Lo que sabemos sobre las ideas políticas de los españoles ilumina un paisaje balcanizado, con tendencia a la fragmentación inestable.
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Proyectados en términos gubernamentales / estatales, los resultados de las recientes elecciones europeas esbozaron una cartografía cainita poco proclive a diálogos de ningún tipo, previsiblemente inestable:
-Españoles conservadores, muy mayoritarios, impermeables a otras visiones de España.
-Españoles ¿de “izquierdas” / “socialistas”?, esencialmente andaluces, en olímpico aislamiento.
-Nacionalistas catalanes divididos en dos grandes familias, con posible “divorcio” en una de ellas.
-Nacionalistas vascos, divididos en dos o tres familias, no siempre bien avenidas.
-Izquierdistas asturianos ¿capaces de unirse, más allá de Asturias?
El ¿histórico? declive de PP y PSOE, la emergencia y resistencia de IU, sugieren un paisaje político futuro harto inestable, cuando los problemas institucionales y constitucionales son tan graves como siempre.
La abstención y grupúsculos centristas y / o conservadores (UPyD, Ciudadanos, etcétera) aconseja matizar y relativizar tal fragmentación, que pudiera ser más rica en divisiones, mañana.
Ramón Gaya decía: “Los españoles están divididos desde siempre y antes, mucho antes de llegar a lo político. Lo político no es más que un pretexto para su división feroz, abstracta, desalmada”. El Duelo a estacazos pudiera ser una matriz cultural. Tema de trabajo del 5º volumen de mi serie España, una temporada en el Infierno.
- Fragmentación de las Españas, los nacionalismos y otros feudos cainitas.
- PP, PSOE, CIU y la bancarrota económica de los partidos políticos.
- Corrupción y crisis institucional… frutos podridos del modelo electoral y político.
- España, balcanizada.
Gráficos / datos elaborados por Carles Castro, para La Vanguardia, 23 junio 2014.
- España y Anales de Caína en este Infierno.
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