Maravillas del azar. Hago el París / Barcelona con Sophie Oudot. ¿Cuántos años hace que no nos veíamos? Se ha casado. Tiene un hijo. Enseña geografía e historia contemporánea en Normal Sup. Está radiante y feliz. Ha terminado el gran ensayo en el que ya trabajaba cuando nos conocimos: Geopolítica y fronteras interiores. España y el Mediterráneo.
Sophie resume su obra de este modo: “La desestabilización, desmembración o como quieras de España no vendrá de sucesivos estatutos catalanes, vascos o murcianos. Quizá pudiera venir del Mediterráneo… Aznar perdió el poder, entre otras razones, a causa de la guerra de Irak. La presencia militar española, en el Líbano, incluso con bandera de la ONU, puede crear tensiones graves. A medio plazo, a veinte, treinta, o cuarenta años, ¿cómo reaccionarán los distintos gobiernos autónomos regionales ante previsibles crisis militares en Marruecos o Argelia? ¿Cómo reaccionarán los gobiernos autónomos de Andalucía, Madrid, Barcelona o Vitoria ante un movimiento de auto determinación berebere en Argelia? ¿Cómo se defenderán Cartagena o Málaga el día que una república islámica argelina o marroquí se doten de misiles de medio alcance como los que ya tiene Hizbolá en el Líbano sur..?”.
Tesis que pudiera dar matices muy piadosos a mi De la inexistencia de España.
maty says
Por palabras similares a uno le consideran de «extrema derecha» por estos lares catalanes.
La incapacidad de ver más allá del ombligo es un mal muy extendido. Así nos va y peor nos irá en el futuro. Pero tranquilidad, a la población española no le importa, nada le importa. Todo le es indiferente hasta que un día termine despertándose súbitamente.
Mientras tanto, lo mejor, creo. Si la sociedad que nos rodea es así de indolente, dejémosla, y pensemos en cómo prepararnos personalmente para salvarnos nosotros mismos.
Muchos judíos alemanes fueron incapaces de reaccionar en la década de los treinta, así como la parte de la población alemana que no comulgó con el nazismo. Algunos como Einstein no dudaron en abandonar el país, mientras que otros se quedaron paralizados.
Pues eso, si España «se va al carajo», pues habrá que estar preparado y evitar que a uno «le pille el toro», como a tantos acometió durante la guerra civil española, tan previsible desde dos años antes, cuanto menos.
JP Quiñonero says
Hola, Maty..
Otra frase «latiguillo» de este Infierno: «El progreso, eterno retorno de la catástrofe..», de WBenjamin.
maty says
Mi primer comentario viene del cansancio «secular» ante la indiferencia de la mayoría de la población catalana ante los desmanes del nacionalismo excluyente, llamándome más la atención la indiferencia de quienes lo padecen o padecerán más.
En fin, si los afectados de un problema sólo muestran indiferencia ante él, pues que se atengan a las consecuencias de su pasividad, si las hay.
Tal vez yo sea el equivocado. En todo caso, allá se las compongan, estoy harto de clamar en el desierto/oasis catalán, en defensa de los derechos de unos que ni tan siquiera ven la necesidad de su defensa.
Pues eso.