Este Infierno entra en una fase de turbulencias informáticas. Alojado en ordenadores controlados desde los EE.UU., he tenido la peregrina idea de repatriarlo a ordenadores controlados en tierras carpetovetónicas.
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“Yo de tí comenzaría a rezar unos cuantos padre nuestros… +:) ..” leo en un @, dándome ánimos. No se si tengo fuerza y fe para tanto, ignorando qué, como, cuando y de qué manera podrán cambiar de morada / alojamiento las 3.119 anotaciones y 11.680 comentarios publicados hasta hoy.
Juan says
Ale, ale….suerte J.P. ¿que temías? ¿un ataque ciberterrorista?¿o es más barato poner aquí la «insula»?
Pues, anda que aquí «vas apañao…» enfín, si veo un infierno caido de vez en cuando ya sé el porqué….
JP Quiñonero says
Juan,
El precio de la tierra virtual es francamente barato, aquí o allí (¿donde?). Se trata de otras minucias.
Q.-
PS. He pedido asesoría técnica a la alcaldía de Sevilla y la Junta de Andalucía, en materia de súplicas, rosarios y procesiones pidiendo agua, consejo y asesoría técnica.
Juan says
Ahí es ná…J.P. Pues ¡que Dios te coja confesado! te has dirigido a los órganos más competentes en chapuzas y otros desaguisados….aquí no se sabe lo que significa el término «técnico»….y del agua ¡ni hablar! que hay que poner muchas velas para tenerla….así que a hacer lo mismo.
Gatopardo says
Antes creía que era una paranoia mía la desconfianza respecto a los alojamientos de los monopolios; pero viendo que Flikr (yahoo) da de baja a los que ponen fotos con desnudos parciales, aunque sea de un cuadro de Rubens; que My Space da de baja las bitácoras que puedan herir la sensibilidad del público, como las que reprodujeron la foto bellísima en contraluz de una madre amamantando a su hijo, estatuas griegas, etc. y que cierren blogs porque alguien haya tocado ese botoncito que hay en blogger «reportar este sitio»…
Ojalá pueda transportar aquí, a la vieja Europa, todos sus artículos de blogspot .
Saludos cordiales
JP Quiñonero says
Gatorpardo,
Lo de «transportar» dominios / hostings y otras locuras es una operación que te deja a la intemperie de manera pavorosa: NO soy yo quien te podrá dar consejos, no.
Q.-