El futuro y la libertad de las ideas… ¿Cómo no interesarse por tal debate, tradicionalmente animado por escritores, filósofos, ensayistas, universitarios, especialistas en humanidades..?
[ .. ]
Teóricos y activistas de las nuevas tecnologías y herramientas de comunicación abrieron hace años nuevos frentes a ese mismo debate, que pudiera resumirse con esta cita célebre:
The freedom that is my focus here is the creativity and innovation that market the early Internet. This is the freedom that fueled the greatest technological revolution that our culture has seen since the Industrial Revolution. This is the freedom that promised a World of creativity different form the past.
This freedom has been lost…
Uauuuuuuuuuu… nuevas formas de creatividad, una libertad sin fronteras. Amenazadas ¿de qué manera y por quién? A través de Addenda & Corrigenda y Yonderboy / Barrapunto.com llego al genuino blog de Lawrence Lessing, a quien pertenece esa cita de su ensayo The Future of Ideas (2001), de libre acceso bajo una licencia Creative Commons no comercial.
A pesar de mi entusiasmo y respeto, también confieso algunas reservas y matices sobre la revolución en curso:
● Crítica de la basura blogográfica.
● Crítica de la ilusión blogográfica.
Como poco, desde luego inquientante….
Juan,
Vaya usted a saber…
Q.-
Creo que hablar de «futuro de las ideas» es lo mismo que pensar en «suspiros verdes». O como descubrir mediterráneos.
Joaquín,
¿»Suspiros verdes» o «suspiros de España»?
Q.-
La manipulación, el «adoctrinamiento», el «dirigismo», lo «correcto», el «aborregamiento»…..¿no son el fín de las ideas? ¿del pensamiento libre? ¿de la creación?.
Pues creo que es el momento que vivimos….lo «oficial» frente al encefalograma plano.
Más fácil con las nuevas tecnologías, pero a fin de cuenta, igual.
Juan,
Hombre, el dilema entre adoctrinamiento y aborregamiento, entre lo «oficial» y el encefalograma plano, suenan suficientemente pesimistas como para tomarlso en serio, digo yo,
Q.-
¿Pesimista?…, tal vez más idealista, irreal, soñador, libertario…..
en definitiva, incrédulo.
Juan,
«Jamás entraría en un club que me aceptase como miembros..» (GM),
Q.-
Todas las cosas dan fastidio. Nadie puede decir que no se cansa el ojo de ver ni el oído de oír. Lo que fue, eso será; lo que se hizo, ese se hará. Nada nuevo hay bajo el sol. Si algo hay de que se diga: «Mira, eso sí que es nuevo», aun eso ya sucedía en los siglos que nos precedieron. (Qohelet, 1,8-10).
Joaquín,
«Sólo se mueven -dice Abel Martín- las cosas que no cambian«.
Q.-
Pesimistas estaís luego estupendos.
La única idea que forja el futuro es el mantenimiento de la propia idea frente a la contradicción y su superación: la dialéctica. Vivimos ahogados por el ¿que será? cuando no sabemos siquiera el ¿qué es? Sinceramente me parece ridículo pensar en personas sesudas, «de estudios» que hubiera dicho mi madre » pensando en ideas para mañana como si el hoy estuviera hecho.
Ya sé que no se trata de eso, pero el fondo de la cuestións si lo es. ¿Cómo pensar en un futuro sin ideas? ¿De donde saldrá lo nuevo? Pues siempre hay algo nuevo y por lo tanto irreconocible.
Una expresión castellana, maravillosa, es «no tengo ni idea» y a fuer de sincera es demoledora, porque apunta a la inacción y al futuro, a la inmovilidad y a la eternidad de la pereza.
Luis,
«Dime donde estás.
Vueltas y revueltas. Ya no puedo más.»
Los comentarios.
Q. (por la transcripción)
Bueno, las ideas se forjan sobre la marcha de los acontecimientos cambiantes. Cuando un sistema no evoluciona es porque ya ha dado todo de sí mismo, entonces queda estático o involuciona.
La clave, según esta idea, radicaría en encontrar el marco que evoluciona «sobre la marcha de los acontecimientos mudables», allí estaría el meollo del momento y allí sucederán cosas nuevas e interesantes que abocan hacia un destino incierto.
Personalmente, pienso que el meollo, el marco vivo, el «sobre la marcha» se encuentra por aqui cerca.