Creo ser el único periodista español que ha fotografiado de cerca a las dos señoras.
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“Las tribulaciones sentimentales entre el presidente francés, François Hollande, su actual compañera, Valérie Trierweiler, y su ex y madre de sus cuatro hijos, Ségolène Royal, se han convertido en un inflamable folletín político de incalculable alcance…” El primer ministro francés, sobre el tuit de Trierweiler: “Cada uno debe estar en su lugar”.
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Halle Freyssinet, 22 octubre 2011. Foto JPQ.
Valérie Trierweiler, celosa de su poder, en el Elíseo.
LeBourget, 22 enero 2012. Foto JPQ.
Ségolène, sex symbol “socialista”.
- Fotografía y Francia en este Infierno.
Carmen says
Querido Q.-,
esto es francamente divertido y nos distrae de la tragedia española. Pero bien decía Lamartine «En France, on se relève de tout, même d’un canapé». Diría yo que, sobre todo, de un sofá. Afortunadamente, un país civilizado digiere y olvida historias de vaudeville. Ahora bien, este señor bajo el paraguas, que lleva ella, tan modosito, que parece no haber roto un plato en su vida ¿cómo logra que dos mujeres como estas se peleen por él?, ya antes de ser presidente, después no tiene ningún mérito. Estoy francamente intrigada.
La suite, au prochain numéro, espero.
JP Quiñonero says
Querida Carmen,
Bueno… el arma fuerte de Hollande no es el físico: es la palabra, el humor. Cuando se pone serio, la jode. Cuando divaga y charla sobre cosas intrascendentes o más o menos trascedentes, tiene una lengua fina, sofisticada y dicharachera, que suena bien y funciona con mucha eficacia. Vistas de cerca, las señoras no son para tanto. Ni mucho menos. Cuando hablan la joden. Sobre todo Ségolène, que tiene un soniquete (sic) infumable. La otra es una sargenta del copón.
Q.-
PS. Temo que la cosa se agrave en otros frentes menos vaudevillescos.
luis says
¡Qué hermosura de lenguaje! Está usted desatado, Quiñonero. Ha debido llegar la primavera a París, pero hay alguien que le supera. ¡Qué hermosura antes de ser intervenidos, qué hermosura!
Por cierto, ¿qué fue de Laurent Fabius?. Ese si que era uno de los «grandes» de Francia. No sé si me he expresado bien. En un barrio céntrico tenía un enorme éxito con algunas destacadas mujeres.
http://www.elmundo.es/elmundo/2012/06/14/internacional/1339685951.html
JP Quiñonero says
Luis,
Ufff…
¿Fabius..? Se come muchos menos roscos que Hollande o Sarko: sobre todo desde que lo dejó su mujer, que se fue con un señor más joven y guapo. Él ha ido diciendo por ahí que se acostó con esta o aquella señora presidencial: pura ilusión de ministro calvo y gordezuelo… ¿Exito..? Las mozas guapas soportan poco su soberbia…
Son paños que he currado con perseverancia digna de mejores causas:
–Ségolène se separa de Mr. Royal. Sexo, política, socialismo, divorcios…
–Ségolène, Valéry, François, folletín lúbrico y socialismo.
–Sarkozy, Hollande y el arte de seducir señoras y electores.
–Socialistas y conservadoras, en la misma joyería.
Q.-
PS. Espero que compruebes la diferencia de publicar refritos con fotos de agencia tomadas a distancia. Y publicar cosas con fotos propias tomadas a un par de metros de cada señora, claro.
luis says
Lo aprecio, maestro, aunque me inquietan. Son dos rostros que me provocan algún temor. El plano tan cercano es demoledor en ocasiones. Fui un gran devoto de Carla Bruni en su primera etapa. Es más, cuando no se le conocía mucho compré un cd de sus canciones. Ahora me decepciona mucho. Tanto retoque la ha desmejorado.
Laurent Fabius era considerado un galán. ¿Se sigue usando esa palabra? Tenía merecida fama con reputadas mujeres parisinas de gran influencia política y empresarial.
PD
«Jefe, ¿vio usted alguna vez un desastre más esplendoroso?» de Zorba el griego. ¿Se cumple la profecía? El domingo elecciones en Grecia. Me iré cerca del cabo de Gata. A ver si el Mediterráneo nos trae algo de esperanza.
http://www.elseptimoarte.net/foro/index.php?topic=13778.0
luis says
Aclaración.
Carla Bruni canta menos que el canario flauta de un compañero de usted. Me refiero al crítico de televisón y articulista, Ferrán Monegal de «El periódico de Cataluña». Piqué en el anzuelo. Era una mujer muy atractiva.
JP Quiñonero says
Luis,
Bueno… he tenido muchos «enfrentamientos» por ese detalle… los editores gráficos NO quieren retratos muy crudos: ellos prefieren maquillar arrugas, para quedar bien con los personajes. Yo prefiero lo contrario: la luz cruda, que ilumine la realidad,
Q.-
PS. Mme Bruni Sarkozy… ha engordado; y el rostro puede dar una miqueta de miedo, de cerca. De ahí que los fotógrafos sean tenidos a prudente distancia, las más de las veces.