Montaje con obras de Elliott Erwitt
Quizá una forma privada de comunión con Nueva York y el recuerdo de sus víctimas fuese contemplar, en silencio, algunas imágenes de grandes maestros. Pienso en la serie de Avedon sobre su padre. O algunas instantáneas de Elliott Erwitt, que continúan alimentando la frágil llama de las almas muertas y sin embargo tan presentes y tan vivas, para nosotros, a través del misterio de la fotografía.