“Decíamos ayer…”
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–España, 17 modelos de “crecimiento asimétrico”.
–España, 17 modelos de pobreza creciente.
Un nuevo estudio de Funcas sobre la economía de las regiones españolas en la crisis, confirma y agrava, quizá, esa patética realidad asimétrica:
-La salida de la crisis (cuando termine consumándose), será muy “desigual” y respondiendo a criterios, estímulos y modelos locales estrictos.
-Los índices de crecimiento, riqueza y pobreza son igualmente asimétricos, con una cierta tendencia a la dispersión.
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Funcas, La economía de las regiones españolas en la crisis (2013), nº 138. Febrero 2014.
-País Vasco, Madrid, Navarra y Castilla y León han sido las comunidades autónomas menos castigadas.
-Comunidad Valenciana, Andalucía, Castilla-La Mancha y Murcia han sido las comunidades autónomas más castigadas.
Madrid, 18 de febrero de 2014.- La reciente recesión económica no ha afectado por igual a todas las comunidades autónomas. Ni el punto de partida era el mismo ni las políticas y reformas aplicadas con carácter nacional tienen los mismos resultados en territorios con características tan diferentes. El último número de Papeles de Economía Española, editado por la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas), analiza desde diferentes perspectivas (nivel educativo, dimensión del sector inmobiliario, movimientos migratorios, nivel de desarrollo y pobreza, entre otros) la incidencia regional de la crisis económica.
Según el artículo del coordinador del número, Eduardo Bandrés, y María Dolores Gadea, Comunidad Valenciana, Andalucía, Castilla-La Mancha y Murcia han sido las comunidades autónomas más castigadas por la crisis en el periodo comprendido entre el segundo trimestre de 2008 y el primer trimestre de 2013. Por el contrario, País Vasco, Madrid, Navarra y Castilla y León han sido las menos afectadas. El resto de comunidades han sufrido un impacto intermedio: Aragón, Cataluña, La Rioja, Galicia, Extremadura, Cantabria, Asturias, Baleares y Canarias.
Otra de las conclusiones del análisis es que la crisis apenas ha afectado a la ordenación de las regiones por renta per cápita. País Vasco, Madrid, Navarra, Cataluña, Aragón y La Rioja continúan siendo las comunidades con mayor nivel de renta por habitante, incluso con mayor distancia por encima de la media que antes de la crisis. Por el contrario, Extremadura, Andalucía, Melilla, Castilla-La Mancha y Murcia son las regiones con menor renta per cápita y han empeorado su posición relativa respecto a la media nacional.
Otro de los artículos de este número estudia el impacto de la crisis sobre los niveles de desarrollo y pobreza en España y las comunidades autónomas. Carmen Herrero, Angel Soler y Antonio Villar utilizan el índice de desarrollo humano de Naciones Unidas, que contempla indicadores de salud, educación y bienestar material. Este indicador, que alcanzó su nivel máximo en 2007, no ha dejado de caer desde entonces, aunque su variación es muy dispar en las distintas comunidades autónomas. Sólo 6 comunidades han registrado crecimiento en su índice de desarrollo en el periodo 2006-2011: Cantabria y Castilla-La Mancha, con incrementos superiores al 2%, y La Rioja, Asturias, Andalucía y Galicia. El resto experimenta retrocesos en este indicador, especialmente intensos en el caso de Baleares, Canarias, Murcia y Comunidad Valenciana.
Variación porcentual del Índice de Desarrollo Humano por CC.AA. 2006-2011
En este trabajo se analiza también la evolución del índice de pobreza material, tomando como umbral el 60% de la mediana de renta de cada comunidad en 2006.
Según este indicador, la pobreza creció en 12 de las 17 comunidades autónomas entre 2088 y 2011 y solo se redujo en Extremadura, País Vasco, Castilla- La Mancha, Castilla y León y Asturias.
Por último, los autores del artículo elaboran un indicador de pobreza económica, a partir de los valores de la brecha relativa de de pobreza y de la tasa de paro de larga duración. La media nacional de este índice ha aumentado un 138% en el periodo 2008-2011 y ha crecido en todas las comunidades autónomas. Los mayores incrementos se han registrado en Baleares y Aragón y el menor en Extremadura.
