El comportamiento de todas las fuerzas políticas, en todos los escenarios nacionales, estatales, autonómicos, municipales, confirma de manera espectacular la tesis central de uno de mis ensayos: El Duelo a garrotazos, matriz política y cultural de las Españas. Un catedrático eminente prefiere hablar de “suicidio institucional”:
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El Duelo a garrotazos, matriz política y cultural de las Españas.
ABC, “… la guerra abierta por el voto de la derecha se recrudece”.
El País, Vacío en la izquierda.
El Confidencial / Joan Tapia, “El problema es que mientras el independentismo no reconozca que gran parte de sus propuestas son inviables, y en el antiindependentismo —de Barcelona o de Madrid— no se explicite que un 47% es mucho 47%, y que aunque no tiene legitimidad para imponerse debe ser tratado con algo más que el código penal, el conflicto seguirá enquistado…” Mito y chantaje.
ara / Javier Pérez Royo, “I això no ha fet més que començar. Una guerra de guerrilles és un suïcidi institucional. Ni l’Estat ni la Generalitat poden guanyar-la. La Generalitat en cap cas. L’Estat sí, però posant fi a la democràcia a Espanya…” Guerra de guerrilles.
VilaWeb / Vicent Partal, Els partits no s’han entès mai.
España / Cataluña… duelo a garrotazos, antes y después del 21-D.
España / Cataluña… Buena salud de la Cataluña invertebrada del Duelo a garrotazos.
España / Cataluña y el referéndum, versión institucional del Duelo a garrotazos.
De la inexistencia de España al Duelo a garrotazos, matriz política y cultural de las Españas.
«La guerra de guerrilles», y ese Duelo a Garrotazos que termina (o comienza) en el Garrote, en el denominado Garrote Vil, torpe y triste remedo medieval, parejo a esas fiestas «populares» en que se matan animales y acaba todo como ese Rosario de la Aurora tan socorrido por tener indulgencia plenaria para la barbarie y recurso postremo milagrero. ¿Quo vadis, Catalunya? ¿Lo sabemos? Yo, no. ¿Dónde estamos, en el Duelo o en la Inexistencia? ¿Siempre va a estar así, estimado (y a ser, peligro extremo, ¡vade retro!)?
Ricardo,
Lo del «suicidio institucional» es una miqueta poético, pero bueno.
«Genio y figura, hasta la sepultura».
«¿Siempre va a estar así..?»…
Hélas !… como dicen los franceses… la crisis en curso es una repetición atroz de la misma crisis secular:
Como en 1640, 1714, 1914-1925, 1934… la crisis del Procés y del Pollastre durará años…
Punto altamente positivo… ¡no hay muertos!… Detalle sospecho que poco consolador para quienes están en la cárcel.
Q.-
Sí, estimado, siempre se quiere saber a otros en posición peor o más incómoda; bien lo ejemplificara aquel sabio del cuanto viendo comer a otro erudito las hierbas que él arrojase. ¿Será oficio de beato, pretendiendo exceder en penitencia a los iguales?, ¿habrá especie de supremo masoquismo narcisista? ¡Ojalá no haya muertos que no sean de «viejo», como se dijo en aquellos atestados de los médicos décimonónicos, y estos revivan y reinicien gracias a las impresoras en 3-D y a esa nanotecnología que nos observa, describe y cura a través de los implantes microscópicos. Menos ¡Viva la Muerte! y más ¡Viva un Solidario Placer!
Ricardo,
¡Bien..!
Sí… la vida comienza a «organizarse» a través de las palabras… de ahí que la retórica, el arte de la palabra, y no digamos el arte de escribir poemas o relatos, sean grandes arquitecturas que hablan de nuestra arquitectura moral y la arquitectura espiritual de nuestros pueblos… iluminando otras realidades, creamos otros mundos, más limpios, si se es capaz de escribir cosas bellas…
Q.-
Quiño,
Eres capaz de escribir cosas muy bellas!!!
