Lo que en verdad anuncia el estudio del CIS es una fragmentación política inquietante:
A través de la alquimia política, ese paisaje de fragmentación excepcional pudiera transformarse en este eventual paisaje parlamentario, igualmente fragmentado:
PREELECTORAL DE CATALUÑA. ELECCIONES AUTONÓMICAS 2015.
¿Qué puede salir de ese campo de ruinas fratricidas?
Nada bueno.
El bando indepe podrá gritar “¡Victoria!”. Pero se trataría de una victoria muy engañosa. En ese bando cohabitan provisionalmente personalidades y sensibilidades políticas enfrentadas, que difícilmente podrán aplicar un programa común. El programa de la CUP, por ejemplo, anuncia una declaración unilateral de independencia y la ruptura con el Pacto Fiscal Europeo: La CUP aposta per una DUI immediata després del 27-S.
El bando anti indepe está igualmente dividido.
Los indepes NO podrán imponer sus criterios fácilmente. Los anti indepes TAMPOCO.
¿Quién puede entenderse con quién, más allá del Duelo a garrotazos, matriz política y cultural de las Españas? Pues vaya usted a saber. De entrada, nadie quiere entenderse con nadie.
En Europa, quizá solo Grecia tiene un político tan balcanizado.
Grecia y Cataluña tienen cosas muy graves y profundas en común.
Si Catalunya guanya la independència, he d’aprendre català.
Robert,
La gran cultura catalana merece que comiences a aprender catalán hoy mismo,
Q.-
Agree.
Jesús,
Encantado, oye,
Q.-