En la sección Prensa de la página web de Funcas http://www.funcas.es/prensa/NotasPrensa.aspx pueden consultarse las fichas correspondientes a cada una de las comunidades autónomas. Los datos más destacados son los siguientes:
Andalucía
Acumula una caída del PIB del 7% en los casi cinco años analizados, con una destrucción de empleo del 21% y un crecimiento de la tasa de paro desde el 16% al 36% de la población activa. Andalucía ocupaba, antes de la crisis, una de las últimas posiciones en cuanto a nivel de desarrollo humano. Sin embargo, su comportamiento desde 2007 hasta 2011, aunque negativo por el lado de la renta y el gasto medio de las familias, ha sido mejor que la media española, principalmente por la evolución del indicador educativo y la importante reducción de la desigualdad. A su vez, el índice de pobreza económica, que tiene en cuenta la brecha relativa de pobreza y el paro de larga duración, ha crecido en proporción muy parecida a la media nacional, si bien se sitúa entre los más elevados del país, por el efecto de exclusión que provoca el paro de larga duración.
Aragón
Acumula una caída del PIB ligeramente superior al 5%, una pérdida de empleo del 13% y una tasa de paro que ha pasado del 7% al 20% de la población activa. El índice de desarrollo humano en Aragón se sitúa por encima de la media española y su comportamiento en el periodo analizado ha sido prácticamente igual que dicha media, viéndose afectado negativamente por la caída de la renta y el gasto medio de las familias. A su vez, el índice de pobreza económica ha crecido más deprisa que el promedio nacional por el acelerado deterioro del mercado de trabajo, empeorando su posición relativa respecto a España.
Asturias
La caída acumulada del PIB se sitúa en torno al 6% y la pérdida de empleo en el 20%, mientras que la tasa de paro aumenta desde el 7% al 24% de la población activa.
Antes de la crisis, el índice de desarrollo humano se situaba en Asturias por debajo de la media del país, pero su comportamiento desde 2007 ha sido mejor que dicha media, llegando finalmente a igualarla, ante la menor caída de la renta y el gasto medio de las familias y la importante mejora experimentada en el nivel de desigualdad. De hecho, el índice de pobreza económica ha crecido muy poco durante el periodo señalado, situándose en 2011 muy por debajo de la media española.
Baleares
La caída acumulada del PIB se sitúa en el 5% y la destrucción de empleo en el 10%, mientras que la tasa de paro aumenta desde el 8% al 21% de la población activa.
Baleares contaba antes de la crisis con un índice de desarrollo humano similar a la media española. Sin embargo, en el intervalo de tiempo que va de 2007 a 2011 Baleares es una de las comunidades que sufre un mayor deterioro en dicho índice, motivado por una fuerte caída de la renta y el gasto familiar y un importante crecimiento de la desigualdad. A su vez, el índice de pobreza económica crece más que en ninguna otra región, tanto por el aumento de la brecha de pobreza como por el deterioro del mercado de trabajo y la intensidad con que se ha manifestado el paro de larga duración. Mientras en 2007 Baleares era la comunidad con menor pobreza económica, en 2011 se sitúa entre las cinco primeras.
Canarias
Acumula una caída del PIB del 6%, la destrucción de empleo se sitúa en el 16% y la tasa de paro aumenta desde el 16% al 34% de la población activa, colocándose entre las más elevadas del país. Canarias, que contaba antes de la crisis con un índice de desarrollo humano muy por debajo de la media española, es una de las comunidades que sufre un mayor deterioro en dicho índice, motivado por una fuerte caída de la renta y el gasto familiar y un importante crecimiento de la desigualdad. A su vez, es la región con el índice de pobreza económica más alto del país, tanto por su elevada brecha de pobreza como por la intensidad con que se manifiesta el desempleo de larga duración; en ambos casos, la crisis ha ahondado todavía más las diferencias con el conjunto de España.
Cantabria
La caída acumulada del PIB se sitúa en torno al 6% y la pérdida de empleo en el 17%, mientras que la tasa de paro aumenta desde el 7% al 21% de la población activa. Por lo que se refiere al índice de desarrollo humano, Cantabria se situaba antes de la crisis prácticamente en el valor medio del país. Su comportamiento desde 2007 ha sido menos negativo que dicha media, llegando finalmente a superarla, ante la menor caída de la renta y el gasto medio de las familias y la importante mejora experimentada en el nivel de desigualdad. De hecho, el índice de pobreza económica de Cantabria ha crecido muy poco durante el periodo, situándose en 2011 muy por debajo de la media española.