Tu arquitectura, moral y espiritual, debe ser muy sólida.
Gràcies i bona nit!
Fina,
Ah… Correré un tupido velo, dices unas cosas…
Bona nit,
Q.-
Quiño,
Que triste que no sepamos construir esa casa, u hogar común, del que hablas en tu libro «De la inexistencia de España».
Así nos va…y ya veremos dónde nos lleva.
Fina,
Qué quieres… es lo que hay… la tal casa común solo es posible cuando se comparten cosas esenciales y se respetan las cosas esenciales del vecino… al día de hoy, solo son visibles duelos a garrotazos que ningún bando puede ganar…
Q.-
Oye, Quiño,
Hasta donde leí, no discrepo en nada de lo que dices en tu libro…Te tengo en mi mesita de noche…😀
Aquí estamos, Fina, en un día de hoy (para mi) de trabajo, a la espera del siguiente recorrido, breve, efímero cual la vida y, por tanto, ameritando aprovecharlo, extraer de sus lapsos el máximo partido, bien sea en soledad o en compañía (deberá depender de la elección, de lo nuestro y lo que nos permitan, que nunca se sabe cuándo y cómo se establece el enlace, y si el rayo no cesa o muy pronto se apaga).
Sī, Don Ricardo,
Una cosa es que te parta un rayo y otra muy distinta que te acaricie deliciosamente…Ya se verá qué nos merecemos y qué nos está asignado…
Sabe Ud. Don Ricardo…no sé porqué lo imaginaba jubilado, en algún lugar tranquilo, rodeado de gatos y ya sin trabajo…o en algún nosocomio. Me alegra saber que está a la espera del siguiente recorrido y como dice Baltasar Gracián (lo encontré en Google, no vaya a creer que soy una erudita como Ud.) : «Lo bueno, sí breve, dos veces bueno».
En un lugar tranquilo si lo estoy. Me resguardo aun viviendo en una gran ciudad; pero no escucho demasiados ruidos, tampoco tengo conocidos en exceso ¿Amistades? No sé son las justas, si me merezco más o menos, si se van y no vienen. Lo que si reconozco es que me he ido haciendo más feliz últimamente, aunque ahora eche de menos ciertas cosas. Hay ocasiones en que me siento estudiante de suspensa asignatura; si me la vaya a pasar el profesor puede que lo haga por no volver a verme, no por cuanto tenga de aspirante al aprobado, Fina. Ahora participo un poco del régimen de los gatos, casi me adapto a su espíritu grupal. Lo que sucede es que mis próximos amigos están más con los perros (El chacal Anubis, de acuerdo a la mitología secreta de los egipcios), y ahora, el círculo diminuto empieza a crecer; y yo tampoco lo quisiera amplio: la intimidad se perdería, no escale nunca por encima de diez.
Don Ricardo,
Qué bien reconocer que se ha ido haciendo más feliz últimamente, aunque eche de menos ciertas cosas.
Para mí también es una época feliz. Por fin puedo ser yo misma y dedicar más tiempo a mis devociones, entre las que se encuentra Ud.
Ahora me reclaman ciertas obligaciones, pero volveré lo antes posible para seguir con los comentarios…
Bona tarda!
Buenas tardes.
Don Ricardo,
A su «estimado» Quiño lo veo en fotos y vídeos, pero Ud. sigue siendo un «misterio» para mí…
En principio lo imaginé como un honorable anciano, sabio y luminoso, con barbas blancas…Por cierto ¿tiene Ud. barbas blancas? Lo veía pasear apoyado en un bastón y de mi brazo, mientras me iba contando detalles de históricas y bellas ciudades…Ahora ya no sé si voy a perder el aliento en el intento de seguir sus pasos…
Quizás la frágil mariposa no debería pretender volar tan alto…
Comparto con Ud. ese sentimiento de no estar preparada para el exámen, ese no saber lo suficiente…
En cualquier caso el rayo me ha dado de pleno, no cesa y ya veremos si se apaga…
Afortunados los que están en su círculo reducido e íntimo de amistades.
