Rue Tournon, 27 octubre 2021. Foto JPQ.
Manifestación de extrema derecha: «¡Macron dimisión!». «¡Abajo la tiranía..!».
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Según el último estudio sociológico de la Fundación para la innovación política (FPIP), obreros, clases populares y franceses con dificultades económicas han girado a la derecha o las extremas derechas, alejándose de todos los partidos de izquierdas, ecologistas incluidos.
Según la última edición del estudio «2022. El riesgo populista en Francia», realizado por FPIP, el 60 % de los obreros y empleados franceses dicen estar «seguros» o «bastante seguros» de votar a un candidato conservador; y solo un 36 % se dicen seguros o bastante seguros de votar a algún candidato de izquierda, socialista, comunista, ecologista o de extrema izquierda, en la primera vuelta de la elección presidencial, el próximo mes de abril.
Según el mismo estudio, el 62 % de los franceses sin diploma, el 60 % de los franceses que tienen «problemas para llegar a fin de mes» y el 62 % de los franceses cuyo nivel de vida se ha degradado se dicen seguros o bastante seguros de votar a la derecha en la primera vuelta de la elección presidencial. Entre esas mismas categorías sociales, solo el 29 %, el 36 %, el 41 % y el 30 % anuncian su intención de votar a las izquierdas.
Se trata de la confirmación de un histórico giro a la derecha de la sociedad francesa, donde el centro derecha de Emmanuel Macron, la extrema derecha de Marine Le Pen, la extrema derecha de Éric Zemmour y el candidato o candidata de la derecha tradicional que sea elegido a primeros de diciembre por el partido «Los Republicanos» (LR, derecha tradicional), son los candidatos favoritos en todos los sondeos de opinión, en detrimento de los candidatos de izquierda, Anne Hidalgo (socialista), Jean-Luc Mélenchon (extrema izquierda) y Yannick Jadot (ecologista) y Fabien Roussel (comunista), minoritarios o muy minoritarios.
Dominique Reynié, director de FPIP, y profesor en «Sciences Po.», la escuela de las elites políticas francesas, analiza el proceso de este modo: «Francia es hoy de derechas como no lo era desde hace mucho. Y ese giro tiene muchos rostros: en el posicionamiento voluntario en el eje izquierda / derecha tradicional; y en las preocupaciones nacionales, donde es mayoritaria la inquietud ante la inmigración, la seguridad y el islam. Al mismo tiempo, ese giro a la derecha no tiene un reflejo en la oferta de la derecha organizada, capaz de representar esa tendencia de la opinión. Ha aparecido una diversidad de sensibilidades conservadoras, cuando el único partido de la derecha tradicional todavía no ha nombrado a su candidato a la elección presidencial».
Francia, dos extremas derechas y un nuevo paisaje político nacional.
Jose says
Los bisnietos de Baudelaire y Rimbaud se rebelan en este nuevo siglo diecinueve sin imperio. Cuando no hay colonias fuera del país se crean dentro. La izquierda nació para poder repartir los botines que llegaban de fuera gracias a su desarrollo industrial. Nadie se preocupaba por los habitantes de las zonas conquistadas. Estaban fuera de la historia. La historia estaba en Europa y en dos países emergentes Rusia y América del Norte. Hoy todo es diferente nuevos países emergentes con la mayoría de la población se imponen y en las antiguas metrópolis solo les queda una población en caída libre. Desesperados embriagados ven una nube de la nueva esclavitud que los envuelve y no ven salida a las nuevas ruinas. Solo queda la violencia callejera como nueva forma de distribución en la nueva guerra civil no política más cerca de la delincuencia . Tocqueville ya estuvo en América a aprender la nueva sociedad carcelaria incluso a tener en cuenta países cárcel como Australia. Ayer fue Alemania España… hoy puede ser Francia Inglaterra…
JP Quiñonero says
Jose,
Bueno …
En términos prácticos, las izquierdas (no solo francesas) quizá debieran preguntarse porqué muchos obreros y gente modesta modesta y muy modesta prefieren votar a las derechas o extremas derechas …
Que cada palo aguante su vela,
Q.-