Rue Palatine esquina Place Saint-Sulpice, 26 mayo 2021. Foto JPQ.
Mucho antes de entrar en el canon oficial de la literatura catalana contemporánea, Mercè Rodoreda sufrió un muy prolongado destierro que tiene un puesto esencial en su obra.
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Es el tema de trabajo de Rodoreda Paisatges (Fundació Mercè Rodoreda – Institut d’estudis Catalans), texto de Mercè Ibarz, fotos de Carme Esteve.
Las citas y comentarios de Mercè Ibarz me ayudan a recordar la importancia seminal del destierro, en Roissy-en-Brie, Limoges, Burdeos, Paris, Ginebra, Viena, en la vida, atormentada, con frecuencia, y la obra, trágica, con mucha frecuencia, de una escritora excepcional que hace siglos comparé con Virginia Woolf, Marguerite Yourcenar y Rosa Chacel: Rodoreda, Mercè, Marguerite, Virginia, Rosa y yo.
Destierro que pudo influir en la construcción definitiva del mundo mítico de Rodoreda: la ilusión de un mundo nuevo, mejor, más limpio y celeste, se confunde con un viaje iniciático (el de Adrià Guinart, el protagonista de Quanta, quanta guerra…) al final de una historia trágica, que pudiera confundirse con la historia de Cataluña, por momentos.
La rata de Mirall trencat ilumina un paisaje de decadencia, muerte y destrucción.
Las mariposas y abejas de La mort i la primavera son mudos testigos de un suicidio ritual.
Las palomas de La plaça del Diamant fueron ángeles antes de convertirse en demonios:
“… Un dia vaig córrer més i no em vaig aturar enlloc i vaig arribar una mica més d’hora, vaig obrir la porta del pis com si entrés a robar, aguantant-me la respiració mentre feia girar la clau al pany. La galeria era plena de coloms i també n’hi havia al passadís i els nens no eren enlloc. Tres coloms, així que em van tenir al davant, se’n van anar cap al balcó del carrer, que estava obert de bat a bat, i van fugir deixant unes quantes plomes i ombra. Quatre més, se’n van anar cap a la galeria de pressa, de pressa, de tant en tant fent un saltiró i obrint les ales i quan van ser a la galeria es van girar a mirar-me i vaig espantar-los amb el braç i van fugir volant. Vaig començar a buscar els nens ns i tot per sota dels llits i me’ls vaig trobar a l’habitació fosca on, quan l’Antoni era molt petit, el tancàvem perquè ens deixés dormir. La Rita estava asseguda a terra amb un colom a la falda, i el nen tenia tres coloms davant i els donava veces i les hi prenien de la mà amb el bec. Quan vaig dir, ¿què feu?, els coloms es van esverar i van alçar el vol i topaven per les parets. I el nen, amb les mans al cap, es va posar a plorar. I la feina que vaig tenir per poder treure aquells coloms d’allà dintre… ¡I la gran comèdia! Es veu que ja feia temps que, als matins, els coloms eren amos del pis quan jo era fora. Entraven per la galeria, corrien pel passadís, sortien pel balcó del carrer i tornaven al colomar fent la volta. I era així que els meus lls havien après a estar quiets, per no espantar els coloms i tenir la seva companyia. En Quimet ho va trobar molt bonic i va dir que el colomar era el cor, d’on surt la sang que fa la volta al cos i torna al cor i que els coloms sortien del colomar que era el cor, donaven la volta pel pis que era el cos i tornaven al colomar que era el cor. I va dir que havíem de mirar de tenir més coloms, que vivien a la bona de Déu i sense donar feina. Quan els coloms, al terrat, arrencaven a volar, s’aixecaven com una onada de llampecs i d’ales ..”. La Plaça del Diamant, 1962.
Pla, Rodoreda, Porcel: construcción y crisis de Cataluña.
Mercè Rodoreda, Rosa Chacel y Quiñonero.
Carole says
Vaya, qué de sabidurías catalanas.
JP Quiñonero says
Carole,
Sabidurías, sabidurías … vaya usted a saber…
Q.-
Fina says
Quiño,
¡Muchas gracias! Hasta literatura catalana aprendo en tu INFIERNO…
Buen ánimo y siempre palanteee…!!!