Bona nit!
A veces, Fina, quedo perplejo ante mi exilio habitual de la realidad (voluntario, por ahora; puede que no lo sea aquel día en que cruce las puertas del nosocomio, quizás mi lugar de reposo ideal, cuna en que termine lo que debo concluir sajando las dilaciones). Mis paseos se acortan, estiro además el período entre el uno y el otro. Vuelvo a añorar con frecuencia Toledo y BCN, Pastrana y Tarragona, rememoro las ocas de la Seo de Barcino, las velas y arbotantes de Santa María, las callejas de la Ciutat Vella (siempre crees descubrir alguna…¡y es la misma!, pero la interpretaste de otro tiempo, y viajabas a Neopatria y Negroponto con Moncada y Roger de Flor, paseaste junto a Jordi de Sant Jordi y Maragall). Más complicado aún Toledo entre su acrópolis….mucha casona en ruinas, decrépitos adarves, patios cubiertos de verdín… Ya no sé los que están en el círculo interno de amistades; me hallo tan recoleto, me asemejo, Fina, a esfera que guarda al caracol.
«La nación mas fuerte del mundo es, sin duda España. Siempre ha intentado autodestruirse y nunca lo ha conseguido. El día que dejen de intentarlo, volverán a ser la vanguardia del mundo».
Otto Von Bismarck
Lejano,
Si, la cita de Bismarck es bien conocida y apreciada, claro… ¡qué clarividencia..!
Q.-
Quiño,
Quería preguntarte una cosa. ¿Una vez editado el texto, hay alguna opción para corregirlo? Quisiera rectificar dos tildes…si es posible.
Ya me dirás cuando puedas. Gracias.
Fina,
Ah, me encantaría que me hicieses una relación de cosas por rectificar, claro… para otra edición…
Graciasssss
Q.-
Quiño,
Me refería a errores míos, en los comentarios que hacemos por aquí. Es que no sé si tengo la opción de corregirlos, pero no te preocupes, no sé trata de ningún libro.
Gràcies i bona nit!
Fina,
Cool… «mañana será otro día y verá la tuerta los espárragos…» decía mi abuela Encarna…
Q.-
¡Ay! Quiño,
Algunas de nuestras abuelas fueron muy sabias, la tuya, Encarna, sería una de ellas…por eso tuvo un nieto tan inteligente.
Oye, que me encanta leer tu libro…
Voy despacio y lo disfruto, encuentro muchos datos que desconocía, aclaraciones, historia, cultura y mucho espíritu…a ver si llegamos a tiempo para ver «la reconciliación» de la que hablas.
Bona nit!
Fina,
Bueno… las abuelas… vaya usted a saber, y los nietos, esos, Madre del Señor…
…
Muy generosa te leo, gracias, gracias.
…
A decir verdad, soy poco o nada optimista; dicho eso, pensando lo peor siempre cabe una sorpresa, una luz inesperada… a ver…
Q.-
Un país que paga bien a todos aquellos que viven de la dictadura o de unas guerrillas que se complementan . Unos creen que tienen la Verdad absoluta y los otros también. Comparten mártires y objetivos siempre que no hablen de la realidad. Nuestra realidad se impone desde fuera. Siempre o casi siempre. No sabe de política pero si de honores y chanchullos. O vamos delante o vamos al final. Calientes o fríos nunca templados. Los medios son buenos si se consigue el fin y malos sino lo consiguen. Unos intelectuales que superan a Maquiavelo. Plazas soleadas y mazmorras oscuras. Un país rico con gentes pobres material y espiritualmente. Nos comunicamos a garrotazos no con palabras. Liberales del Índice. Cruzados de la democracia orgánica en todas partes de la Peninsula. De Goya a Picasso lo único que cambia son los instrumentos. Del garrote al avión. Una anomalía con modelo de futuro. Se odian como si fuesen hermanos. Estos barbaros ibéricos…
buscan esa casa común.
