Última fotografía de Antonio Machado, hacia el 27 de enero de 1939. La fotografía fue obtenida, al parecer, por Corpus Barga durante el paso por la frontera de Portbou.

Ensayo indispensable…

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Últimos días en Collioure, 1939. Y otros estudios sobre Antonio Machado (Editorial Renacimiento), de Jacques Issorel.

Entre la inmensa y muy noble bibliografía machadiana, casi todo está dicho (sobre) el último don Antonio. Jacques Issorel ha tenido la magnífica idea de compilar en un ensayo los recuerdos íntimos de Corpus Barga -protagonista capital, figura excepcional-, Jacques Baills, Juliette Figuères, José Machado y Matea Monedero de Machado, hermano, cuñada y testigos del fin.

Quizá los especialistas no descubran detalles capitales. Poco importa. Se trata de un resumen / balance, sencillo y bello, de unas jornadas capitales en la historia trágica de España y el destierro de los españoles.

De ahí, a mi modo de ver, el carácter sencillamente indispensable de este bello libro, que tiene otros ensayos de noble enjundia, relacionados con Antonio Machado y su obra.

Don Antonio tiene un puesto esencial en mi vida y en mi obra:

“… se escapaba hasta Collioure en busca de unas botellas de vino de la tierra; y volvía trayendo las noticias que corrían por los bares del paseo marítimo -frente a la bahía- y la clientela del Hôtel Miramar, frente al antiguo cementerio, que había sido el destino último de algunos viajeros que nunca volvieron a su patria, abandonados por la marea negra de la historia en aquella playa desierta, donde ellos verían por última vez el azul de la infancia, a las puertas de la oscuridad impenetrable de la vida eterna…” Dark Lady.

Dark Lady, la guerra civil, el maquis y don Antonio Machado.

Antonio Machado, Collioure y la infame turba de los muertos condenados a destierro eterno.

Collioure, Antonio Machado, Matisse, Derain y el arte que vendrá.

El hotel de don Antonio Machado.
París. El hospital de Leonor y Antonio Machado.

“Aquella noche, Django interpretaba Nuages y Georgia on My Mind, tú recordabas a Cavafis y yo a don Antonio, en Collioure…”.