Quai des Grands-Augustins, 22 marzo 2021. Foto JPQ.
En francés más o menos clásico, la “maison de plaisir” es un prostíbulo.
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Los nuevos propietarios del Restaurant Lapérouse decidieron hace años llamarlo Maison de Plaisirs, “desde 1766”.
Hace siglos que no recalo por el lugar, donde comenzó mi difunta carrera radiofónica. El narrador de la Recherche recuerda el restaurante de este modo, a principios del siglo XX:
“Certains jours au lieu de rester chez lui, [Charles Swann] allait prendre son déjeuner dans un restaurant assez voisin dont il avait apprécié autrefois la bonne cuisine et où maintenant il n’allait plus que pour une de ces raisons, à la fois mystiques et saugrenues, qu’on appelle romanesques ; c’est que ce restaurant (lequel existe encore) portait le même nom que la rue habitée par Odette : Lapérouse…”.
El narrador de la Recherche tendría noticia de la muerte de Swann a unos trescientos o cuatrocientos metros, en el Quai de Conti → El Sena, cuando llega la primavera… “Allí tuve noticia de la muerte de Swann”.
Baroja pasó de largo por esos muelles en incontables ocasiones. Picasso pintó el Guernica a trescientos metros.
Fina says
Quiño,
Cómo me gustan las historias que nos muestras y cuentas de tu París…!!!
En mi modesta opinión, hay palabras que suenan mucho mejor en francés… como la “maison de plaisir”.
Gracias y buenas noches a todos/as.
JP Quiñonero says
Ah, qué ilusión, Fina … efectivamente, los franceses se las pintan solos para dar una cierta elegancia / nobleza a las cosas más turbias… ¡antigua lengua de la diplomacia..!!
Q.-
Jose says
El oficio más antiguo del mundo . Hetairas vestales mujeres de la vida …en las casas de placer donde hombres y algunas mujeres contratan cuerpos y mentes por tiempo limitado y pagan. Qué se busca en esta relación contractual. Una fantasía para el cliente y un beneficio para el vendedor. La venta de placer de todo tipo siempre ha existido. El amor nació en una bacanal donde Poros rico y borracho se aprovechó de Penia pobre y sumisa y nació Amor. Amor siempre pobre y rico en sus relaciones inspirador del mejor arte y distribuidor de riquezas y pobrezas. Las casas de placer y los templos del amor enseñan a los cuerpos y a las mentes a vaciarse para olvidar por momentos las existencias sufrientes . Todos y todas quieren volver al refugio que fue el claustro materno. La única metafísica que se resiste a abandonarnos.
JP Quiñonero says
Jose,
Algo así, efectivamente.
No veo a un restaurante de lujo, de Madrid o Barcelona, presentándose como «Puticlub desde 1789″…
El otro detalle que me llamó la atención … que una empresa que intenta conseguir clientela con mucha pasta, «gente bien», claro, se deje llevar por esas comparaciones…
Vivir para ver…
Q.-