Rachida Dati se encuentra en el corazón de todas las tormentas pasionales y políticas que agitan las aguas pobladas de tiburones por donde Nicolas Sarkozy intenta llevar a buen puerto su proyecto de ruptura con veintitantos años de inmovilismo de izquierdas (Mitterrand) y derechas (Chirac).
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AFP, RC, una carrera política a la sombre de Nicolas Sarkozy
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Hija de un padre albañil pobre, marroquí, inmigrante, y una madre de otros diez hermanos, Rachida Dati es la primera hija de inmigrantes que llega a la cúspide del Estado, tras una carrera fulgurante, que tuvo valedores de excepción, como Simone Veil (la primera presidenta del primer Parlamento europeo elegido a través del sufragio universal).
Comenzó a pagarse sus estudios trabajando como vendedora a domicilio y enfermera, antes de comenzar a tener algunos modestos diplomas de contabilidad y gestión, que culminaron con un diploma jurídico conseguido sin gloria: en una promoción de 154 alumnos, en la Escuela de la Magistratura, se clasificó en el puesto 116.
HERMANOS DROGATAS
Sin embargo, su simpatía, su determinación, incluso su belleza y capacidad de trabajo (sin grandes estudios, pero con muchos diplomas), le permitieron entrar en numerosos gabinetes empresariales (Matra) y bancarios (Berd), apoyada al más alto nivel jerárquico. Antes de comenzar a trabajar para Nicolas Sarkozy, como asesora para asuntos de inmigración, el 2002, Rachida Dati ya había pagado su última deuda con la herencia familiar: un matrimonio impuesto por sus padres (1992), que ella rompió dos años después, para ganar una libertad que continúa preservando con pudor extremo, sin que su vida familiar hayan perdido, para ella, una temible importancia.
En el terreno familiar, dos de sus hermanos fueron detenidos, inculpados y encarcelados siendo ella ministra de justicia. En el terreno político, la carrera de Rachida Dati es indisociable de las intimidades más íntimas de todas las mujeres que han rodeado a Sarkozy durante la última década, comenzando por Cecilia Ciganer ex Sarkozy.
Cecilia llegó a decir de Rachida: “Es algo más que un amiga, es una hermana, para mí”. Intimidad temible, cuando la pareja Sarkozy – Cecilia entró en crisis y Rachida hablaba a diario de las más íntimas intimidades con Cecilia y con Sarkozy. Esa intimidad ya le había valido a Rachida ser catapultada al cargo noble de ministra de justicia, una de las máximas autoridades en la jerarquía del Estado.
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RD y CB, besos en la intimidad
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CARLA, RACHIDA Y EL LECHO DE SARKOZY
Como ministra de justicia, desde la llegada al poder de Nicolas Sarkozy, Rachida Dati es, al mismo tiempo, un símbolo, un desafío y un ejemplo de intimidad. Símbolo de la nueva Francia capaz de integrar a sus inmigrantes. Desafío, el de una joven sin experiencia, al frente de un ministerio capital. Modelo de intimidad: nadie como ella ha conocido los íntimos pasillos por donde Sarkozy ha deambulado con predadores objetivos políticos y carnales.
Esa intimidad le dio a Rachida Dati una fuerza temible, durante los primeros meses de la presidencia Sarkozy. Ella fue la mujer más influyente en el presidente, después de su esposa. Rota la pareja Sarkozy – Cecilia, el presidente encontró muy pronto otros brazos donde buscar consuelo. Pero en el nuevo lecho amoroso del presidente se tramaron nuevas relaciones de fuerza.
Rachida Dati y Carla Bruni se conocieron en el Elíseo, las Navidades del 2007, cuando la actual esposa del presidente solo era su amante. Paseando juntas por las habitaciones privadas de la residencia del jefe del Estado, la pareja se detuvo ante el lecho del dormitorio presidencial. Con cierta sorna, sonriendo, ¿en broma?, Carla Bruni le habría dicho a Rachida: “A ti no te hubiera importado meterte en esa cama, ¿eh..?”.
