobre la hierba o el tartán es siempre arriesgado.
Saludos,
Miguel,
Yo no lo veo como un símbolo; sino como reflejo…
Q.-