El presidente José Montilla, o el autor de su último discurso, ha desenterrado quizá involuntariamente uno de los perversos principios filosóficos donde se fundan las mafias filantrópicas.
[ .. ]
Más allá de debate político de fondo sobre la financiación de Cataluña y las disputas entre PSC, PSOE, Tripartito, etc., la denuncia de unos “privilegios disfrazados de solidaridad” plantea, quizá sin saberlo, un principio maléfico de sabotaje y destrucción de la moral cívica, tema central de los Anales de Caína y Una primavera atroz.
Querido Q.-
Dice el dicho que no hay peor cuña que la de la misma madera. No creo que el amanuense haya hecho otra cosa que su labor milenaria, copiar al dictado o recoger lo que el ambiente le sugiere sin añadir demasiado de cosecha propia. No fuesen a cortarle la mano.
¿Moral cívica? À quoi faire?
Abrazos
À.-
Querido À.,
Lo del amanuense idiota contando involuntariamente una incomprensible historia de ruido de furia que él mismo no entiende me parece francamente potable.
Sobre la moral cívica…
Haciendo a vuelapluma una lectura leostraussiana de la cosa… a mi modo de ver, solo una cierta claridad, lo más alta posible, sobre los viejos principios de lo bueno, lo bello y lo justo permite echar raíces a una moral cívica sólida. Cuando esos principios entran en crisis, o algo mucho peor, la antigua moral cívica deja paso a algo endemoniado que vampiriza las conciencias… los privilegios disfrazados de solidaridad, evocados por el presidente, iluminan con diáfana nitidez, a mi modo de ver, el proceso en curso de destrucción de las conciencias más frágiles e indefensas. Proceso que comenzó…
Q.-
La respuesta de la presidenta de la Vega el mismo día al presidente Montilla permite comprender muy claro lo que dices, Q: ninguna referencia concreta, tan sólo amenazas: la llamada del superego del estado…
Mercè,
No había caído… pero, efecto, la presidenta en funciones habla por la Voz de la Ley, el Orden, el Estado, escondiendo apenas un amago de estacazo…
Q.-
«… privilegios disfrazados de solidaridad..«
De la Vega está dando una performance lamentable: excesos verbales de Montilla? Es una contradicción en términos, un oximoron si se prefiere… Pasiones malentendidas, dice hoy, sin mentar, claro, a qué se refiere…, aunque en la tele la sacan después de declaraciones del conseller Castells, que sí habla de hechos y puede por tanto permitirse interpretaciones y así nosotros podemos juzgarlas… Pasiones malentendidas Castells? Vaya otro chiste…
Me sigue sorprendiendo la ingenuidad de tanta gente. Todo esto no es más que un sainete en el que el PSC gana haciendo que defiende los «intereses» de Cataluña y el PSOE gana haciendo como que defiende los intereses de España. Lo curioso son los intentos de racionalizar la pantomima que muchos siguen haciendo. Desde 2004 España vive una zarzuela. Los asuntos importantes se tratan bajo cuerda. Lo demás es ruido distractor.
Mercè, Emilio,
… Mercè,
Vengo de una cena con notables de sensibilidad socialista… están convencidos que Montilla terminará «bajándose los pantalones» y aceptar lo que la presidenta y su presidente terminen imponiendo…
… Emilio,
Don Ramón temía que la zarzuela española se llamase esperpento: género algo anterior al 2004,
Q.-
Sin duda, Q, puede pasar lo que dicen los notables (en qué? por cierto…), por lo que lo de excesos verbales y lo de pasiones malentendidas se me antoja aún más chusco… estoy hablando, claro, de los pequeños nerones, de la pequeña nerona en este caso, que lanza sus dardos como si no se le entendiera todo… Chistes amenazantes que al doctor Freud le encantarían… Esto no es puro teatro, es algo mucho menos decente… una representación asqueante… incluso los personajes secundarios, sin los cuales nada puede existir… adquieren una cierta nobleza actoral, lo que es mucho en estos tiempos goyescos de disparates, caprichos y riñas de gatos… Tiempo al tiempo, que en este caso será pronto, y algo vamos a ver… Ah, las cosas que hemos visto… decía el viejo Falstaff… y no puedo apartar los ojos de Georgia y Osetia… las cosas que estamos viendo, las que vamos a ver… Por lo que mejor hablar claro, me parece a mí… Los notables (en qué?, por cierto) suelen ser perezosos mentales y panxacontents de mucho cuidado…
Mercè,
«Notables»… cosa de mi afrancesamiento absoluto: notables… «personas principales en una localidad o colectividad..«.
Por lo demás, recurro a WB: «El progreso, eterno retorno de la catástrofe..«. La señora presidenta hablar con una virilidad vaticanista de la mejor escuela, en efecto. Ya veremos en qué queda la virilidad verbal de los notables políticos catalanes.
Q.-
A eso me refería, caro Q, «principales» en qué? Por supuesto, es una pregunta retórica…
Meine liebe Mercè,
Un juez, un abogado, dos universitarios…
Q.-
Cierto, pero este regreso al esperpento más chusco no estaba en el horizonte inmediato hasta 2004.
Usted tendrá mejores fuentes de información que yo, pero hasta donde yo sé (o me cuentan) estamos viviendo una separación prácticamente total entre la realidad y el teatrillo. Por eso me sorpernde que algunos le den tanta cancha al teatrillo, siendo que las cosas se están decidiendo en otras instancias. ¿Que siempre ha sido así? No digo que no. No hablo de la realidad sino de quienen la comentan con una ingenuidad que provoca compasión.
Emilio,
Hombre…
Un director general de la guardia civil enriqueciéndose con el dinero de la construcción de cuarteles…
Señorines comprando joyas y bisuteria a sus señoronas con el dinero de las horas extras mejor pagadas por matar terroristas o presuntos terroristas, enterrados en cal viva…
Doctores en moral pública cogidos con ropita de chacha, falos de caucho y el culo al aire pegando en el culo de inmigrantes de color…
Un ministro del interior que se sirve de sus servicios de escuchas ilegales para acusar a un periodista de «chorrear aceite por la culata«… me parecen cosas esperpénticas un poco anteriores al 2004…
Q.-
Caray, Emilio, parece compartir usted la retórica de De la Vega, pues tampoco leo en sus comentarios ningún hecho concreto, ni siquiera inconcreto…