La Pedrera, 7 agosto 06. Foto by JPQ
Felices vacaciones, 11
Tenía cinco o seis años (no había nacido mi hermano Javier) cuando mi madre me llevó por vez primera al Park Güell, cuyas salamandras, serpientes, chimeneas, soles, medusas y columnas dóricas siguen siendo para mí el talismán precioso que me permite entrar en el mundo de hadas, dragones, gnomos, brujas, princesas e ilusiones del que, en verdad, quizá no haya salido nunca.