Josep,
Temo a los que se creen con la verdad absoluta. Es todo tan relativo, ¿verdad?
De haber más ibéricos culturizados como vosotros, todo iría viento en popa.
Xdurigue que no
Jose,
… dudo, una miqueta, o mucho…
«… Se odian como si fuesen hermanos. Estos barbaros ibéricos…
buscan esa casa común…»
Hombre, yo me llevo muy bien con mis hermanos…
… entre esos «ibéricos» / carpetovetónicos… hay gente muy potable y digna de admiración, pero… efectivamente, tenemos una tendencia cainita al duelo a garrotazos… quizá le mejor historia de España sea la historia visual contada por Goya, entre otros… pero seguimos siendo incapaces de sentarnos a intentar comprender al vecino que piensa de otra manera, ay…
Q.-
«A decir verdad, soy poco o nada optimista…»
«Tout finit bien, puisque tout finit» escribió Chardonne en un excelente libro de aforismos titulado «Propos comme ça».
Y Cioran hizo de esa frase una de sus divisas (según cuenta en uno de sus libros).
Lejano,
Si… no recordaba la frase… pero, efectivamente, el pesimismo sin fisuras, «ontológico», puede dar un optimismo frenético… era el caso de Cioran. Y el de Clément Rosset, si no recuerdo mal,
Q.-
Don Ricardo y compañía,
Hoy, una excursión a Anfiarao, para visitar su santuario, sanatorio y oráculo me ha mantenido alejada de internet…
Mañana espero volver a la normalidad para ponerme al corriente y comentar algo…
Bona nit !
Don Ricardo, a ver si encuentra Ud. ánimos y motivaciones para salir de esa esfera…
Pero si se siente feliz y protegido en ella ¿ Por qué molestarse en salir?
Mañana seguimos comentando…
Don Ricardo,
Por la tarde, con tiempo y tranquilidad le hablo…
Su rayo me acompaña…
Don Ricardo,
Aquí me tiene, por un lapsus de tiempo, toda suya.
Es curioso, que sin conocerlo de nada intuyo que estar en su círculo interno de amistades debe ser como una bendición de los dioses…
Ese exilio voluntario de la realidad, lo comprendo y comparto. Debe existir un mundo mejor del que sentimos añoranza…y si sentimos añoranza será porque lo hemos conocido, o soñado. No lo sé.
No deseo que cruce Ud. las puertas de ningún nosocomio, a no ser, que gracias a las nuevas tecnologías, el «revivir y reiniciar» para alcanzar la inmortalidad, lo convirtiera en un ser más feliz…
En fin, me cuesta imaginar tantos avances y cambios…
Quizás por el momento, lo mejor sea pasear por hermosos parajes… como el del Sanatorio y Oráculo de Anfiarao, que tuve la fortuna de visitar el pasado sábado, para disfrutar de la arqueología, la Naturaleza, la historia, los mitos y respirar aire puro…
Ay, Don Ricardo!!! Si lo hubiera Ud. visto, con qué arte nos lo contaría…
O sea que…a las puertas de Atenas, cuna asimismo de nuestro pasado, puede que el más estimable; pero… cuanto se ha visto por allí, Fina, desde que Codro (dice la conseja griega) se diera muerte para salvar al Ática de los dorios y luego se instaurase el arcontado: persas y romanos, Bizancio y las Compañías Catalanas, cuatro centurias so el yugo de Turquía, ahora, es la gran Atenas, urbe de cuatro millones, desparramada casi de uno a otro lado del mar, que ya se olvidan el Licabeto y el Pentélico, los muros del Pireo. En eso y en aquello estamos, abordando el empeño de hacerse más feliz; lo sucedido es que, al hallarse en ello pocos operarios, los más añosos, valetudinarios encima, queda menguada la energía que acude al campo de fuerza y se transforma, no escucha la llamada una Bastet; puede que sirvan los oficios de Anfiarao, el adivino.
