Trabajando en los Españoles de tres mundos de Juan Ramón Jiménez, por razones que no vienen al caso, me tropiezo con el personaje de Teresa Wilms Montt. Artistócrata, libertina, apasionada, anarquista, cosmopolita, admirada por Valle Inclán, Huidobro y Ramón Gómez de la Serna. A medio camino de Isidora Duncan y Silvia Plath ¡Qué mujer..! Se suicidió en París, con somníferos, y murió en el Hospital Laënnec. Prometo buscar su tumba y llevarle un ramo de flores, mañana.
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Európolis. Cosas mortales e inmortales.
Vuelvo de vacaciones al Infierno y me encuentro con la historia de esta mujer fascinante, muy hermosa, de nombre aristocrático y alma tenebrosa:“Hay en mi alma un pozo muerto, donde no se refleja el sol, y del que huyen los pájaros con terrores de virgen ante un misterio de cadáveres».
Gracias por descubrírnosla, Quiñonero. Póngale unas flores de nuestra parte y tráigala más veces a este infierno.
PD: Hablando de suicidas, me permito recomendarle este artículo sobre Walter Benjamin (y el gran Baudelaire) publicado en la revista «A Parte Rei»: http://serbal.pntic.mec.es/~cmunoz11/baltar46.pdf
Hola, Bufalino, oye, pero ¡no me hables de usted…!
Mi idea era sugerir a alguien que reeditase la obra de la Wilms Montt que era una Señora de lo más recomendable.
Gracias por lo de WB.
Sobre París (al margen de los balzacs,hugos, barojas, azorines, hay dos libros canónicos: el de Hemingway y las cosas múltiples de Benjamin, en efecto.
Saludos..
Q.-
Sí, hay que reeditarla. Murió a mi edad. ¿Dónde está Abelardo Linares o los Pre-textos?
Leí «París era una fiesta» en la adolescencia y me impactó muchísimo (en cambio, el resto de su obra no me gusta). Y creo recordar que Gómez de la Serna también escribió algunas cosas muy interesantes sobre París, ¿no?
Se me ha ocurrido una idea: ¿por qué no visita un día de éstos la casa-museo de Víctor Hugo, en la preciosa place des Vosges, y nos cuenta sus impresiones sobre las fotos fantasmales de Rodin y Hugo, como auténticos poetas malditos? (Ay, se me ha olvidado el tuteo…)
Tomo nota de lo de don Víctor. Teme ser un poco irrespetuoso, aunque sus Miserables fueron un libro de cabecera de mi adolescencia.
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En verdad, París también está tomando otros rumbos:
http://jpq.es/Euro/index.php/Babel/2006/07/02/p390#more390
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Saludos..
Q.-
gracias de nuevo, señor Q, siempre me descubre usted unas chicas muy interesantes.
Recuerdo la primera vez que una moza con la que yo pensaba que podía intimar me habló de usted.. estuve deprimido varios días.. Emma insiste..
Lo de señor Q. me deja traspuesto.. ¡¿qué hecho yo para que me trateis con ese respeto??!!!!…
Q.-
Borrando el spam que me ataca de manera creciente, eliminé involuntariamente un comentario de Roberto (¿?). Lo lamento.
Q.-
Lo siento, Q. Lo que yo quería decir estaba que, en el internet, los opiniónes estan mas simplistas y menos matizando que dentro de los conversaciones cotidianas. Yo te he llamado Señor, y pues Emma te ha llamado Señor. Dos vezes has tenido algo que objetar. Órale, no estas un señor. De acuerdo. No quería dar la lata. Perdon, lo digo sinceramente.
Hola, Roberto,
Te agradezco la cosa. Dicho esto: lo de Señor establece una «barrera» que resulta incómoda, un poco. Todos somos Señores, ¿no?
En fin..
Q.-
Pienso que todos no somos Señores. Bin Laden sera un ejemplo de lo quien arrasa la población civil. Himmler. Idi Amin. Esto tipo tira a propósito a los blancos inocentes para obtener sus objetivos politicos. Tanta crueldad gana la estima de otros terroristas. No quedó ni un solo Señor entre ellos.