En primera lectura, la pareja Rajoy / Mas parece practicar el diálogo de sordos:
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ABC, Rajoy: “El 9-N es un profundo fracaso del proyecto independentista”.
El País, Rajoy califica el 9-N de “fracaso” y no prevé ningún plan para Cataluña.
El Periódico, Lapsus de Rajoy: «En Catalunya hay más catalanes que independentistas”.
La Vanguardia, Rajoy rechaza dialogar la «imposición» del referéndum y emplaza a Mas a cambiar la Constitución.
En segunda lectura, tras la gesticulación verbal, sospecho que Artur Mas no desea dejar todo el terreno libre a Oriol Junqueras y Mariano Rajoy sopesa el riesgo de dar cancha a Pedro Sánchez.
Garrotazos, si. Pero temporalmente “controlados”. ¿Hasta cuando?
Quizá la Fiscalía pudiera devolver al duelo a garrotazos su primera naturaleza esperpéntica: la persecución judicial de Artur Mas por incontables delitos pudiera devolver a la prensa internacional carnaza con mucho y atractivo color.
Y los interrogatorios de Mas, en una comisaría, escoltado por dos guardia civiles, podrían ser motivo de grandes fotografías para las primeras páginas de la gran prensa internacional. Si los indepes tienen un topo bien situado en la Fiscalía podrán ganar con su ayuda los votos que faltaron en el 9–N.
Rajoy y Mas, entre el cuento chino y el duelo a garrotazos.
El 9-N catalán, desde dentro.
Rajoy, Mas, Soraya, Cataluña… entre Navarra y el Duelo a garrotazos.
Mariano Rajoy puede favorecer a los partidarios de la independencia de Cataluña.
Conservadores catalanes y electores del PP que participan en el 9-N.
Buen o mal uso del 9-N catalán.
Primeros balances internacionales del 9-N catalán.
“¿Está España inflando el soufflé Catalán?”
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