¡Oh!, Don Ricardo,
Anfiarao, sabría decirnos si podré resistir el fulgor y la energía de sus rayos, o si mi destino sera parecido al de Sémele…
Quizás también si consultáramos el Oráculo nos sería revelado el future que aguarda a Cataluña, España, Europa…y el mundo.
En fin, vivamos el presente. A mi me tiene Ud. maravillada con sus saberes. He comprobado que es un experto conocedor de Toledo y Barcelona, lo que no imaginaba es que sus conocimientos fueran tan extensos. Sabe Ud. más de Grecia que yo, después de residir por más de cuarenta años en este país.
En pocas líneas condensa Ud. siglos de historia de una forma magistral. Gracias por su LOGOS que alegra y enriquece mi vida.
Bona nit!
Grecia, Fina, ¿es nuestro ancestro principal, el alma de Occidente? Era Bizancio durante mil años, medio milenio largo lleva Constantinopla siendo Turquía, Asia Menor es Anatolia (Éfeso, Pergamo, Troya, Esmirna y Nicomedia están allí. Hoy en Izmir no se oye ya el ladino; tampoco está la Armenia; Ancira es ahora Ankara; Trebisonda, Trabzom; no hablo de Tesalónica: ¡pasó por tantas manos, tracias y macedonias, búlgaras y judías, helénicas y otomanas! No estaba el gran Filipo muy lejano, y Teodosio hizo correr la sangre por las calles de Salónica. Temo la conversión de Grecia, sus islas, sus montañas, sus ciudades, en colosal parque temática con que pagar la deuda que la aflije…no sé, no sé; espero sea un mal sueño. Ahora, recién venido de Toledo, ruta de gatos más que monumentos, era fiesta en Madrid, manadas de turistas nacionales y extranjeros, demasiado revuelo, el Corpus a la vista, ante tanta casona, tanta calle antigua, casi echo de menos los curas y las monjas tridentinos. Bona nit, Fina
¡Ay! Don Ricardo,
Qué placer despertar con sus letras…!!!
Creo que Grecia fue nuestro ancestro principal y alma de Occidente en su época de esplendor. Después ya vino la decadencia…
Visitando sus museos y zonas arqueológicas todavía se respira el espíritu y alto grado de perfección que alcanzaron, especialmente en la época clásica. Me extasío cada vez que contemplo la Acrópolis y otros templos, cuando giró alrededor de una escultura clásica…
También es cierto que me desilusioné, pues esperaba encontrar a muchos filósofos y sabios. En fin, la vida da sorpresas, mire por donde los encontré ahora en «Una temporada en el infierno».
Hábleme de sus sueños…si le apetece. Hábleme de lo que quiera…
Ya sabe que me encanta escucharlo.
Gracias y buen día.
Fina: Parezco declinar pero me niego a reconocerlo. Se acerca la hora de tinieblas, el lubricán se aproxima, pronto será de noche, tiempo de soledad en que te hiere y te vulnera la pendiente asignatura: ya ningún catedrático la pasa: murieron todos, los pocos aún restantes, senectos en exceso, no ven ni oyen, tampoco ya caminan. Mi cuerpo se convierte en almazara a la que mueven las bestias que yo engendro. No sé si en el Infierno hay Temporada, si es el Leteo el cóctel que te sirven, Rimbaud yo lo bebió a los diecisiete. Quedan pequeñas aventuras, ir en el metro hasta su extremo lo parece, Salamanca o Sevilla tierra incógnita, Barcelona San Borondón, que emerge y se deshace, temo que las Atarazanas me desguacen, caiga un berrueco al llegarme a Casa Antúnez, se abra de nuevo la calle de Aragó, véngase encima el Monte Tibidabo, sea bocana monstruosa la estación de Sants, el Prat un águila de fuego, todo devenga en los viejos cabaret del Paralelo, bululú de la Johnson y La Maña, Escamillo y la Bella Dorita…Molino de una noche proletaria y suburbial, casi de sexo de pandemia. El torpe duermevela que aduna un tanto de entrañable, de bolsillo vacío y última copa solitaria, la creatividad perdida y nunca hallada: el Templo no recoge ya a sibilas.
