“¿Nadie protesta ni se ha tirado a la calle, tras tantos años de crisis..?”, me preguntan una y otra vez amistades y colegas.
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Honradamente, no se qué contestar.
Miro las estadísticas del día. Tan catastróficas como siempre:
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Nueva cota histórica del paro:
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LaVanguardia,3noviembre2011.
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Peligrosa caída de los afiliados a la Seguridad social:
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ABC, 3 noviembre 2011.
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Años y años de paro y pobreza creciente, Españoles, más pobres que ayer, pero menos que mañana, 2.
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ElPaís, 3 diciembre 2011.
Un paro / desempleo tres veces más alto que la zona euro…
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EuroStats, octubre 2011.
Catástrofe colectiva que viene de muy lejos. Años y años de sonambulismo, España / OCDE: diez años de estado de crisis, 2.
¿Arderá España mañana? La tradición castiza tiene soluciones que Berlanga resumía de manera canónica: “Ponga a un pobre en su mesa”.
Quizá haya otras razones más o menos razonables que pudieran explicar la realidad de una España que no “arde”, con millones de hogares ardiendo de incertidumbre.
Enumero esas razones, que no son mías:
1. Dimensión de la economía sumergida.
2. Protección familiar.
3.Tipos de interés bajos.
4. Generoso sistema asistencial y amplio estado del bienestar.
5. Deflación de precios.
6. Globalización y virtualización.
7. Falta de legitimidad de quien pudiera alentar a las «masas»… S. McCoy razona de este modo esas Siete razones por las que no arde la calle en España.
Son bastantes, los que aprovechando la festividad de la Inmaculada y la Constitución, harán de la próxima semana, -no un puente, si no un acueducto-.
Economía sumergida y fraude fiscal distorsionan la realidad…….
Cielo despejado y temperatura algo fresca en el Baix Llobregat.
J. Moreno,
Dichosos los que tienen alguna chapuza sumergida, oye,
Q.-
Te dejas lo más importante: la ausencia generalizada de principios y valores, en especial entre quienes más sufren la crisis. Unido al ancestral egoísmo español nos da pasividad generalizada.
Con la que ha caído, siete millones de españoles han votado al PSOE de Zapatero, Rubalcaba, Chacón y otros. Sólo cuatro de los once que les votaron en el 2008 se han abstenido (la mayoría) o votado a otros.
Si nos fijamos en comunidades peperas como la valenciana o la murciana, el apoyo incondicional al PP es deprimente por lo que significa de no castigo a la corrupción.
Con una población desnortada y cada año más inculta gracias al desastroso sistema educativo español (universitario incluido), nada bueno puede esperarse en muchos años.
Cada vez tengo más claro que este periodo entrará en los libros de historia españoles y mundiales, y será conocido como la Segunda Gran Depresión -lo peor está por venir, y será durísimo.
Así que, ¡arrepentíos pecadores!
Citando lo que citas:
Lo primero no sé si es una ironía que no capto; lo segundo, que es una contradictio in terminis del propio argumento, creo que es eso que por aquí tenéis por costumbre llamar «ideología». Puro raciocinio ad verecundiam. Parafraseando a tu castizo, «porque yo lo valgo». Yo resumo con un «ah», encomendándonos a Santa Lucía, protectora de invidentes.
Me tomo la libertad de comentar aquí, ya que lo enlazas y lo retomas, porque el foro de comentarios de esa nota del sr. McCoy es como un guirigay, pero sin el como.
Maty, Jesús…
Maty,
Anda, anda.
Jesús,
A mi modo de ver… la familia es la DEFENSA más real contra la crisis. Se me ocurren muchos casos concretos. Hélas… no creo que haya una «familia española»… creo que hay familias vascas, andaluzas, catalanas, murcianas, etcétera. Y, en cada caso, el modelo económico imperante temo que sea igualmente diferente. Sería muy largo entrar en el detalle.
En el País Vasco o Cataluña… la familia coincide con un tejido de pequeñas empresas bastante dinámicas, lo que permite… trabajar un poco, cobrar el paro otro poco, y vivir en el mismo piso de padres o abuelos. En el País Vasco, no se me olvida el pequeño pedazo de tierra familiar…
Todo eso no existen en Andalucia, por ejemplo, donde no hay tejido industrial comparable… elevando la tentación de vivir muchos meses del paro, a palo seco.
En Madrid y las grandes ciudades, el piso de padres y abuelos se ha transformado en «comuna» familiar.
Las «cuotas de fraude»… son una realidad que comienza por el Estado, que se toma más de un año para fagar facturas acordadas a sesenta días. Ese fraude estatal causa estragos.
La de jubilatas que curran, parados que curran a bajo precio y mujeres explotadas es cosa incontable…
Quizá todo eso, tan sumariamente resumido, «amortigue» la crisis, agravada por otra evidencia: hay regiones o comunidades o como se llamen que tiene un modelo económico más o menos «histórico»… hay otras sin modelo económico conocido…
Q.-
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