Place Igor-Stravinsky; niña parisina ante la Sirena Niki de Saint Phalle, 30 diciembre 2021. Foto JPQ.

Quizá se trate, por mi parte, de una suerte de «peregrinación» anual, por las mismas fechas, por razones que he intentado explicar en muchas ocasiones…

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«En 1976, en Nueva York, Niki confesó a una amiga italiana, Maréela Caracciolo Agnelli, que el sueño de su vida era crear su propio bosque encantado, a imagen y semejanza del Parque Güell de Gaudí, en Barcelona. Carlo y Nicola hicieron posible ese sueño, ofreciendo a la artista una gran parcela de monte, en la Toscana. Veinte años más tarde, al fin, el Jardín del Tarot (Giardino dei Tarocchi) de Niki de Saint-Phalle, se abría en Garavicchio de Pescia Fiorentina. Una maravilla lúdica. Un jardín, un bosque encantado, poblado de figuras de sueño, que intentan devolver a la tierra una parte de sus antiguos moradores, con los que el arte de Niki intentaba dialogar, con el talento, la gracia y la ilusión de un artista que soñaba con repoblar el mundo con seres de encantamiento, misterio e ilusión, propios de las leyendas y los cuentos infantiles…» → La escultora Niki de Saint-Phalle muere a los 71 años en California.

Cada año, por las mismas fechas, la visito y me recojo ante sus cosas, esperando la primavera, que ella siempre me anuncia y confirma, a su manera:

Niki de Saint Phalle se despierta para anunciar la primavera que vendrá tras el Año nuevo del coronavirus.

Niki & Jean, arte, amor y encantamientos.

Año nuevo… promesa del amor de Niki de Saint Phalle, ante Saint-Merri.

Año nuevo… esperando la primavera con la sirena de Niki de Saint Phalle, ante Saint-Merri.

Año nuevo… esperando la primavera en la Fuente Stravinsky, ante Saint-Merri.

Arte.

Año nuevo.

Fotografía.