Cae la tarde. Cuatro generaciones se cruzan en un semáforo.
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Quede constancia de mi gratitud, señoras.
Bulevar St.-Germain, 6 marzo 09. Foto JPQ.
- Fotografía en este Infierno.
Cae la tarde. Cuatro generaciones se cruzan en un semáforo.
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Quede constancia de mi gratitud, señoras.
Bulevar St.-Germain, 6 marzo 09. Foto JPQ.
Una delicia de Madame, Mr Q. que ternura digna…
Mme Marie,
Me ilusiona que sea visible la ternura, si,
Q.-
Querido Juan Pedro:
¿Y en medio? ¿Entre todas las mujeres?
Te estás convirtiendo en un fotógrafo del incosciente, tal vez malgré toi. Las casualidades en tus imágenes están poco explotadas como argumento. A veces son absolutamente explícitas como en este caso; otras, como en el retrato de la joven que lee sus papeles en un bar, son de tal sutileza que acaban por pasar desapercibidas.
Hoy no. El objeto de los objetos: Bendito entre las mujeres.
Estas segundas lecturas, que traen causa de la rapidez, de la instantánea, añaden interés al resultado. Al menos para mí. No son cuatro generaciones de mujeres. Son cuatro generaciones y un tótem aldederor del que se detienen antes de cruzar al otro lado.
Buen fin de semana.
p.d.En relación con esto, soñé anteayer algo de lo que dejaré rastro en mi blog en un par de días.
Querido Miguel,
¡Me abrumas…!
En verdad, en mi caso, las instantáneas callejeras quizá son un poco menos instantáneas de lo que pudiera parecer. Pero, bueno, sería largo y quizá innecesario meternos en la “cocina” de la cosa. Sin olvidar que el control más o menos relativo de la técnica también tiene su parte. No poca parte. El azar, por último, añade misteriosas relaciones ante los ojos no siempre atónitos y ciegos del cazador furtivo, claro,
Mi fascinación por las acuarelas de Passy viene de lejos. Baste un solo ejemplo, Sansboeuf, si,
Q.-