Carrer de la Séquia, 15 agosto 2023. Foto JPQ.
En materia de patriotismos, banderas y celebraciones patrióticas, confieso mi agnosticismo absoluto.
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Me reconozco, más bien, en la Mala Reputación de Georges Brassens:
“Le jour du quatorze juillet
Je reste dans mon lit douillet
La musique qui marche au pas
Cela ne me regarde pas…” La Mauvaise Réputation / La Mauvaise Réputation.
“Las banderas de nuestros padres…”.
España / Cataluña … Torre de Babel, Babilonia, Nínive, divisiones y enfrentamientos culturales.
El patriotismo es el ultimo refugio de los canallas. Samuel Johnson siglo XVIII. Estamos en el XXI y no hay ningún tipo de refugio ni para canallas ni para adultos honrados. Nadie responde por nadie. Las masas deambulan de aquí para allá se las distrae y se les da de comer. Las banderas cada vez más y más grandes no despiertan las ganas de morir por ellas. Todos quieren morir en los hospitales y si puede ser sedados. El progreso ha conseguido sofisticar las drogas que regala gratis la naturaleza está que han puesto entre paréntesis los modernos de los laboratorios para no sufrir . Ni más ni menos algo que ya habían conseguido los antiguos sin necesidad de hospitales. Morir por ideal colectivo es algo demodé distraerse no. Banderas de metros por todas partes aun no ha sido sustituidas por los logos que nos cuidan bueno es un decir. Nos dan trabajo nos distraen nos dan de comer nos curan… pero aún sus banderas no son grandes. Banderas importantes pues tienen el poder sobre nuestra vida y en nuestra muerte. Ellos deciden y no los patriotas de la nación. Las banderas que hay no son de los que tienen el poder y la riqueza son de los que dicen representar los derechos colectivos e individuales cuando no representan nada en los mercados globales en manos de desconocidos sin refugios conocidos. Los robots los zombis no necesitan símbolos son las nuevas multitudes sin refugio.
José,
«El patriotismo es el ultimo refugio de los canallas..» suena francamente Muy Bien.
Decir eso hoy, en voz alta, en Barcelona o Madrid, Madrid o Barcelona, tanto da, es correr el riesgo del linchamiento público.
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Por lo demás, siempre que hay gente buena y honrada, incluso creyentes buenos y honrada.
Pero el conflicto entre creencias atiza garrotazos, desdenes, despedidas, qué se yo, un horror.
Palanteeee
Q.-
Josep,
No te expongas demasiado por ir contracorriente…
Bona nit!
Buenas noches a todos/as.