Don Ricardo,
No sé si se trata de que el Templo pueda recoger a las sibilas…
Me cuesta concibir un templo sin dioses y sin ellas…Todavía siento su presencia en muchos lugares arqueológicos que he visitado. El Misterio, lo Sagrado, el resonar de sus voces en templos casi en ruinas hablan de una presencia intemporal…Cuentan que las sibilas habitaban en grutas, cerca de corrientes de aguas puras y cristalinas…
En fin, sigo intrigada, no me aclara Ud. si tiene barbas blancas al estilo del Moisés de Miguel Ángel.
Bien, a cierta edad ya no estamos para grandes aventuras, hay que intentar adaptarse a las circunstancias…Ya es mucho poder disfrutar con su Logos.
¿Me permite otra pregunta? Cuando habla de «la pendiente asignatura» ¿se refiere al último y definitivo viaje?
Presiento que Bastet espera al final…con sus cálidos rayos de sol…
No, Fina, continúo sin dejarme barba, y bien que me vendría. Parezco un desenterrado, recelo doy a las muchachas, de lejos se me asimila a estudiante provecto de los años de la hambruna que, al acercarse, muta en imagen decaída de ánima en pena, fugado de la Santa Compaña. Vamos, sí, aprendiendo el Ars Moriendi, puede que lo haga en otra lengua, así ensueño en cuanto ha de tener ese próximo viaje de menor carácter definitivo; porque estaban los templos arruinados, vacíos, aguardando a ese Dios Desconocido en que muchos hallaban esperanza; por eso, ni sibilas encontrara, y era preciso que El Auriga no se dejara molestar por el desasosiego, nunca escribiera el libro, olvidase a Fernando Pessoa. Hace unas semanas, El Godo se me ha muerto. No era mascota mía, lo era de otros, de muchos. Alegraba a los parroquianos de un café situado en la plaza de un poblachón manchego allende el Tajo toledano, ya en dirección hacia los montes. Dormitaba y comía bajo un muy largo mostrador, asombrando a los visitantes esporádicos. A la tarde, salía, detenido enfrente de la puerta, fija la mirada en un cliente para que así le abriera. Parecía después ponderar la densidad del tráfico, cruzaba muy seguro, se iba de fiesta, a veces, tardaba un par de días en volver. Su dueño, tullido y chiquito, gracioso gnomo tabernario, le acogió siendo el Godo cachorro. Ocho años han pasado hasta su muerte. ¿Nos verá desde el cielo de Bastet?, ¿le tendrá recorriendo los empíreos felinos ese Conde Gatón que pasea a los gatitos muertos a la grupa del caballo gigante que posee? Era el godito muy rijoso, empreñó a muchas, ¿llorarán su partida las madres y los hijos? Tiene mi duermevela una tumba pequeña al pie del monte Athos, entra y sale el godito, viste mortaja breve, ora un archimandrita a la Pistis Sofia para él.
Buenos días, Don Ricardo,
Tengo que salir corriendo para resolver unos asuntos en Atenas. En cuanto pueda le comento con tiempo…
De momento ya recé una oración para «godito» y por poco me pongo a llorar.
Que descanse en paz…
Hasta luego…
Sea todo lo bueno posible en Atenas. ¿Cómo es que tanto abunda en Grecia? Suerte de la estrecha relación con aquel país, tan próximo a nosotros, hijos (en parte muy querida) que somos de él.