El uso político personal de la transformación política y económica de España, durante los últimos treinta años, está dando de JL Rodríguez Zapatero una negra imagen en los medios financieros más influyentes.
Financial Times (FT) ha publicado un editorial sin firma, de una gravedad particular, tratándose del matutino financiero más influyente de Europa, comenzando por recordar que la inmensa transformación protagonizada por España, desde hace treinta años, es uno de los más grandes éxitos de la historia de Europa, fruto de la voluntad colectiva. A continuación, FT se dirige a Rodríguez Zapatero de manera frontal afirmando que su reciente intento de utilización política del estado de la economía nacional roza la arrogancia sin nobleza. FT utiliza el calificativo “hubris”, que nombra, al mismo tiempo, la arrogancia y la ausencia de nobleza.
FT va más lejos, dirigiéndose al primer ministro: “En verdad, su administración ha hecho poco para favorecer el desarrollo económico” [ .. ] “En verdad, los socialistas parece que consideran una virtud no hacer nada”.
A juicio de FT, la economía española tiene hoy unos pies de barro, apoyada en tres frágiles pilares: tipos bancarios bajos; mano de obra barata (incluyendo la mano de obra inmigrante); y la burbuja inmobiliaria. “Se trata de una mezcla muy vulnerable”, subraya FT, si va acompañada, en el caso español, “de un crecimiento muy bajo de la productividad, una débil base tecnológica, y un arcaico sistema educativo”.
“Mr. Zapatero tiene poco que decir sobre como combatir esos problemas, como mejorar la competitividad y la innovación”, continúa FT, concluyendo: “España necesita mejorar la gestión de su economía, casi tanto como celebrarla”.
En otro plano, Bloomberg distribuye entre sus abonados un análisis de Sharon Smyth, comentando que los escándalos, la corrupción y el desconcierto están minando la reputación del sector inmobiliario español, comentando que, en ese terreno, el gobierno “ha hecho poco y demasiado tarde”.
- Financial Times, 18 abril 2007, Vulnerable Spain.
Naturalmente, Zapatero navega con la garantía de disponer de una situación económica de presente boyante y futuro incierto, aunque eso no es lo que debe preocuparle por el momento.
Todos los políticos se arrogan la marcha de la economía, cuando esta no es sino un continum.
Ingenuidad e inconsistencia y arrogancia son para mi, los tres defectos del Presidente del Gobierno:
Ingenuidad por cuanto cree que los buenos deseos se pueden plasmar en actividad política por efecto de la voluntad. Vivir la utopía conlleva el riesgo del fracaso, lo que en políitica es imperdonable. Un solo hombre no puede enderezar de golpe los problemas de cohesión de España, que vienen desde muy atrás.
Inconsistencia: por cuanto sus ideas, basadas seguramente en una imagen bienaventurada de la sociedad que pretende, no responden a la realidad de la situación política que vivimos. Le falta la prudencia y madurez necesaria para comprender que su buena intención puede ser destructiva.
Arrogancia: porque se lanza a hacer cambios estructurales contando solamente con poco más de la mitad del voto para el acuerdo.
Le voté, y a los doce meses estaba perplejo, a los veinticuatros asustado, hoy me mantengo al margen.
Como dice Luri, votaría a la derecha, pero no me deja.
Luis,
Puestas las cosas en esos términos, tengo que confesar que no he votado jamás. Nunca he sentido ninguna necesidad apremiante de consumar tal acto cívico, que me parece razonable, sensato y quizá indispensable. Dejando en suspenso la libertad de quienes, como yo, nos sentimos muy alejados de todos esos negocios.
Lo único que he hecho en la vida, para intentar “ganármela”, ha sido trabajar en periódicos, emisoras de radio y tv. Un horror. No sé hacer otra cosa.
FT habla en esos términos de ZP. Si mañana ese mismo periódico (por el que confieso un respeto muy grande) dijese horrores semejantes de otro primer ministro español, y yo siguiese escribiendo este Infierno, creo que intentaría resumir el mismo artículo en el mismo tono.
Me siento llamado a discutir horas y horas sobre este o aquel matiz libresco. Pero confieso mi horror ante la infame turba (LdG, Polimefo, claro) política y aledaños, de las más distintas especies zoológicas. En todos los campos, incluso hablando de los mismos personajes, creo que algo bueno se puede encontrar casi por todas por partes. Pero lo mío es otra cosa.
En el fondo, si publico ese tipo de entradas es por pura deformación profesional. Otro horror, claro.
Q.-
PS. ¡Perdón por estas monsergas de principios..! Solo van dirigidas al anónimo lector que viese una dimensión política en estas cosas. “Vade retro Satanás”.
Bien, entoces amigo Quiñonero, te propongo almorzar juntos el día de las elecciones, ya que no tenemos nada importante que hacer.
Luis,
Me parece buena idea. Los franceses dicen algo así como irse a pescar el día de elecciones. Tu idea de comer entre amigos me parece mucho más potables, claro.
En ese quedamos,
Q.-
Hola, Quiñonero.
Creo que la traducción adecuada para «hubris» es «soberbia»; aunque no lo digan los diccionarios que tengo en casa (mira que son deficientes los diccionarios bilingües).
Es curioso que ahora, si se consulta, el artículo haya cambiado de título.
Un saludo.
Antonio,
Totalmente OK, claro. Confieso (mea culpa) una cierta malevolencia «jesuítica» en mi presentación de la cosa.
Q.-