Sobre la crisis de los nacionalismos…
Leo en el Cuaderno de Madrid de Enric Juliana (La Vanguardia, 16 septiembre 2007) estas conclusiones personales sobre la evolución de los nacionalismos:
[ .. ] De los cuatro grandes nacionalismos peninsulares, el portugués, el catalán, el vasco y el español propiamente dicho, sólo este último, el españolismo de matriz castellana, se halla hoy en fase de vigoroso despliegue, de agresiva afirmación incluso. Los demás están en crisis de orientación. El galleguismo no figura en la lista, porque es caso aparte. El galleguismo es un regionalismo fuerte.
El nacionalismo portugués, basado históricamente en un fuerte sentimiento anti español, está siendo sometido a una dolorosa revisión. Vasquistas y catalanistas se están escindiendo, confusamente, laberínticamente, entre moderados y radicales, entre lúcidos e iluminados (y oportunistas, cabría añadir en el caso catalán). Lo cual no quiere decir, en absoluto, que vayan a desaparecer, o a perder mucho peso electoral. El posnacionalismo, hoy por hoy, es una quimera. Lo que está en crisis es la fuerza de los nacionalismos periféricos para articular bloques sociales perfectamente cohesionados. Sin fisuras.
[ .. ]
- Cataluña cainita, 6.
- Darwin y los “pazguatos” y “resentidos” catalanes.
- Cataluña en este Infierno.
A medida que se aleja el punto de vista hacia lo general, se pueden observar las realidades de la misma manera que una pintura abstracta no permite una visión fragmentada del lienzo.
El texto de Juliana, que me parece correcto hasta en su definición del galleguismo, me lleva a preguntarme por la causa de que «lo español» haya salido tan reforzado de la dictadura con su travesía democrática. ¿Será por causa de la posición en Europa en términos de igualdad con las otras naciones democráticas? ¿Será que lo español es la interlocución de esta España de vocación fragmentaria? En ese caso, el proceso histórico habría retomado los impulsos globalizadores de la política a partir del conde duque y su Unión de armas. Ya sé que me remonto muy arriba, pero creo que ese fue el primer intento de legislación generalizadora, que salió mal, ciertamente.
Luis,
Por mi parte… veo poco clara la potencia del nacionalismo español de matriz castellana… quizá en plural, “nacionalismos españoles”… Sin entrar en la política de rompe y rasga (Aznar, Zapatero, etc., tirándose distintas concepciones de España a la cabeza, cuando no cambiando de concepción al ritmo de los intereses del momento), incluso en el más noble terreno cultural veo diferencias de fondo… qué se yo, entre los distintos patriotismos (constitucional, cultural, etc.) de personalidades eminentes. Y otra cosa sería la importancia global de la lengua o la economía, mucho más allá de toda frontera política o administrativa… Dicho esto, a partir de una talla crítica mínima, todos los Estados se ven forzados a colaborar con sus aliados. Pero, pero, la presencia militar española en el Líbano o Afganistán, ¿supone una influencia de España en la marcha de los acontecimientos? ¿Pesa España en Argelia o Marruecos para poder asegurar su propia seguridad interior? ¿Hubiera pesado la presencia militar de España en el curso de la guerra de Irak? ¿Influye en alguien el concepto gubernamental español de Alianza de civilizaciones..?
La lengua y la economía tienen sus territorios propios, mucho más allá de las fronteras políticas constitucionales. Pero no veo el bien real peso internacional de los bancos o empresas españolas asociado a ningún nacionalismo particular: se me antoja indisociable del poder de influencia empresarial de sus dirigentes, cuyos intereses particulares no siempre son forzosamente patrióticos, ni mucho menos.
En el terreno cultural, solo recuerdo a JRJ manejando el concepto de “Españoles de tres mundos”…
Q.-
Me refería Q, más auna cuestión de tipo interno que extenso. Creo que se trata de ver ciomo los nacionalismos internos intuyen una mayor confianza en «lo español» de loq ue creían que se iba a dar. Pero insisto que es algo matizable, visto desde debtro.
