Duelo a garrotazos. Duelo a garrotazos, matriz política y cultural de las Españas.
Hemos progresado mucho.
[ .. ]
El duelo a garrotazos campestre, en una desértica meseta, se ha trasladado a las tabernas y los reservados pagados con dinero público en no sé cuentas alcaldías y comunidades autónomas.
El modelo andaluz se ha convertido en modelo canónico, tras las municipales y autonómicas del pasado 24 de mayo: Del duelo a garrotazos a la fragmentación inmovilista.
Esa fragmentación inmovilista es muy semejante a la crisis institucional que hundió la IV República francesa, víctima de una política de pactos a geometría variable que terminó paralizando la vida pública, caída de hinojos en las pantanosas relaciones entre minifundos ideológicos.
La crisis de la IV República terminó con un cambio de régimen y la fundación de la V República, con un nuevo modelo electoral, a dos vueltas
En España, todo eso suena a etrusco. Algo así. Los pactos tabernarios, entre cuadrillas de colegas, chutándose con cazalla y copazos a cuenta del dinero público son mucho más atractivos, cómo dudarlo.
Crece la desintegración social de los españoles.
Aumentan la pobreza y el riesgo de exclusión en más de media España.
España, puzzle inestable.
España balcanizada, a merced de los minifundios ideológicos.
España: más incertidumbre, menos estabilidad, fragmentación moral.
España, del duelo a garrotazos a la fragmentación inmovilista.
Constitución, financiación del Estado, modelo político: diez años de reformas pendientes.
Deja una respuesta