Castilla y León
La caída acumulada del PIB se sitúa ligeramente por debajo del 4% y la pérdida de empleo en el 16%, mientras que la tasa de paro aumenta desde el 9% al 22% de la población activa. El índice de desarrollo humano se situaba antes de la crisis ligeramente por debajo de la media española, pero su comportamiento desde ha sido menos negativo que dicha media, llegando finalmente a superarla, ante la menor caída de la renta y el gasto medio de las familias y la importante mejora experimentada en el nivel de desigualdad. De hecho, el índice de pobreza económica de Castilla y León, que tiene en cuenta la brecha relativa de pobreza y el paro de larga duración, ha crecido mucho menos que la media durante el periodo señalado, situándose en 2011 muy por debajo del total nacional.
Castilla-La Mancha
Acumula una caída del PIB del 7% en el periodo analizado, una destrucción de empleo del 21% y un aumento del paro del 10% al 30% de la población activa, más que duplicándose el número de personas desempleadas. Castilla-La Mancha ocupaba, antes de la crisis, una de las últimas posiciones en cuanto a nivel de desarrollo humano. Sin embargo, su comportamiento desde 2007 ha sido mejor que la media española, principalmente por la mejora del indicador educativo y la importante reducción de la desigualdad. De hecho, la brecha relativa de pobreza ha disminuido en ese periodo de tiempo, si bien el aumento del paro de larga duración y sus efectos sobre la exclusión social han deteriorado el indicador más general de pobreza económica, aunque continúa por debajo de la media nacional.
Cataluña
En los casi cinco años analizados, la caída acumulada del PIB se sitúa en el 5,7% y la pérdida de empleo en el 21%, mientras que la tasa de paro aumenta desde el 8% al 24% de la población activa. Cataluña ocupa una de las primeras posiciones, tras el País Vasco, Navarra y Madrid, en cuanto a nivel de desarrollo humano. Su comportamiento desde 2007 ha ido muy en paralelo con la media española, viéndose afectado negativamente por la caída de la renta y el gasto medio de las familias. A su vez, el índice de pobreza económica ha crecido algo más deprisa que el promedio nacional no tanto por el aumento de la brecha relativa de pobreza como por el deterioro del mercado de trabajo y el aumento del paro de larga duración, situándose finalmente en un valor prácticamente igual que la media española. No obstante, si los indicadores de pobreza relativa se corrigen con arreglo al diferencial del coste de la vida en Cataluña respecto al promedio nacional, los resultados empeoran notablemente.
Comunidad Valenciana
La caída acumulada del PIB se ha situado cerca del 9%, la destrucción de empleo ha sido del 21% y la tasa de paro prácticamente se triplica al aumentar del 10% al 29% de la población activa. La Comunidad Valenciana contaba, antes de la crisis, con un índice de desarrollo humano ligeramente inferior a la media española. Sin embargo, en el intervalo de tiempo que va de 2007 a 2011 es una de las comunidades que sufre un mayor deterioro en dicho índice, motivado por una fuerte caída de la renta y el gasto medio de las familias. De igual manera, ha experimentado en ese periodo de crisis un gran deterioro en el índice de pobreza económica, hasta situarse entre las regiones con peores registros, tanto por la ampliación de la brecha relativa de pobreza como por la intensidad con que se manifiesta el desempleo de larga duración.
Extremadura
La caída acumulada del PIB se sitúa por encima del 6% y la pérdida de empleo en el 20%, mientras que la tasa de paro aumenta desde el 14% al 35% de la población activa. Extremadura ocupaba, antes de la crisis, la última posición en cuanto a nivel de desarrollo humano. Su comportamiento desde apenas ofrece cambios relevantes, apreciándose incluso una cierta reducción de la desigualdad, de modo que recorta su diferencia con la media española. De hecho, el índice de pobreza económica, que tiene en cuenta la brecha relativa de pobreza y el paro de larga duración, ha crecido mucho menos que la media durante el periodo señalado, situándose en 2011 claramente por debajo del total nacional, mientras que en 2007 estaba por encima.