Por otra parte, no espero mucho de una presencia internacional española, porque no recuerdo cuando la ha tenido. Desde el siglo XVIII, la monarquía de los Borbones no han sido sino acompañantes de Francia. Acabada la época de Napoléon, España no pintó nada en Viena. Después no pintó nada de nada en ningún sitio. Ni en América, ni en Africa ni en Europa. Hoy podemos ser compañeros de viaje o formar parte de une quipo con un objetivo común. No siento especial nostalgia por pasados esplendores ni ambiciono futuros. Puestos a poder elegir me hubiera gustado nacer en Italia o en Francia, pero nací en Barcelona. Cabe conformarse.
¿El nacionalismo español no está en crisis de orientación?
Pienso que la concepción de España de los dos grandes partidos es muy distinta, más incluso que la que hay de Catalunya o Euskadi entre sus partidos nacionalistas.
¿En Portugal existe una dolorosa revisión?
¿Por qué?
¿Por un estudio mal hecho que demostraba que los portugueses querían seguir siendo portugueses por encima de todo, pero que dependía de los «titulares» que se leyeran, sobre todo de algún periódico español, su percepción podía llevar a equívocos?
¿Desde cuándo los intereses económicos de los dirigentes son patrióticos?
Los dirigentes descentralistas son tan patrióticos al mirar su bolsillo como los centralistas. Y tan malo es que el poder económico esté en manos de unos como de otros.
Luis, Pau…
Luis… Igual llevas razón… pero ¿donde meto yo mi pesimismo irredento, absoluto y total..? JP veía la evidencia del desorden caótico del universo en una tormenta que destrozaba un plantel de lechugas. Yo veo en el desorden caótico de España la evidencia de la existencia real de la laguna de Alvargonzález. Cada tema con su loco.
Pau… lo de «dirigentes descentralistas» me parece tan potable como lo de «patriólogos» de BPorcel [Darwin, los «pazguatos» y «resentidos» catalanes]. Por el contrario, me temo que dentro del PP y del PSOE hay un arco iris de sensibilidades nacionales que pueden llegar a ser antagónicas… pienso en Bono y Maragall, o en Aceves y Piqué…
Nobody’s perfect,
Q.-
Fíjate Q, que cuando nombras a sensibilidades diversas en los grandes partidos, en los dos ejemplos sit´´uas a un catalán, ambos procedentes culturalmente de aquel ziquierdismo sesentayochista. A mi, lo que me gustaría es encontrar sensibilidades diversas dentro del cogollo no «nacional-periférico», que debe haberlas. A esas las llamaríamos, probablemente modernas o europeas. Claro que Bono, Rodríguez Ibarra, como Aceves, son los extremos vergonzantes de una sensibilidad patrioteril que no es seria, que de pandereta y charanga. Es esa parte de españa, la anclada en las formas (y el fondo) la que niega la evidencia de la modernidad.
Ahora bien: ¿Que es la modernidad en España? Yo supongo que sería un ajustarse a los conflictos con voluntad de entendimiento y situarnos en la calle de la carrera que nos corresponde en Europa procurando no perder el paso. Ganar no vamos a ganar, pero entrar en la meta estaría muy bien.
Claro que se puede ser pesimista, y si me lo permites, se debe.
Luis,
… hombre, lo pones muy difícil… ¡un político carpetovetónico que sepa algo de Cataluña..! ¡Ni siquiera lo sabían Ortega ni Azaña!… Azorín SI sabía y respetaba a Prat de la Riba (¡y lo defendía en el ABC!!!)… En el otro bando, ¿existe algún independentista catalán que sepa algo de Andalucía y de la España atlántica?… la proliferación de matonismos “patriólogos” habla, justamente, de algo peor que la decadencia, y viene… de personajes que entraron en política progresista cuando ellos mismos apaleaban a sus esposas… no veo a gente de la altura de Dionisio Ridruejo, Antonio y Miguel Maura, por citar solo a conservadores… ¿qué decir de los problemas que tienen Solbes o Ruiz Gallardón en sus respectivos bandos..? ¿y de las sub divisiones microscópicas de Ciudadanos y el futuro nuevo partido?… ¿Cómo calificar el silencio cómplice de los “intelectuales”, ante un panorama tan siniestro, escudándose detrás de esta o aquella bandera apenas empresarial o politicoide..? ¿Algún político castellano sabe que el autor de uno de los libros canónicos del judaísmo místico y revolucionario era de León..?
Q.-