Leonardo DiCaprio / J. Edgar Hoover. Paralelo entre la estética del orden y la estética del gánster glosada por Hollywood.
“… nuestro país reposaba en la libertad de los individuos y el triunfo del amor sobre el mal…”
[ .. ]
Cito y traduzco de memoria al guionista / narrador de J. Edgar, la película de Clint Eastwood: una parábola de la destrucción de los EE.UU. a través de la corrupción, persecución y destrucción final de todos sus valores fundacionales.
¿La patria? ¿El hogar? ¿La casa común de un pueblo..? Destruida, saqueada, a manos de los pistoleros del orden, persiguiendo, encarcelando y / o expulsando a quienes tienen otras convicciones sobre la misma patria común. No hace falta ser un lince para recordar al morisco de Cervantes.
¿Los individuos..? Números y fichas policiales, controlados por la mafia policial que controla el Estado. J. Edgar Hoover comenzó “ordenando” la Biblioteca del Congreso. Y pensaba que sus servicios policiales debían tener una ficha semejante de todos los seres humanos. “El Estado es mío…” Ambición que le permitió chantajear a varios presidentes de los EE.UU.
¿El amor..? Inconfesable, sofocado, perseguido, torturado, maquillado. A la mujer joven no le interesan el amor ni el matrimonio: prefiere trepar en una organización policial. El homosexual (Hoover) es rechazado por su madre, persigue a otros homosexuales, se sirve de su amante como herramienta y tapadera, conociendo del amor, apenas, sus arrabales más bajos, miserables y fúnebres…
¿Qué queda de un hogar, una patria, tras las ruina de todos sus valores..? La Ley de la Selva: los mafiosos de Nixon profanando los despojos de un cadáver. Los lectores de Quevedo apreciarán la parábola.
Basta con abrir la prensa de la mañana para imaginar qué podría ser una película española de ese tipo, con personajes españoles, tratados con el rigor ético y estético del J. Edgar de Clint Eastwood.
- Clint Eastwood, el amor, los vivos y los muertos.
- Clint Eastwood, Haití y nuestras guerras civiles.
- Clint Eastwood y el arte de morir.
- Clint Eastwood y nuestra(s) crisis.
- Clint Eastwood y la educación de la juventud.
- Clint Eastwood, en Iwo Jima, contra la guerra de Irak.
- Volverás a Iwo Jima, pero nunca llegarás a nada.
- Caína / Iwo Jima: distintas maneras de morir.
- Cine en este Infierno.
Irene says
Bueno, precisamente… En los diarios que veo cada mañana, El País y La Vanguardia, los analistas callan y no «entierran» a Manuel Fraga Iribarne. Sólo hablan de él los suyos. ¿A qué esperan los analistas? ¿Saber qué hay que decir? Tal estado de shock me tiene perpleja. Incluso aquí.
Laura says
He leido que Fraga -«La calle es mia»- fue uno de los fundadores del diario El Pais, cuando tenia como confidente a Juan Luis Cebrian.
Irene says
Matizo, ahora que he entrado en la edición impresa del País, algunos escriben, sí.
JP Quiñonero says
Laura, Irene…
Laura,
Creo que has leído bien.
Irene,
«¡La calle es mía..!»
Q.-