Place de la République, 13 junio 2020. Assa Traoré enardeciendo a los manifestantes. Foto Benjamin Girette / Le Monde.

“Decíamos ayer…” → Francia : archipiélago multicultural conflictivo.

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En esas estamos…

En París, la manifestación de unas 15.000 personas contra el racismo y las violencias policiales se convirtió el sábado en una batalla campal antes de comenzar, para prolongarse durante cinco horas cortas con violencias antagónicas: racismos anti racistas de extrema izquierda y extrema derecha; “antifas” violentos contra fuerzas anti disturbios; organizadores “prohibiendo” a las organizaciones anti racistas tradicionales.

La manifestación había sido convocada por el Comité Adama Traoré a las 14.30, en la Place de la République, en el corazón histórico de París, desde donde los manifestantes pensaban dirigirse a la Place de l’Opéra, recorriendo los Grands Boulevards…

El Comité había comenzado por rechazar la participación oficial de SOS Racisme, la más antigua y respetada de las organizaciones anti racistas francesas, cuyas protestas y participación en la campaña “Black Lives Matter” (Las vidas de los negros cuentan), son consideradas como “moderadas”.

El Comité Adama Traoré tampoco consideró necesario pedir permiso a las autoridades. Poco antes de las 14.30, las unidades antidisturbios acordonaron la Place de la République, donde terminaría reuniéndose unos 15.000 manifestantes, según fuentes policiales.

La Prefectura de París hizo saber que las fuerzas del orden podían aceptar una “manifestación estática”, en la plaza. Pero, cumpliendo con las consignas sanitarias en vigor, no podría tolerarse una manifestación callejera.

El Comité Adama Traoré hizo caso omiso de la advertencia policial y decidió continuar con el proyecto de manifestación.

Los anti disturbios dejaron que los manifestantes iniciaran la marcha, hasta la rue Turbigo, donde las fuerzas del orden decidieron dispersar el proyecto de manifestación, con cargas de gases lacrimógenos.

Ante las cargas muy expeditivas de los anti disturbios, los manifestantes comenzaron a dispersarse por el barrio, a la espera de consignas.

La Prefectura hizo saber que era posible entrar y salir de la Place de la République, pero subrayando que estaba prohibida toda manifestación “móvil”. El Comité aceptó transformar la manifestación callejera en un “sit in” (sentada), en la. Comenzaba una larga tarde de crisis y tensión, con una sucesión de enfrentamientos callejeros pronto sofocados por los anti disturbios.

A la misma hora que estallaban los enfrentamientos en la Place de la République, varios grupúsculos de extrema derecha radical se manifestaron en las inmediaciones desplegando banderas que decían “White Lives Matter”, en respuesta al eslogan norteamericano de “Black Lives Matter”.

Se trata de un nuevo frente de crisis. Ante la proclama “Las vidas de los negros cuentan”, los ultras franceses afirman “Las vidas de los blancos cuentan”. Estallaron escenas de tensión en los techos de varios edificios próximos a la Place de la République, enfrentando a anti racistas de ultra derecha radical (defensores de la “identidad blanca”) y anti racistas de ultra izquierda radical, que enarbolaban banderolas de este tipo: “Fuck White Suppremacy” (Follarse a la supremacía blanca).

Sofocada por la fuerza la tensión entre anti racistas blancos y negros, estallaron en la Plaza de la República nuevas tensiones incendiarias.

Varios grupos de “antifas” (ultra izquierda con tentaciones violentas) comenzaron a lanzar cócteles molotov artesanales contra los cordones uniformados de los anti disturbios. La tensión creció cuando la “tropa antifa” consiguió apoderarse de un escudo de vidrio y acero de un anti disturbios desbordado. Las fuerzas del orden zanjaron la “batalla” con gases lacrimógenos y cargas espectaculares.

Alarmada ante el giro violento de la “manifa”, Assa Traoré, presidenta del Comité de apoyo a su hermano, se montó en una camioneta y comenzó a circular pidiendo “calma” a los manifestantes.

Varios grupos “antifas” comenzaron a abuchear a Assa Traoré: “Te pasas, tía. Hemos venidos para dar guerra a la canalla poli”. Desde su tribuna automovilística, la presidenta del Comité Traoré respondía: “Si provocamos violencia la pagarán nuestros hermanos. Debemos continuar la lucha. Hemos convocado otra manifa de apoyo al pueblo palestino para finales de este mes”.

Entre las seis y las siete de la tarde, los anti disturbios comenzaron a controlar definitivamente la Place de la République, envuelta en “nubes” de gases tóxicos (lacrimógenos y cócteles molotov artesanales). Assa Traoré comenzó a pedir una “retirada ordenada”. Comenzaba la “batalla” política.

Los partidos tradicionales, de izquierda y derecha, PS, Los Republicanos (LR, derecha) y La República En marcha (LREM, partido de Macron) están al margen de los incendios multiculturales en curso.

Por el contrario, extrema izquierda y extrema derecha populistas esperan ganar algo (¿?) echando aceite ardiendo al fuego callejero.

Jean-Luc Mélenchon, presidente de La Francia Insumisa (LFI, extrema izquierda), lanzó una diatriba feroz contra el prefecto de París, acusado de ser un “provocador” que “hace todo lo posible para propagar un incendio criminal”.

Marine Le Pen, presidenta de Agrupación Nacional (AN, extrema derecha), se lanzó en tromba contra Emmanuel Macron: “El presidente y su Gobierno se comportan como unos cobardes. No hay autoridad del Estado ante el incendio y saqueo de París”.

Francia : archipiélago multicultural conflictivo.

Place de la République.

Francia multicultural.

París mestizo, work in progress.

París en tiempos del coronavirus.

Fotografía.

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Le Monde, Bagui Traoré, frère d’Adama, renvoyé devant les assises pour “tentative d’assassinat”.

Le Monde, Un frère d’Adama Traoré condamné en appel à six mois de prison pour des violences.

Le Monde, “Le combat des Traoré est magnifique”: des milliers de manifestants en France contre les violences.

Le Figaro, Céline Pina: “Comment l’affaire Adama Traoré est instrumentalisée pour entretenir le communautarisme”.