JP Quiñonero says
Ay, Fina,
La literatura catalana me ha dado muuuuuchas alegrías: y muchos disgustos, palos y estacazos de todos los bandos,
Q.-
Ricardo+Lanza says
No tengo perdón. El mismo Mediterráneo me anega, estimado. Es el castigo por mal leer catalán, no entender apenas vocablo alguno, ni siquiera poder decir palabrotas. De mis casi permanentes residencias en los suburbios de la literatura, cada vez más extensos (muchos a ello dan las gracias, que antes, ni se veían; ahora, siquiera, saben que hay letras, y componen palotes, y se hacen allí amistades, parejas, desacuerdos, también, que no es la primera vez que el aquelarre de la presentación de libros acaba como el rosario de la aurora), mientras que el núcleo se reduce, se hace poco visible, se rechaza, incluso, ya que la calidad aquí no trata de factor mensurable, no es salto, carrera, alzada de pesos, que enseguida se ve quien es mejor si se compara. Vale, no obstante, esa reunión e purgatorio de las letras, algo de templada felicidad si que concede. Pues bien…¡me quedo sin la Rodoreda, el Segarra, el Verdaguer… y no voy más atrás porque si me detengo en Ausías March o en el Jordi de San Jordi ya los confundo con el Arcipreste o con Berceo! Totum revolutum del verbo catalán y castellano que, cuando iba a La Franja y paseaba un rato por esa ciudad vieja de Fraga que muy pocos conocen, decía a los paisanos: ¡Castellá, castellá, que si no no me entero! Pereza de las lenguas, estimado, retorno al niño que se conforma con vagidos y espera el biberón, lo siente gratuito, idioma universal su contenido. Saludos a este infierno amoroso en que, de nuevo, hago estación, y lo deseo ¡AY! eviterno.
JP Quiñonero says
Ricardo,
Aquí nos tienes …
…
En mi caso, la literatura catalana en catalán fue un descubrimiento muy temprano, que me descubrió muuuuuchos mundos.
Luego … terminé descubriendo que mi amor por esa literatura caía «mal», peor, o parecía incomprensible … para la tropa catalana en catalán es poco o nada tolerable que un murciano se pongo a escribir de esas cosas… para el resto, suena poco comprensible mi defensa de la lengua y la cultura catalana …
Ese rechazo no ha modificado en nada mi amor por esa literatura, pero me ha distanciado un poco, o un mucho, de … detalle insignificante: nunca fuí aceptado …
En fin,
Q.-
Fina says
Quiño,
Si te sirve de algo, aquí tienes una catalana que admira profundamente tu amor, defensa y conocimientos de la lengua y la cultura catalana.
Siento de verdad que no te hayan sabido valorar como te mereces…
Muchas gracias por aceptarme en tu Infierno a pesar de los pesares que hayas sufrido…
(Ay, Quiño! Me gusta imaginar un mundo en paz y sin fronteras…quizás sólo pueda ser así un mundo de ultratumba…
Buenas noches a todos/as.
JP Quiñonero says
Fina,
Pelillos a la mar, que me quiten lo b … sigo estimando muuuucho a Cataluña, los catalanes, catalanes & la literatura catalana, en catalán y en castellano… Faltaba más…!!!!
Graciassssss
Q.-
Fina says
Saludos, Don Ricardo Lanza,
Cuando Ud. aparece, la estancia se ilumina con su LOGOS…
Ricardo+Lanza says
¡Lástima!, estimado. Bien injusto que lo siento; y en mi caso, deploro mi escasísimo conocimiento del catalán, y más aún las rencillas existentes entre los hablantes de las dos lenguas, bilingües o monolingües, que parece que no se llevan. ¿Qué voy a hacer en Barcelona, luego de entrar y salir de la Seo y Santa María y hacer la ronda de la muralla? ¿Irme al Raval para oír y hablar en castellano? A ver si hago el esfuerzo y me entero de una vez del catalán, no se me vaya a pasar la hora y lo vaya aprendiendo dentro ya del tanatorio y reclame que los del horno aguarden a que les pueda solicitar la quema y el acopio de cenizas empleando el catalán (diré que de Alguer, en la Cerdeña, a ver si así me conceden un rato adicional de vida, la de ultratumba, claro, porque he dicho ya que me expresaba en el interior del tanatorio.
JP Quiñonero says
Ricardo,
Bueno… en Barna se pueden hacer muchas cosas, claro … y la literatura catalana da para muy mucho … dicho eso, es cierto que la evolución de las Ramblas y otros lugares tipicoides inspira una tristeza grande…
Pero, bueno, es lo que hay.
Ellos sabrán.
A ver…
Q.-
Fina says
Don Ricardo Lanza,
Si tenemos el honor de recibirlo en Barcelona, no se preocupe por el idioma, hablaremos castellano…Faltaría más!!!
Lo importante es que su estancia en la Ciudad Condal, que tan bien conoce, sea lo más feliz posible.