Rue Sainte-Anne / Petits-Champs, 30 octubre 2019. Foto JPQ.
París mestizo, work in progress.
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París japonés, Little Tokyo-sur-Seine 2.
Esquina que tiene su importancia en la historia de la novela negra parisina…
Léo Malet vendía Le Libertaire en la acera de enfrente, al final de los años treinta del siglo pasado → Léo Malet, una leyenda inolvidable → Léo Malet, ángel de la historia.
París japonés, Little Tokyo-sur-Seine.
En el downtown de Los Angeles, Little Tokyo tiene más de cien años de historia y es una de las grandes ciudades japonesas de los EE. UU., una de las más grandes de la diáspora.
El París japonés, Little Tokyo-sur-Seine, tiene una historia mucho más reciente y se articula en torno a la rue Sainte-Anne, que fue durante buena parte del siglo XX una cita obligada de la prostitución masculina.
Desaparecidos o transformados antiguos clubs de la más promiscua vida nocturna (no solo gay, trans, etcétera), como el Club Sept, Le Bronx, Le Colony, los restaurantes, panaderías y comercios japoneses comenzaron a dar a la rue Sainte-Anne una nueva vida, que sigue su curso.
Al final de los años 30 del siglo pasado, Léo Malet vendía Le Libertaire en la esquina de Sainte-Anne y Petits-Champs, donde hoy se encuentra Dosanko – Larmen, un restaurante muy popular, a dos pasos del club especializado en el “intercambio de parejas” frecuentado por Dominique Strauss-Kahn, cuando era el socialista más popular e influyente de Francia, poco antes antes de ser nombrado presidente del FMI. Antro que pudieron frecuentar, años antes, dos viejos amigos, Jean-Louis Arnaud y Feliciano Fidalgo, por muy distintas razones. Detalles que tienen su importancia en una de mis novelas, Dark Lady.
Dark Lady y las modelos japonesas.
Las turistas japonesas y Dark Lady, en Saint-Germain.
Chica japonesa… Homenaje a Edwin Blumenfeld.
Las chicas japonesas y la geografía del pop parisino.
Dark Lady y las modelos japonesas.
Dos amigas japonesas, en Odeón.
Moda asiática en el París de Proust y Odette de Crécy, rue Royale.
Parisina degustado sushis japoneses, rue de Seine.
La fotógrafa japonesa y su modelo, en Étoile.
París, la rentrée… Vendedoras chinas para vender lujo francés.
Feministas asiáticas por un “sindicato del trabajo sexual”.
París, la rentrée… París mestizo / asiático.
Chica japonesa, en Saint-Sulpice, París.
París, la rentrée… Turista japonesa, muy parisina.
La joven japonesa y la copa de vino tinto.
La joven japonesa del happening de Carod-Rovira.
La yakuza japonesa y la triada china han ampliado lo que segun algunos sociologos llaman las democracias mafiosas. Tokio tiene casi cuarenta millones de habitantes no digamos las ciudades chinas. Asia esta en el mundo y puede competir blanquea capitales trafico de blancas amarillas y blancos amarillos bueno a lo que se dedican las mafias Los barrios de chinos y japoneses estan en la mayor parte de todas las ciudades y ofrecen todo lo que se pueda vender y comprar llegaron tarde pero arrasan en el mercado. Pobre eurocentrismo necesita un nuevo copernico que le abra los ojos. La ola avanza bello cuadro japones que se impone desde hace decadas por europa. De Paris a Barcelona lo pequeño se engandece y aqui la ola es un sunami democratico que no inspira novelas negras sino amarillas y mangas de todo tipo. Aqui en Barcelona estan las mafias mundiales con sus modas sus vicios sus lujos sus pistoleros sus empresarios su opio… pero dominan o dominaran los yakuzas y las triadas Paris queda pequeño frente a la futura peninsula iberica asiatica. Primero el chino mandarin y despues el castellano como lenguas maternas despues las demas. Como se llaman nuestras mafias. Sin mafias no hay futuro. Lo legal no puede existir sin lo ilegal o alegal. El arte y la vida llega con los diferentes encuentros. Barcelona japonesa y china…por fin estamos en el mundo.
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José,
Pues vaya usted a saber…
Al día de hoy, las mafias japonesas y chinas no son muy visibles en París. Chinatown & Littel Tokio-sur-Seine se apoyan en el pequeño comercio, comenzado por la inmigración / boat people (en el caso chino / vietnamita) o por la inmigración comercial (jóvenes cuadros, en el caso japonés)… ¿Vendrán luego las mafias? Vaya usted a saber,
Q.-
¡Ay, Josep!
Gracias a Google me enteré de que la yakuza y la triada son organizaciones criminales…
¡Vaya futuro que expones para la península ibérica!, ¡Dios nos coja confesados!
Con tantos desencuentros, me pregunto cómo subsistirá el arte y la vida…
Bona nit!