LeMonde, 15/16 diciembre 2011. Euro: les marchés en croient pas aux promesses.

¿Puede confiarse en alguien que pide prestados 800.000 millones de euros, sin saber cuales serán sus ingresos durante los próximos años..?

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Esa es la pregunta que se hacen los inversores internacionales, ante el comportamiento esquizofrénico de los dirigentes europeos:

-Prometen un nuevo Tratado europeo que debiera imponer el saneamiento, la austeridad y el recorte de las deudas más gigantescas de la historia de nuestra civilización.

-Esa promesa está muy escalonada / aplazada en el tiempo, cuando ya sabemos que los mismos Estados (Alemania, Francia, Italia, España, toda la zona euro) necesitarán otros 800.000 millones de euros, que deberán pedir prestados (en obligaciones a corto y largo plazo) los próximos meses a unos inversores internacionales que pedirán intereses más caros por conceder sus préstamos.

-El pago de esas deudas reclamará muchos años de sangre, sudor y lágrimas, cuando las perspectivas económicas son muy precarias: la OCDE y otras grandes instituciones anunciaron hace días una larga década de bajo crecimiento, paro y pobreza de masas, Europa, por el sendero de la decadencia.

La moneda común de la Europa de la zona euro quizá se salve: la terapia alemana de su salvación tiene un costo social que se cuenta en años y años de austeridad, más trabajo, más paro y una incertidumbre que nos devora las entrañas.

• Europa y el euro, hipotecados a las deudas, promesas e irresponsabilidad de los Estados europeos.
• Europa ha quedado hipotecada a las hipotecas francesas.
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• Europa (s) y UE en este Infierno.