Avenue de Suffren, 25 febrero 2011. Foto JPQ.

Los analistas militares independientes subrayan el riesgo de una campaña de Libia mucho más prolongada e imprevisible de lo que pudiera sugerir el despliegue militar aliado.

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El Economist y varios expertos del IISS insisten en los mismos factores de incertidumbre:

-La guerra electrónica y los bombardeos “quirúrgicos” pueden neutralizar a los blindados y el arma aérea de Gadafi, pero no darán por sí solos la victoria final a los rebeldes.

-Gadafi, su familia y guardia pretoriana pueden “enrocarse” en posiciones muy próximas a ciudades y núcleos urbanos, utilizando como “escudos” a las poblaciones civiles.

-El arma aérea aliada puede facilitar el avance de las tropas rebeldes. Pero la conquista o reconquista de Trípoli será una temible batalla, en la que quizá no pueda intervenir de manera directa el arma aérea aliada.

Los antecedentes de Irak y Bosnia solo invitan a la prudencia.

Washington intentó “neutralizar” a Saddan Hussein con bombardeos “quirúrgicos”. Y no lo consiguió.

La campaña aérea de la OTAN en Bosnia, 1995 NATO bombing campaign in Bosnia and Herzegovina, se prolongó entre el 30 de agosto y el 20 de septiembre de 1995 y requirió la participación de más de 5.000 personas, 400 aviones de 15 naciones.

La campaña aérea de Kosovo duró casi tres meses, 1999 NATO bombing of Yugoslavia, y fue muy criticada por el número relativamente alto de víctimas civiles.

Libia es un escenario más complejo. La personalidad misma de Gadafi aconseja mucha prudencia. Varios especialistas temen la partición del territorio nacional libio.

• International Institute for Strategic Studies,  The conflict in Libya and military options for the international community.
• Economist, No-fly zone in Libya. Will it work?