La riña en la Venta Nueva, 1777. Óleo sobre lienzo, 275 x 414 cm.
La nueva política se oficia en la Venta Nueva goyesca. En esa taberna audiovisual se calientan los cascos con ideas muertas y basura ideológica, decía.
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En la vieja taberna de la corte de los milagros del ruedo ibérico, el odio se bebía en cucuruchos de papel de periódico.
En la Venta Nueva audiovisual, los copazos de bilis, odio y basura alternan con pan de molde tóxico untado con sarama patriótica.
ABC, Sánchez, Iglesias y Rivera regalan el debate a Rajoy.
ara, Els atacs de Sánchez i Rivera reforcen Rajoy i Iglesias com a opcions.
El País, Y Mariano se fue vivo.
La Vanguardia, Rajoy granítico, Sánchez opositor, Rivera incisivo, Iglesias calmado.
“España cañí”. “Genio y figura, hasta la sepultura”.
Espectáculo castizo, entre el sainete y el esperpento:
La riña Rajoy, Sánchez, Iglesias y Rivera, pintada por Goya y contada por Galdós.
Rajoy, Sánchez, Iglesias y Rivera, entre El carro del heno y El Hotel del Cisne.
Vi una parte del debate, las dos primeros temas. Aburridos hasta la saciedad. Solo se calentaron cuando hablaron de corrupcion, la de los demas por supuesto.
Empate tecnico, sin ideas y con discusoss sonsabidos. Como decia Felipe Bentez Reyes voy a votar a los 4.
Paris esta en plena degradacion. Las noticias sobre Paris VI y VII son desalentadoras. Eran el buque insignia de la sanidad e investigacion medica en los 80 en Francia, con años luz de las catacumbas franquistas, que es de donde yo salia en esa epoca.
Saludos
Txema,
Sospecho que llevas toda la razón del mundo, claro.
Lo de París… una lenta erosión que todo lo consume. La huelga de basureros ha puesto notas de color y perfumes a una realidad anterior y temo que posterior, ay.
Veremos.
Avanti..!
Q.-
Anoche, tanta era la insistencia general -y mayor la de los amigos- que seguí el «histórico» debate en el ordenador, para apagarlo, decepcionado.¡Tonto de mí, que esperaba más de los «padres de la patria»! Y solo escuchaba las culpas atribuidas a los otros, el despliegue de una cifras ciertas pero manipuladas en cuanto a su significado, un amago de pactos menesterosos y obligados, y la facundia de la tribuna convertida en labia de tertulia de concilio de vecinos.
Ricardo,
Por este barrio, el lenguaje poético se queda una miqueta corto. Temo que la canalla política necesita de un verbo más crudo y esperpéntico, pero, bueno, la cosa queda dicha con generosidad, que es un «defecto» muy venial, claro,
Q.-