Caldetes, 28 julio 2020. Foto JPQ.
“Qué pintón, tía”.
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“No jodemos con personas desconocía” “Ni un amigo nuevo, ni una hería” dice Rosalía:
Caldetes by night el verano del coronavirus … “Bésame mucho”.
Sin discotecas ni tugurios nocturnos, la tropa adolescente & juvenil se “refugia” como puede, buscando su intimidad, entre la playa, el paseo y los rincones que consiguen encontrar, mal que bien, en las inmediaciones solitarias de dos o tres chiringuitos para clientela “bien”.
Rosalia y los raperos y la nueva generacion deja atras los ideales hippies y vuelve a la calle a cantar otras cosas como la desconfianza a las generaciones anteriores de paraisos artificiales hoy de paraisos fiscales. Es la epoca del complejo de Saturno el devorador de hijos propios y ajenos. Padres o madres comercializando con jóvenes y aprovechandose de sus debilidades. Desconfianza miedo panico abandono crias perdidas en el asfalto engañadas con jovenes triunfadores de los medios y nunca de los perdedores que son muchos
Muchos se mueren en orfanatos dorados pero sin el cariño necesario para superar la soledad. La destruccion de la mezcla de generaciones da lugar a una generacion criada siempre con los de la misma edad donde encuentran un poco de calor desconfiando de lo de fuera. Oh amigos mi familia pero desconfiemos de los amigos como enseñaba Diogenes. El quejio de estas bellas canciones nos recuerda como se destruye lo real.
Jose,
Qué decir…
A título personal, creo que Rosalía tiene talento y es valiente, creadora, cosmopolita, buena moza.
La «veo» y la escucho muy próxima a sus realidades, que son las nuestras.
Teniendo en cuenta sus orígenes y su carrera me inspira un muy gran respeto, vaya.
Palante..!
Q.-