A partir de ahí, no es un secreto que Carla Bruni se ha convertido en un personaje de Estado. Su influencia sobre Sarkozy, en el lecho y fuera del lecho, es motivo de incontables análisis. Rachida Dati, por el contrario, ha perdido influencia. Antes de la boda, la ministra de la justicia se tomó la libertad de llamar a Sarkozy a su teléfono personal, antes de las nueve de la mañana. Pero fue Carla quien respondió: “Querida, el presidente está a punto de casarse. No debes volver a llamarlo a estas horas”.
PERSEGUIDA POR LOS PASILLOS
Conocidas y contadas por lo menudo, en las cenas del París político y periodístico, anécdotas de ese tipo han terminado por erosionar la credibilidad personal de la ministra de justicia, víctima de ataques brutales de la oposición socialista (lo que es normal) y algunos embozados espadachines de la mayoría conservadora.
Rachida Dati impuso a paso de carga sus primeras reformas judiciales. Tras la llegada de Carla Bruni al Elíseo, la ministra de justicia debe batallar con rudeza para defender sus posiciones. Ganó a campo abierto la alcaldía del distrito VII de París en las últimas elecciones municipales. Pero Sarkozy se ha visto forzado a salir en su defensa en varias y agrias disputas internas, entre su guardia pretoriana y los mosqueteros de la mayoría parlamentaria.
Símbolo de la nueva Francia, acosada, quizá perseguida por los más oscuros pasillos del poder, Rachida Dati continúa siendo una figura intocable. Su caída en pública desgracia minaría uno de los pilares del sarkozysmo. Sin embargo, su gusto personal por el lujo, la alta costura, la intimidad bien guardada de su vida sentimental, de mujer más madura de lo aparente (cumplirá 44 años el mes de noviembre próximo), la convierten en un blanco ideal de todas las insidias y bajas maniobras de corte.
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L’Express 5 al 12 junio 08. Un 54 % de franceses dicen no desear que RD tenga mayor influencia en la vida política nacional.
Joaquín says
El caso de Rachida Dati es admirable. También lo es la progresión de otra mujer, negra, Condoleezza Rice. Nada que ver con la cooptación partidista (y no es por señalar…).
Saludos,
J.
JP Quiñonero says
Joaquín,
Qué Dios las ampare… los hombres amenazan con perseguirlas con saña, me temo.
Q.-
Emmaskarada says
Es una mujer muy bella, la primera vez que la vi me llamaron la atencion sus dos ojos negros duros y brillantes como dos pedernales. Me dije, quien es esa belleza de mujer? Ahora ya se quien es Rachida. No es ninguna mosquita muerta, no. Pero que no la pueda, ay! Ese miedo atavico, el de las mujeres, el de estar solas, el de no seducir ya mas, que no la pueda su obligacion para con el hombre, como Condoleeza. Dadme una mujer libre. Una sola y creere.
GarCelan says
¿La guerra política con las armas de Eros o la guerra de Eros con las armas de un Ares tan poco aguerrido como político? Entre Heras, Hestias, Zeus, Afroditas y los Hermes correveidiles, la residencia del Presidente parece encontrarse a medio camino entre el Olimpo y el mismo Elíseo, regido -eso sí- por un Cronos insobornable, y a un paso tanto del Empíreo como del Averno.
JP Quiñonero says
Emmaskarada, GarCelan,
… Emmaskarada,
«… una mujer libre.» Bueno… la libertad es algo muy dificil de conseguir y preservar. La política quizá no sea el terreno ideal para ejercer ninguna libertad, bien al contrario, hélas.
… GarCelan,
Muy fino ne lo pones. Algo de todo eso hay, pero con una cierta brutalidad sofocada/maquillada por la cultura y los buenos modales de corte,
Q.-