Boulevard Saint-Michel, 22 marzo 2022. Foto JPQ.
Ansiedad, insomnio, angustia …
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Le Monde: «Niveaux d’alerte et de vigilance inhabituels, peur de l’avenir, troubles anxieux, insomnies… Psychiatres et lecteurs témoignent des conséquences de l’irruption d’un conflit aux portes de l’Europe, après deux ans de crise sanitaire…» → Comment la guerre en Ukraine affecte notre santé mentale.
Suma y sigue:
París / Francia ¿España? ¿Europa? … Cansancio, tristeza, desconfianza, miedo.
París / Francia ¿España? ¿Europa? … Incertidumbre, inquietud, fatiga.
Ya en los años noventa del siglo pasado vaticinaban una gran pandemia de enfermedades mentales. Mucho antes de la guerra ucraniana. Ya Gustav Jung se fue a experimentar lo que debía ser una cierta salud mental huyendo del progreso urbano y yendo se a vivir al campo . Las seguridades han desaparecido en los años que menos conflictos armados ha habido. Pero la ansiedad la paranoia obsesiónes compulsiones suicidios…aumentan. Nunca como ahora vemos los desatres todos los días. La cultura de la muerte ha conseguido triplicar la población mundial en menos de setenta años. Eso sí casi sin subjetividad las personas se deben medicar viéndose como complejos físicos químicos estropeados. Pronto podremos decir que no aperentamos locura como diría Nixon sino que lo estamos en la época de Biden Putin. No hay lugar en el planeta Tierra donde esconderse para ser uno más en plena Naturaleza. Seremos una especie pastillera que se calmara como pueda.
José,
A ver …
Que todos estamos un poco locos o tocados, es una evidencia. La locura es creerse cuerdo, claro.
Oséase, que dieta mediterránea, café, cava, vino tinto (sin sifón) y alguna cosa rica…
Q.-
¡Ay, Josep!
A ver si somos capaces de mantener un poco de cordura en estos tiempos tan difíciles, sin tener que recurrir a las pastillas…
Habrá otros medios, digo yo…Como bien apuntas tú y Quiño… mantener más contacto con la Naturaleza, la dieta mediterránea y saber disfrutar todas las cosas ricas que nos den alegrías y estén a nuestro alcance…