Galicia
Acumula una caída del PIB del 4,5%, una pérdida de empleo del 17% y un aumento de la tasa de paro del 8% al 22% de la población activa. En lo relativo al índice de desarrollo humano, Galicia se situaba antes de la crisis por debajo de la media del país, pero su comportamiento desde 2007 ha sido mucho menos negativo que en el conjunto de España ante la menor caída de la renta y el gasto medio de las familias. De hecho, el índice de pobreza económica de Galicia ha crecido poco durante el periodo señalado, situándose en 2011 muy por debajo de la media española.
La Rioja
La caída acumulada del PIB se sitúa en el 5,4% y la pérdida de empleo en el 20%, mientras que la tasa de paro aumenta desde el 7% al 20% de la población activa. La Rioja se situaba antes de la crisis por debajo de la media del país en el índice de desarrollo humano, pero su comportamiento desde 2007 ha sido mucho menos negativo que en el conjunto de España ante la mucho menor caída de la renta y el gasto medio de las familias, y a pesar del considerable aumento que ha experimentado en el indicador de desigualdad. Por esto último, el índice de pobreza económica, ha crecido más deprisa que el promedio nacional, propiciado también por el acelerado deterioro del mercado de trabajo, y ha empeorado su posición relativa respecto a España.
Madrid
La caída acumulada del PIB ha sido del 3,5%, la destrucción de empleo ha alcanzado el 13% y la tasa de paro se sitúa en el 20% de la población activa. La Comunidad de Madrid ocupa una de las primeras posiciones en cuanto a nivel de desarrollo humano y su comportamiento desde 2007 ha sido ligeramente negativo, pero bastante mejor, en todo caso, que la media nacional. A su vez, el índice de pobreza económica, que tiene en cuenta la brecha relativa de pobreza y el paro de larga duración, ha crecido de forma muy parecida al conjunto del país, de modo que Madrid mantiene una posición de cierta ventaja que ya tenía antes de la crisis. Pero si los indicadores de pobreza relativa se corrigen con arreglo al diferencial del coste de la vida en Madrid respecto al promedio nacional, los resultados empeoran notablemente.
Murcia
La caída acumulada del PIB ha sido de casi el 7% en los casi cinco años analizados, la destrucción de empleo ha alcanzado el 21% y la tasa de paro prácticamente se ha triplicado al aumentar del 10% al 29% de la población activa. El índice de desarrollo humano se situaba antes de la crisis por debajo de la media española. Pero además, en el intervalo de tiempo que va de 2007 a 2011, Murcia es una de las comunidades que sufre un mayor deterioro en dicho índice, motivado por una fuerte caída de la renta y el gasto de las familias y por un importante crecimiento de la desigualdad. De igual manera, ha experimentado en ese periodo de crisis un gran deterioro en el índice de pobreza económica, hasta situarse entre las regiones con peores registros, tanto por la ampliación de la brecha de pobreza como por la intensidad con que se manifiesta el desempleo de larga duración.
Navarra
Acumula una caída del PIB del 3,3%, una destrucción de empleo del 14% y la tasa de paro se sitúa en el 18% de la población activa. Navarra ocupa una de las primeras posiciones en cuanto a nivel de desarrollo humano. Su comportamiento desde 2007 ha sido, sin embargo, algo más negativo que la media nacional. No obstante, Navarra, junto con el País Vasco, cuenta con uno de los índices de pobreza económica más bajos del país, aunque las dos variables que determinan dicho índice, la brecha relativa de pobreza y el paro de larga duración han tenido un comportamiento negativo durante la crisis, en línea con lo sucedido en el conjunto de España. Y si los indicadores de pobreza relativa se corrigen con arreglo al diferencial del coste de la vida en Navarra respecto al promedio nacional, los resultados empeoran notablemente.
País Vasco
La caída acumulada del PIB es del 3%, la destrucción de empleo de un 15% y la tasa de paro se sitúa en el 15% de la población activa, entre las más bajas del país. Ocupa la primera posición en cuanto a nivel de desarrollo humano, y su comportamiento desde 2007 apenas ofrece cambios apreciables excepto en la caída del gasto por habitante. A su vez, el País Vasco tiene también el índice de pobreza económica más bajo de todas las comunidades autónomas, aunque las dos variables que determinan dicho índice han tenido un comportamiento dispar durante la crisis: la brecha relativa de pobreza se ha reducido, pero el aumento del paro de larga duración ha introducido factores de exclusión social que afectan negativamente a la pobreza económica.
Las negritas son mías.
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