El riesgo de proliferación de armas nucleares, en Irán y en todo Oriente Medio, oculta parcialmente la realidad devastadora de otras armas de destrucción masiva que ya funcionan con trágicas consecuencias en Irán y no pocos Estados musulmanes: la censura, la incultura.
Azar Nafisi, autora de un libro célebre, Leer Lolita en Teherán, iraní desterrada en los EE.UU., profesora de literatura inglesa en la universidad Johns Hopkins de Baltimore, escribe: “El régimen islámico de Irán recrudece sus medidas represivas contra los trabajadores, las mujeres, los homosexuales, las minorías. Quizá los observadores tengan sus dudas cuando se les habla de la “influencia subversiva de los libros”, en Teherán” [ .. ] “Pero el régimen iraní es perfectamente consciente del peligro que representan las obras de la imaginación y el pensamiento”.
Azar Nafisi es muy elocuente y dice cosas muy bellas cuando habla del carácter subversivo, en Teherán, de Faulkner, Joyce, Nabokov, Hannah Arendt, Kant, Spinoza, Alfarabi, Louis Massignon, Omar Khayyam, Hafez…
Le Monde, 19 diciembre 06. En Iran, culture rime avec censure.
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